Roberto Carlés negó tener afinidad con el kirchnerismo

Jueves 26 de marzo de 2015
El abogado Roberto Carlés, propuesto por la administración de Cristina Fernández para cubrir en la Corte Suprema de Justicia la vacante dejada por Eugenio Zaffaroni, negó ayer que tenga una afinidad ideológica con el kirchnerismo y sostuvo que sus críticas a funcionarios del Gobierno nacional “no han sido pocas”.
Además, Carlés tomó distancia del supuesto apoyo que le dio a su postulación el papa Francisco al recibirlo la semana pasada en el Vaticano, al advertir que “esas son lecturas que no puedo hacer, obviamente”, y apuntó que ese encuentro estaba pedido desde “fines del año pasado”.
Sobre su postulación, que sería tratada la semana próxima en comisión en el Senado, sostuvo que “los requisitos que pide la Constitución, los reúno”, y aseguró acerca de su formación académica “no se pueden hacer muchas objeciones”.
“Tengo 33 años, pero hice dos doctorados, lo cual significó un esfuerzo muy grande”, planteó el abogado, quien recordó que “uno de los mejores ministros de la Corte que hemos tenido, fue el doctor (Enrique) Petracchi”, fallecido en octubre último, de quien, dijo, “no tenía una carrera académica, ni publicó libros” antes de acceder al cargo.
“Es muy difícil saber a priori lo que puede pasar con un juez que se designa; es una decisión de cada senador saber qué juez puedo llegar a ser”, sostuvo Carlés por Radio Nacional.
De su supuesta afinidad con el oficialismo aseguró que “todo eso se ha construido en los últimos meses, sobre supuestas publicaciones en redes sociales”, pero acotó que “han omitido entre mis publicaciones, mis críticas a funcionarios del Gobierno nacional, que no han sido pocas”.
“Una persona alineada no se atrevería a ir tan lejos con algunas críticas que yo he hecho”, amplió.
Respecto a un tuit contra el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, advirtió: “No sé si dije que Macri me daba asco, pasaron 4 días sin recolección de basura y me encontré con esa situación dantesca”, antes de escribir en las redes sociales.
Acerca de su trabajo en el Senado, advirtió que “hoy trabajar en algunos lugares es cargar con una estigmatización, (pero) yo trabajo” en la Cámara Alta en “actos administrativos”, al tiempo que aseguró haber visto “una vez en mi vida” al vicepresidente Amado Boudou, jefe de ese cuerpo.