El supuesto instigador del crimen de Cabañas espera el juicio en libertad
Domingo 4 de octubre de 2015
“Todas las mentiras que se dijeron dan asco”, opinó de manera contundente ni bien tuvo la oportunidad, durante el breve diálogo de no más de cinco minutos que tuvo con los periodistas de este diario. “Dijeron que mi hijo anduvo diez días armado, con miedo y llaveado en la casa. ¡Era mentira!”, acotó con vehemencia. Y antes de ceder la palabra, la mujer recordó que “estaba en La Plata con los jubilados; doce días estuvo allá”.
Ella es María Suárez (67), la mamá del ex concejal Mario Cabañas (41), quien en la mañana del 15 de diciembre de 2013 murió acribillado en la casa donde ambos vivían, pero opuso tenaz resistencia y antes de desplomarse al suelo abatió de tres tiros al sicario que lo ejecutó: un peligroso sujeto de nacionalidad paraguaya llamado Marcos Martínez Sánchez.
Se la ve fuerte anímicamente, muy segura de sus palabras e inteligente a la hora de detener el diálogo en el momento exacto, justo cuando los sentimientos y el deseo de justicia comenzaban a marcar el tenor de todo lo que su boca decía. “Si quieren saber más, hablen con el abogado”, dijo, y le puso punto final a la escueta charla.
La mujer se perdió entre las perchas de la tienda Confianza, el negocio de ropa que la mantiene ocupada siempre, aunque indefectiblemente todos los días revive el sangriento episodio al ingresar a su vivienda. Es que el escenario donde fue asesinado su hijo queda ahí nomas, atravesando la puerta trasera del comercio.
En ese sitio revive una y otra vez toda la historia. Sabe que el cadáver del asesino está enterrado en el cementerio de alguna de las peligrosas localidades cercanas a la frontera paraguaya, al parecer en Lomas Valentinas, y que el sindicado como instigador disfruta de su libertad pese a que ella misma le abrió la puerta ese fatídico día y lo reconoció, al igual que un automovilista que fue testigo de su fuga una vez que ya estaba hecho el trabajo.
La excarcelación
Judicialmente, muchas cosas pasaron a lo largo de los casi dos años desde que ocurrió el homicidio hasta ahora, pero lo más sobresaliente es que Elías Roberto Espíndola (30), alias Matrix, único imputado por su presunto rol como instigador del asesinato, espera el juicio en libertad, beneficiado por una decisión de la Cámara de Apelaciones en lo Penal de Misiones a pocos meses del hecho y cuando desde la clandestinidad, el sospechoso pedía garantías para entregarse a la Justicia.
De todas maneras, estuvo varios meses detenido y su libertad recién la obtuvo luego de pagar una caución real de 150.000 pesos, que cubrió con bienes. Fijó domicilio en Buenos Aires y nunca más nadie lo vio en la zona, más allá de que algunos rumores lo situaron varias veces en el centro de esta localidad, donde tiene parientes.
La clave de su excarcelación fue un dato que aportó su abogado defensor al pedir el beneficio, y tiene que ver con que supuestamente, esos días en que fue cometido el asesinato, Espíndola estaba trabajando en el conurbano bonaerense. Eso jamás pudo ser probado e incluso el acusado nunca hizo mención en sus declaraciones indagatorias, aunque después se sujetó de ello y como no se pudo confirmar como cierta esa afirmación, los camaristas instaron al juez interviniente a continuar investigando con el imputado por homicidio, libre, pese a que Suárez lo reconoció debido a que lo conocía porque en un tiempo pasado trabajó con su hijo.
De todas formas, una serie de pruebas e incluso algunos testimonios sitúan a Espíndola en la escena del hecho como quien contrató al sicario para asesinar a Cabañas, en lo que fue un presunto ajuste de cuentas, y aprovechando la confianza con éste, hasta lo acompañó a su casa, donde finalmente murieron ambos en un cruce de balas.
