Se postergó la reunión con holdouts y Cristina reiteró que no habrá default

Jueves 24 de julio de 2014
Sin temor. | La Presidenta dijo ayer que no le interesa la posible responsabilidad penal por el incumplimiento de la cláusula Rufo.

La reunión entre una comitiva Argentina y los holdouts prevista para ayer fue postergada para hoy, ante lo cual  las acciones volvieron a desplomarse y el dólar paralelo registró una nueva suba por la incertidumbre reinante, pese a los esfuerzos del Gobierno intentando transmitir tranquilidad y a las afirmaciones de Cristina Kirchner asegurando que el país no caerá en default.
 Representantes de Argentina y de los fondos buitre se reunirán finalmente hoy en Nueva York, tras la postergación de ayer debido a que la delegación del país no pudo viajar la noche del martes a Estados Unidos. El mediador designado por el juez Thomas Griesa, el abogado Daniel Pollack, fue quien hizo saber a través de un comunicado que la reunión “no se podía cumplir porque los argentinos dijeron que no llegarían”.
Griesa había emplazado el martes a la Argentina y a los holdouts a negociar “de modo continuo y hasta que haya un acuerdo”, para hacer cumplir su orden que obliga al país a pagar 1.330 millones de dólares, en efectivo.

A todo esto, las acciones líderes cayeron ayer un 2,32 por ciento en la Bolsa de Comercio porteña, mientras los bonos soberanos cerraron mixtos y el dólar paralelo saltó un 2 por ciento, llegando así a 12,70 pesos.

“Argentina pagó”
La Presidenta afirmó, en un discurso durante la inauguración de una planta que la empresa japonesa de motos Yamaha instaló en el partido bonaerense de General Rodríguez, que la Argentina no va a caer en default “porque pagó” sus obligaciones, enfatizó que “no firmará nada que comprometa” a las futuras generaciones y sostuvo que no le interesa la “responsabilidad penal” por las derivaciones del incumplimiento de la cláusula Rufo, sino la “responsabilidad ante la historia y frente a mis hijos y nietos”.
“La Argentina no va a caer en default porque allí entran los que no pagan y la Argentina pagó”, sostuvo la mandataria. “Y no va a pasar por una razón sencilla, elemental... Van a tener que inventar un nombre nuevo que refleje que un deudor pagó, que alguien lo bloqueó y que no dejó que ese dinero llegue a terceros”, desafió.
Pese al tono enfático de su discurso, la jefa de Estado sostuvo inmediatamente que “vamos a seguir hablando, vamos a ir cuántas veces sea necesario adonde tengamos que ir, pero con nuestras razones”.
Acto seguido, reiteró las consecuencias que puede sufrir el país si se viola la cláusula Rufo. “Si uno viola esa cláusula se cae toda la reestructuración”, afirmó, al tiempo que reiteró que “no me van a hacer firmar cualquier cosa, amenazándome con que se va a venir el mundo abajo”, recordando los tiempos del megacanje y el corralito.
“Tengo confianza en que vamos a poder sortear las dificultades con éxito” se esperanzó, y remarcó que “mientras sea Presidenta no voy a dejar embargar nuestra soberanía”.
“Les pido a los argentinos mucha unidad nacional. No importa si no están de acuerdo con el Gobierno. En lo que tenemos que estar de acuerdo es en no volver para atrás en cuanto a la deuda externa”, insistió.
Por su parte, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, acusó a los fondos buitre de “comprar voluntades” en el “sistema político argentino” y a las “usinas opositoras y a los grupos mediáticos concentrados” de generar comentarios de “catástrofe superlativa”, y apuntó contra los aspirantes presidenciales Daniel Scioli, Mauricio Macri y Sergio Massa.


Preocupación y malos augurios ante un día más de incertidumbre
BUENOS AIRES. La cúpula de la Sociedad Rural Argentina transmitió ayer su preocupación a los precandidatos presidenciales del Frente Amplio Unen Ernesto Sanz y Julio Cobos por la marcha de las negociaciones del Gobierno frente al reclamo de los fondos buitre, en un encuentro que mantuvieron ayer.
Por su parte, el economista Maximiliano Castillo, director de la consultora ACM, pronosticó un menor nivel de actividad económica y empleo si el país cae en default por no llegar a un acuerdo con los holdouts antes del 30 de julio.
Castillo explicó que un eventual default generará “a mediano plazo menor nivel de actividad y menos posibilidad de conseguir empleo, porque habrá menor financiamiento para el sector público y para el privado, y por ende, menores posibilidades de inversiones”.
En tanto, referentes de la oposición manifestaron su preocupación por el conflicto con los holdouts, advirtieron que sería una catástrofe que la Argentina caiga en default y reclamaron al Gobierno actuar con inteligencia para lograr una salida favorable.
Los radicales Ernesto Sanz y Julio Cobos llamaron a evitar el default, mientras que el macrista Federico Pinedo, y la massista Graciela Camaño cuestionaron los pocos avances del Gobierno en las negociaciones, y la socialista Alicia Ciciliani remarcó que “sería un error” declararse en cesación de pagos.