“Soñando por bailar” tendrá como protagonistas a niños virasoreños

Las paredes de madera color lila esperan, día a día, a sus pequeños especiales. Allí, un pasillo angosto invita a pasar. El dicho “la casa es chica, pero el corazón es grande” se aplica con mucha justicia en la Escuela Especial 16 de esta localidad, que desde el lunes buscará cumplir el sueño de tener un nuevo patio y edificio a través del programa Showmatch.
La institución fue creada el 5 de marzo de 1986, y en ese comienzo contaba con 35 alumnos. Hoy recorren sus  aulas 104 estudiantes de todos los niveles, en doble turno.“Desde los 3 años hasta los 21 la escuela abarca toda la trayectoria escolar de ellos, desde la sala de estimulación temprana, la escolaridad, y la formación laboral que intentamos darle a los chicos”, señaló Alicia López, la directora de la institución.
Es la única escuela especial de Virasoro, por lo tanto reciben alumnos con diversas patologías, “no como en las ciudades más grandes que tienen escuela de sordos, escuela de motrices, nosotros tenemos todas las patologías en la escuela. Tenemos doce secciones de grado, pero funcionamos acoplados, dos grados en uno, es porque la escuela es chica, no hay espacio, hay incomodidades”, expresó López.
Tienen muchísimas necesidades que son evidentes. El poco espacio ante una matrícula que aumenta, el escaso mobiliario, las paredes y techos que filtran cuando llueve, son sólo algunas de ellas. “Uno muchas veces naturaliza la necesidad, porque vemos que nos faltan cosas, y es como que ya nos acostumbramos a trabajar en malas condiciones”, indicó la directora.
Y López siguió enumerando las necesidades y cómo intentan abordarlas. “Hace años que venimos gestionando el edificio nuevo, que nos refaccionen la escuela, todas las necesidades que tenemos. Conseguimos que la Fundación Victoria Gil Navajas, que es de Las Marías, nos done un terreno para una escuela nueva. Ese terreno está a tres cuadras del edificio actual. Lamentablemente las gestiones para levantar el nuevo edificio van muy lentas y hace dos años nos habían prometido que sí, que ya salía el edificio, trajeron los planos, pero quedó otra vez en el olvido”.
Con respecto al edificio que ocupan, López señaló que se realizaron, a lo largo de los años, una serie de ampliaciones, modificaciones y refacciones. Pero todo esto se debe al accionar de la cooperadora, padres y vecinos, que hacen un esfuerzo por ayudar.

La inclusión laboral
En otro orden de cosas, la directora señaló que en la escuelita ahora se encuentran trabajando en un proyecto sobre la inclusión laboral, que está bastante avanzado. “Creemos que va a funcionar muy bien. Tenemos uno de nuestros alumnos que está trabajando en el vivero de Las Marías y estamos muy contentos con estos resultados”, dijo.
Además, la institución dicta diferentes talleres, y entre ellos el de cocina invade los pasillos del edificio precario con deliciosos aromas de comidas típicas, y el de la murga es uno de los más destacados ya que han hecho una serie de presentaciones en la ciudad, logrando reconocimiento por parte de la comunidad.

Bailar y soñar
“La participación en el programa de Marcelo Tinelli fue por necesidad. Los chicos felices, no pueden creer que la televisión pueda hacer algo por nosotros”, expresó López.
“El proyecto del patio surgió porque veíamos en la televisión que muchas instituciones ganaban con estos concursos, y dijimos por qué nosotros no podemos participar. Y entonces, una de las docentes, la más tecnológica de todas (risas), insistió, insistió, hasta que pudimos quedar en la preselección”, relató la directora.