Piezas del hotel con mezclas de tonadas

En el hall del hotel del Cenard todo es murmullo, risas y salida y entrada todo el tiempo de atletas de doce  provincias que allí residen, entre ellos los misioneros que se suman al ruido de los apasionados deportistas.
“Somos dos o tres por habitación, nunca tuve problema con las chicas por la convivencia. Por ahí es difícil porque hay cosas que a la otra persona le gusta y a uno no, pero tratamos de corregir todo”, comentó Hahn acerca de su estadía.
En el edificio, que tiene 270 plazas en total, se distribuyen las habitaciones que cuentan en sus instalaciones con camas cuchetas que ocupan chicos de diferentes disciplinas y lugares para crear un ámbito de compañerismo y confraternidad.
“Yo vivo con dos chicos que hacen Mountain bike y nos llevamos muy bien, en nuestro lío”, reveló el Correcaminos Olivera, entre risas.

Barrios faltó a la cita
La obereña Micaela Barrios se encontraba con una fuerte migraña cuando llegó El Territorio al Cenard; aunque se disculpó a través de sus compañeros.

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