Más de 1.200 ciudadanos de Santa Fe recibieron fotomultas ilegales

De acuerdo al contenido de un informe oficial de la Defensoría del Pueblo, se precisa que 1.266 santafesinos reclamaron por infracciones de tránsito que consideran arbitrarias e ilegales en lo que va del 2013.
Se trata de multas que se labraron con radares que no están autorizados en pueblos y ciudades de Corrientes, Misiones y Chaco. Además de distintos tipos de infracciones que se hicieron en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, a pesar de que los denunciantes no habían viajado a la jurisdicción porteña en esa fecha. Ello fue consignado en un artículo publicado esta semana por el diario El Litoral. 
En la mayoría de los casos, las multas llegan en los quince días posteriores al viaje, y en algunos casos son montos muy importantes. El municipio de Alvear en Corrientes, por ejemplo, en octubre labró una multa de 3.000 pesos por exceso de velocidad a un santafesino que circuló a 68 kilómetros por hora (la máxima era 60 kilómetros por hora) en un tramo semiurbano de la ruta nacional 14.

Al igual que en los numerosos casos denunciados por El Territorio, para estimular el rápido pago de la infracción, en la notificación se ofreció un descuento del 50 por ciento si se abonaba a los pocos días que se recibió la multa.
En realidad, las comunas y municipios correntinos no están autorizados a labrar infracciones con radares. Lo mismo sucede en la provincias de Chaco, Jujuy y Misiones, por citar algunos ejemplos, según consignó la defensoría.
En el caso de la jurisdicción misionera, la Dirección Provincial de Vialidad reiteró que ninguna comuna o municipio está habilitado para imponer sanciones por infracciones de tránsito en rutas. Los reclamos que recibió la Defensoría de Santa Fe provienen de las comunas de Candelaria, Garupá y Oberá. 
Mientras que en el caso correntino, tampoco las comunas están autorizadas para hacer multas con radares en las rutas. En la Defensoría se recibieron quejas de las localidades de La Cruz, Alvear, Monte Grande y Malvinas Argentinas, entre otras.

Antecedentes
Los reclamos de ciudadanos, tanto de Misiones como de otras jurisdicciones provinciales, por las infracciones ilegales emanadas del sistema de fotomultas, siguen encabezando las problemáticas que deben atender las autoridades misioneras.
Ello se conoció a través de la Defensoría del Pueblo de Posadas, desde donde se dio conocer que “las presentaciones se incrementan cada vez que hay un fin de semana largo”. 
Además, se recordó que en el Plenario de Defensores del Pueblo efectuado en San Carlos de Bariloche entre el 21 y el 23 de marzo del 2012 se analizó una estrategia común frente a la avalancha de reclamos por las fotomultas en las rutas nacionales en diversos lugares del país.
La referida problemática también es tratada por los integrantes de la ONG “Protectora”. Se trata de una asociación nacional de defensa del consumidor, sin fines de lucro, que tiene por finalidad la defensa de los derechos, la información y educación de los usuarios y consumidores. Esa entidad recibe más de 100 reclamos mensuales por las supuestas infracciones en las rutas nacionales detectadas por fotomultas de comunas misioneras.

Ilegalidad
De acuerdo a la legislación vigente, y según el contenido de la Ley 24.449 se cometen ilegalidades al tomar una fotomulta cuando el radar que tomó la supuesta infracción no está autorizado para su uso en rutas nacionales. A ello se suma cuando no hay una señalización adecuada que advierta la presencia de los radares.  
Tampoco cuando no se divisan inspectores de tránsito o una autoridad oficial que notifique al infractor en el lugar de la supuesta infracción. 
Además de la falta de homologación por parte del Estado nacional del cinemómetro, que es el aparato utilizado para medir la velocidad con la que pasan los vehículos por un lugar específico.


Cómo trabajan
Un cinemómetro es un dispositivo diseñado para medir en tiempo real la velocidad de un móvil. Los cinemómetros fijos suelen medir la velocidad mediante sensores establecidos en las calzadas. 
Mientras que los cinemómetros portátiles más comunes utilizan el efecto doppler, determinando la velocidad en función de la diferencia de frecuencia entre la onda emitida y la reflejada por el móvil o una emisión láser.
Además existen cinemómetros portátiles láser, que emiten un haz láser y miden el tiempo que demora en retornar su reflejo desde el móvil, calculan la distancia a la que se encuentra el móvil y en base a la medición de varias distancias sucesivas calculan la velocidad.