Instancia final
Hasta la semana pasada, el expediente con todo el trabajo investigativo estaba en manos del magistrado subrogante en el Juzgado de Instrucción Dos de Eldorado, Roberto Saldaña, quien dio por agotada la instancia de recolección de pruebas y corrió vista a la fiscal Bibiana Alderice, quien está en pleno proceso de análisis previo a pedir la elevación a juicio de la causa, algo que se presume podría ocurrir en el transcurso de esta semana.
En las casi 100 fojas aparecen varios testimonios y pruebas que ayudaron a reconstruir el ataque que sufrió el ex concejal, donde estaría claro que los atacantes habían llegado a la casa a las 6.30 de ese domingo y la madre de Cabañas abrió la puerta en Confianza, porque era habitual que Espíndola se reuniera con su hijo ya que hacía poco lo había despedido de su rol de chofer de su auto.
En esa instancia los hombres amenazaron a la madre de su nueva víctima, aunque le dijeron que no le harían nada pero le exigieron que los lleven con el empresario, que todavía dormía pero fue despertado por Martínez Sánchez, quien se dirigió a la habitación como si la vivienda fuera suya. En ese ámbito, cuando se encontraron cara a cara, se desató una fuerte discusión que derivó en la balacera. Ambos dispararon y se desplomaron en el suelo, mientras que Espíndola escapó a toda carrera y fue visto no sólo por la mujer, sino también por un taxista que los había llevado hasta esa propiedad.
Semanas después, el robo del cadáver del sicario abatido sumó otro capitulo más espectacular a la historia que, una vez más, gira en torno a los negocios secretos de personas conocidas, deudas de muchos billetes, ajustes de cuentas y hombres contratados para matar que aparecen en varias causas penales de la zona, pero hasta ahora ninguna pudo ser resuelta.
"El cadáver no podía esconder nada, pero esta gente al parecer no está acostumbrada a esperar o por algún tipo de motivación religiosa estaban apurados en velar el cuerpo, pero de todas maneras no dejó de llamar la atención, ya que previamente la hermana (de Martínez Sánchez) se presentó de manera muy educada y puso a disposición toda la documentación que se le requirió de la mano de un abogado; nunca tuvo un gesto de prepotencia" recordó una fuente judicial.
Por Cristian Valdez
fojacero@elterritorio.com.ar
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→ El homicidio de Manhardt encendió la última alarma
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→ “El sicario paraguayo es más efectivo”
Ella es María Suárez (67), la mamá del ex concejal Mario Cabañas (41), quien en la mañana del 15 de diciembre de 2013 murió acribillado en la casa donde ambos vivían, pero opuso tenaz resistencia y antes de desplomarse al suelo abatió de tres tiros al sicario que lo ejecutó: un peligroso sujeto de nacionalidad paraguaya llamado Marcos Martínez Sánchez.
Se la ve fuerte anímicamente, muy segura de sus palabras e inteligente a la hora de detener el diálogo en el momento exacto, justo cuando los sentimientos y el deseo de justicia comenzaban a marcar el tenor de todo lo que su boca decía. “Si quieren saber más, hablen con el abogado”, dijo, y le puso punto final a la escueta charla.
En ese sitio revive una y otra vez toda la historia. Sabe que el cadáver del asesino está enterrado en el cementerio de alguna de las peligrosas localidades cercanas a la frontera paraguaya, al parecer en Lomas Valentinas, y que el sindicado como instigador disfruta de su libertad pese a que ella misma le abrió la puerta ese fatídico día y lo reconoció, al igual que un automovilista que fue testigo de su fuga una vez que ya estaba hecho el trabajo.
La excarcelación
Judicialmente, muchas cosas pasaron a lo largo de los casi dos años desde que ocurrió el homicidio hasta ahora, pero lo más sobresaliente es que Elías Roberto Espíndola (30), alias Matrix, único imputado por su presunto rol como instigador del asesinato, espera el juicio en libertad, beneficiado por una decisión de la Cámara de Apelaciones en lo Penal de Misiones a pocos meses del hecho y cuando desde la clandestinidad, el sospechoso pedía garantías para entregarse a la Justicia.
