Las vacaciones con una estafa

Domingo 4 de agosto de 2013
El robo de identidad es un problema que sufren varios misioneros y es algo que se repita a diario. 
Uno de los más habituales se centra en el robo de datos para realizar compras con tarjeta de créditos.
Una de esas estafas la sufrió Pablo L.
El referido vecino posadeño se  fue de vacaciones, utilizó su tarjeta para comprar unos pasajes, le robaron sus datos.
Gracias a lo anterior, los delincuentes realizaron dos compras por internet y desde hace cuatro meses el usuario está peleando para poder volver a utilizar su plástico.
“Me fui de vacaciones a Rosario y en la ciudad santafesina compré unos pasajes para ir unos días a la localidad  de Colón, provincia de Entre Ríos porque era el bautismo de mi sobrina”, según sus palabras.
“Fui a una agencia y compré los pasajes sin problemas y me fui a Colón. Cuando estaba en Entre Ríos quise volver a usar la referida tarjeta para adquirir unos regalos y me salta que no tenía fondos, cuando yo sabía que no había gastado tanto, pero en ese momento no me hice problema alguno”, continuó relatando el damnificado.

Descubrir la realidad 
“Cuando volví a Posadas, me puse a controlar los gastos que hice y como recibo cada compra en mi correo, después de la compra de los pasajes me saltaban dos compras por internet que no hice. Una era por más de 4.500 pesos y la otra por 600 y entre las tres había menos de un minuto de diferencia, con eso me dejaron sin crédito alguno en la tarjeta”, recordó el ciudadano de la tierra colorada sobre aquel episodio ocurrido a mediados de marzo del presente año.
“Lo más raro es que se trataba de compras en sitios de internet y yo nunca hice compras por ese medio. Ya que siempre tuve desconfianza con respecto a esa metodología. Hice la respectiva denuncia en la empresa y me dieron de baja la tarjeta en cuestión”, agregó el perjudicado.
 “Al poco tiempo me dieron la razón y no tuve que pagar esas compras, pero no pude volver a utilizar la tarjeta. Según me explicaron desde la tarjeta yo pedí la baja de la cuenta, cuando en realidad lo que pedí es la baja de la tarjeta. No se si fue otro problema con los datos o solo un mal entendido en la empresa emisora, porque ellos me mandaron una nueva tarjeta, pero ahora no la puedo usar. Pasaron cuatro meses y todavía hoy, pese a tener una nueva tarjeta, no puedo volver a usarla, más allá de que estoy al día con los pagos”, relató resignado.
A la hora de encontrar una explicación sobre lo que pasó el posadeño adujo: “Según me contó un amigo, que trabaja en sistemas de computación, el problema pudo haber sido que en la agencia donde compré los pasajes, las computadoras estaban hackeadas, y cuando compras pasajes tenes que dar todos los datos, hasta el DNI y los hacker tienen todos tus datos servidos. En pocos segundos van comprando cosas hasta dejarte sin crédito. Según me dijo es una modalidad muy común, tanto en computadoras como con los posnet, que están permanentemente conectados a internet”.
“Conozco amigos que compraron por internet y no tuvieron problemas, pero yo siempre le tuve desconfianza porque siempre hay alguien observando o espiando y lo que me pasó a mi me da la razón, así que si algún día recupero mi tarjeta voy a tener el doble de cuidado y si no es así, volveré al efectivo, simple y sencillo para evitar nuevos dolores de cabeza”, finalizó.