Repercusiones del caso Snowden en los países latinoamericanos

Domingo 4 de agosto de 2013
Los países de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (Alba) que agrupa a nueve naciones de habla hispana y de la que Argentina es observador participante al igual Brasil y Paraguay, denunciarán ante la ONU el plan global de "espionaje" de Estados Unidos revelado por el ex contratista Edward Snowden.
Ello según un acuerdo suscrito a fines de julio durante una cumbre en el puerto ecuatoriano de Guayaquil. Los mandatarios de los nueve países que integran el bloque, encabezados por Venezuela, Cuba, Ecuador y Nicaragua, resolvieron constituir un grupo "técnico jurídico" para preparar "la demanda" contra Washington.
Alba elevará su denuncia contra Estados Unidos por "la implantación de un sistema de espionaje masivo a nivel mundial, violatorio de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, así como de otras normas internacionales", indica el documento. La "demanda" será presentada en la próxima Asamblea General de la ONU, que se llevará a cabo en septiembre. En el documento suscrito en Guayaquil (suroeste) no se especifica el alcance de las acciones que planea emprender el bloque de países críticos con Estados Unidos.
Snowden, un excontratista de inteligencia norteamericano, dio a conocer a comienzos de junio un plan de vigilancia global de Washington que fue duramente criticado por varios países sudamericanos.

Brasil, en campaña
Por su lado, Brasil estudia obligar a almacenar los datos de Internet en el país. El Gobierno analiza la posibilidad de obligar a las firmas extranjeras que ofrecen acceso y servicios en internet a almacenar sus datos en el país y no en el exterior, debido al "colosal" nivel de "concentración de empresas estadounidenses" en el sector.
Esto sucede luego de que se divulgara que Estados Unidos espió masivamente a varias naciones.
"Creo que vamos a tener que obligar a las empresas de Internet a almacenar los datos generados en Brasil dentro de Brasil", afirmó el ministro de Comunicaciones, Paulo Bernardo, en declaraciones publicadas por el diario O Estado de Sao Paulo. El funcionario indicó que "el nivel de concentración de empresas estadounidenses de Internet es colosal, siempre se está en conexión con servidores americanos", recogieron las agencias de noticias Ansa y EFE. El ministro admitió que una medida como esa no formaba parte del proyecto de ley destinado a regular la actividad en Internet, que el gobierno estudia desde hace varios meses para enviar al Congreso.
Pero subrayó que se hace necesaria ahora, luego de que se revelara que Estados Unidos realizó acciones de espionaje masivas y sistemáticas sobre ciudadanos y empresas de numerosos países, incluido Brasil. Esa afirmación fue hecha en un artículo elaborado en conjunto y publicado simultáneamente el domingo pasado por los diarios brasileño O Globo y el británico The Guardian, sobre la base de revelaciones hechas por el exanalista de la Agencia Nacional de Seguridad (NSA, en inglés) estadounidense Edward Snowden.
La revelación motivó un inmediato pedido de explicaciones del gobierno de Brasil al de Estados Unidos, según hizo público el canciller, Antonio Patriota. En ese contexto, tanto Patriota como Bernardo conversaron con el embajador estadounidense, Thomas Shannon, quien “mostró disposición al diálogo” y “reconoció” que servicios de inteligencia de su país registraron “metadatos” de comunicaciones telefónicas y cibernéticas de ciudadanos brasileños, según el canciller.