De todas maneras, estuvo varios meses detenido y su libertad recién la obtuvo luego de pagar una caución real de 150.000 pesos, que cubrió con bienes. Fijó domicilio en Buenos Aires y nunca más nadie lo vio en la zona, más allá de que algunos rumores lo situaron varias veces en el centro de esta localidad, donde tiene parientes.
La clave de su excarcelación fue un dato que aportó su abogado defensor al pedir el beneficio, y tiene que ver con que supuestamente, esos días en que fue cometido el asesinato, Espíndola estaba trabajando en el conurbano bonaerense. Eso jamás pudo ser probado e incluso el acusado nunca hizo mención en sus declaraciones indagatorias, aunque después se sujetó de ello y como no se pudo confirmar como cierta esa afirmación, los camaristas instaron al juez interviniente a continuar investigando con el imputado por homicidio, libre, pese a que Suárez lo reconoció debido a que lo conocía porque en un tiempo pasado trabajó con su hijo.
De todas formas, una serie de pruebas e incluso algunos testimonios sitúan a Espíndola en la escena del hecho como quien contrató al sicario para asesinar a Cabañas, en lo que fue un presunto ajuste de cuentas, y aprovechando la confianza con éste, hasta lo acompañó a su casa, donde finalmente murieron ambos en un cruce de balas.
Instancia final
Hasta la semana pasada, el expediente con todo el trabajo investigativo estaba en manos del magistrado subrogante en el Juzgado de Instrucción Dos de Eldorado, Roberto Saldaña, quien dio por agotada la instancia de recolección de pruebas y corrió vista a la fiscal Bibiana Alderice, quien está en pleno proceso de análisis previo a pedir la elevación a juicio de la causa, algo que se presume podría ocurrir en el transcurso de esta semana.
En las casi 100 fojas aparecen varios testimonios y pruebas que ayudaron a reconstruir el ataque que sufrió el ex concejal, donde estaría claro que los atacantes habían llegado a la casa a las 6.30 de ese domingo y la madre de Cabañas abrió la puerta en Confianza, porque era habitual que Espíndola se reuniera con su hijo ya que hacía poco lo había despedido de su rol de chofer de su auto.
En esa instancia los hombres amenazaron a la madre de su nueva víctima, aunque le dijeron que no le harían nada pero le exigieron que los lleven con el empresario, que todavía dormía pero fue despertado por Martínez Sánchez, quien se dirigió a la habitación como si la vivienda fuera suya. En ese ámbito, cuando se encontraron cara a cara, se desató una fuerte discusión que derivó en la balacera. Ambos dispararon y se desplomaron en el suelo, mientras que Espíndola escapó a toda carrera y fue visto no sólo por la mujer, sino también por un taxista que los había llevado hasta esa propiedad.
Semanas después, el robo del cadáver del sicario abatido sumó otro capitulo más espectacular a la historia que, una vez más, gira en torno a los negocios secretos de personas conocidas, deudas de muchos billetes, ajustes de cuentas y hombres contratados para matar que aparecen en varias causas penales de la zona, pero hasta ahora ninguna pudo ser resuelta.
"El cadáver no podía esconder nada, pero esta gente al parecer no está acostumbrada a esperar o por algún tipo de motivación religiosa estaban apurados en velar el cuerpo, pero de todas maneras no dejó de llamar la atención, ya que previamente la hermana (de Martínez Sánchez) se presentó de manera muy educada y puso a disposición toda la documentación que se le requirió de la mano de un abogado; nunca tuvo un gesto de prepotencia" recordó una fuente judicial.
22 meses después.
La causa que investigó el asesinato del ex concejal de Montecarlo pasó a manos de la Fiscal de Instrucción Dos de Eldorado, Bibiana Alderice, quien en los próximos días puede elevarla a juicio oral con Elías “Matrix” Espíndola como único acusado.
La causa que investigó el asesinato del ex concejal de Montecarlo pasó a manos de la Fiscal de Instrucción Dos de Eldorado, Bibiana Alderice, quien en los próximos días puede elevarla a juicio oral con Elías “Matrix” Espíndola como único acusado.
Por Cristian Valdez
fojacero@elterritorio.com.ar
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