Primera polémica de Trump con el gobierno de China

Lunes 5 de diciembre de 2016
La conversación telefónica del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, con la mandataria de Taiwán, Tsai Ing-wen, fue solo una "llamada de cortesía", dijo ayer el vicepresidente electo, Mike Pence.
"No fue nada más que aceptar una llamada de cortesía de una líder electa democráticamente", dijo Pence sobre la referida conversación. La charla rompió con décadas de una política diplomática de Estados Unidos y creó un serio riesgo de una fisura con China. Ningún presidente o presidente electo de Estados Unidos había hablado con un líder de Taiwán desde que el fallecido mandatario Richard Nixon aceptó en 1978 la política de Pekín de "una sola China".
China considera a la autónoma Taiwán como parte de su propio territorio y espera que en algún momento se reunifiquen, y cualquier movimiento de Estados Unidos que insinúe su independencia, incluso una llamada de la presidente Tsai, la cual fue anunciada por Trump en Twitter, supone una gran ofensa a China.