Sumariaron a personal policial denunciado por apremios

Jueves 3 de septiembre de 2015
La Jefatura de la Unidad Regional II inició un sumario administrativo interno para deslindar las responsabilidades que podría tener personal del destacamento de Cien Hectáreas denunciado por presuntos apremios contra tres jóvenes, entre ellos un menor de 17 años.
Paralelamente a la instrucción judicial en marcha, desde la fuerza se investiga el accionar de los efectivos que el último sábado se hallaban de guardia y participaron en la detención de tres amigos que volvían de jugar al fútbol.
En principio, los implicados fueron detenidos en la vía pública por la sola presunción de la responsabilidad de uno de ellos en un hecho de robo cometido en un comercio de Villa Lindstrom, cuya propietaria denunció que fue abordada por un joven con camiseta de River, armado con un chuchillo y que se movilizaba en una moto.
A raíz de la denuncia, personal del destacamento inició la búsqueda del sospechoso y dio con los tres muchachos, quienes explicaron que estaban volviendo de jugar a la pelota. Dos de ellos tenían camisetas de River, lo que los habría sindicado como posibles autores del hecho, a entender de los uniformados.
Como contrapartida, los tres se movilizan a pie, no en moto, como indicó la comerciante respecto del sujeto que asaltó. Tampoco hallaron ningún arma blanca en poder de éstos.
Una de las presuntas víctimas es un menor que permaneció 48 horas detenido, incomunicado y sometido a golpes por parte de personal policial, según consta en la denuncia radicada el lunes ante la Fiscalía de Instrucción Dos de esta localidad.
El hecho ocurrió el último sábado, alrededor de las 19, en el barrio 180 Viviendas de Villa Stemberg, cuando los tres amigos -dos de 20 y uno de 17 años- volvían de jugar al fútbol y se dirigían a comprar hielo.
De manera imprevista fueron abordados por una comisión policial que los detuvo y requisó. “Llamaron a un patrullero, nos esposaron y nos llevaron. Al llegar al destacamento nos hicieron bajar, nos pusieron contra una pared y empezaron a golpear a uno de mis amigos, que es menor, y a decirle que tenía que hacerse cargo del robo y preguntaban dónde estaba la moto. A mí un policía me pegaba en la cabeza y me gritaba que no lo mire”, denunció Pablo D. L. (20).
Indicó que él su sus compañeros fueron encerrados en diferentes cuartos. Minutos más tarde Pablo fue liberado.
“Desaparecé de acá y quedate callado, porque si llegás a hablar, la próxima vez te agarramos, te cagamos a trompadas y no zafás”, aseguró que lo amenazaron.
En tanto, el otro joven de 20 y el menor de 17 fueron traslados a diferentes dependencias, sin que sus familiares pudieran verlos hasta el lunes, cuando fueron liberados.