Obama reiteró que ningún soldado estadounidense combatirá en Irak

Jueves 18 de septiembre de 2014
Obama. | En el Comando Central de EE.UU. (Centcom) en la base aérea MacDill.
El Presidente de Estados Unidos, Barack Obama, dejó claro ayer que ningún soldado de su país combatirá en Irak, después de que el general Martin Dempsey sugiriera que algunos asesores estadounidenses podrían sumarse a las fuerzas iraquíes para combatir la organización Estado Islámico.
"Las fuerzas estadounidenses que han sido desplegadas en Irak no tienen y no tendrán que combatir", dijo Obama a soldados estadounidenses en el comando general del ejército estadounidense en Florida (sureste).
"No los involucraré en una nueva guerra en tierra en Irak", insistió un día después de las declaraciones de Dempsey, el militar de mayor rango del país, quien sugirió que podrían ir a combatir consejeros militares.
"Usaremos nuestra fuerza aérea. Entrenaremos y equiparemos a nuestros aliados", declaró Obama después de haberse reunido con el general Lloyd Austin, jefe del Comando Central.
"Llevaremos adelante una amplia coalición entre países que tienen un interés en este combate, dado que no se trata sólo de Estados Unidos contra el EI. Se trata el mundo que rechaza la brutalidad del EI", las siglas de la organización yihadista Estado Islámico.
Según Obama, Estados Unidos no puede lanzarse solo en esta lucha. "La experiencia nos enseñó que cuando hacemos las cosas solos y que los pueblos de estos países no están involucrados, vuelven a surgir los mismos problemas en cuanto nos vamos. Por lo tanto tendremos que actuar de otra manera".

Combates
Las tropas de élite iraquíes luchaban ayer contra los yihadistas al sur de Bagdad apoyadas por la aviación de Estados Unidos.
Los aviones de caza estadounidenses mataron al menos cuatro yihadistas en ataques contra tres objetivos del EI al sur de Bagdad, según el ejército iraquí y jefes tribales.
Los ataques buscaban apoyar la ofensiva del ejército iraquí iniciada la víspera en el sector de Fadhiliya, a menos de 50 kilómetros al sur de Bagdad, si bien los soldados "no lograron penetrar" en el sector, indicó un jefe de la tribu de los janabi, quien precisó que los militares formaban parte de la "Brigada de Oro", la mejor del país.
Más lejos de la capital, en la provincia de Anbar, murieron siete personas en un ataque suicida con coche bomba contra un puente estratégico en Ramadi, que resultó totalmente destruido.
Los alrededores de Bagdad se convirtieron en los últimos días en un objetivo clave de la campaña de ataques aéreos estadounidenses, que arrancaron el 8 de octubre y se están extendiendo por todo el país.
La región de Jurf al Sajr representa un sector especialmente importante, ya que se encuentra entre Faluya,  una ciudad de mayoría sunita al oeste de Bagdad en manos del EI, y dos santuarios del chiismo -Kerbala y Nayaf- al sur de la capital.
Tras la retirada de las últimos soldados estadounidenses de Irak a finales de 2011, Obama ha reiterado en varias ocasiones que no enviará tropas terrestres a combatir en el país.
En Siria, los bombardeos de la aviación del régimen dejaron 50 muertos en dos días en Talbisé (centro), una localidad rebelde asediada desde hace dos años, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).