Asesinaron a puñaladas a un joven en el carnaval de Montecarlo

Cuando la penúltima escola cruzaba, un joven de 24 años cayó ensangrentado en medio de los festejos del carnaval montecarlenses. Daniel Gustavo Zárate (24), fue atacado y apuñalado por un grupo de jóvenes. Sin demoras, el joven fue trasladado en un móvil policial al Hospital, pero su cuerpo no resistió las lesiones y minutos más tarde, murió en el nosocomio. Poco después, la Policía detuvo a un hombre y durante un allanamiento en casa de un segundo sospechoso, se incautó un puñal.
Durante horas en la Comisaría, desfilaron más de diez testigos, quienes aportaron datos para avanzar en la investigación, la cual podría tener otras personas complicadas.

 

Los festejos
El sábado a las 22 comenzó el desfile de comparsas. Se esperaba que siete scolas desfilenen la ciudad de La Orquídea. Pero, casi a las 00 del domingo, cuando cruzaba la penúltima comparsa, todo se detuvo.

Más de 3 mil personas que asistieron al evento en la avenida El Libertador, escucharon la voz masculina, que por los parlantes, solicitó una ambulancia con urgencia.
Los efectivos rodearon la zona y un móvil policial trasladó a un muchacho ensangrentado. Hasta ese momento todo era incertidumbre.
En un primer momento, los presentes sospechaban que se trató de una pelea entre alcoholizados -teniendo en cuenta que se vieron varias personas consumiendo bebidas alcohólicas-, otros concluyeron que algún integrante de una comparsa se había accidentado.
Pero, cuando las autoridades informaron que un joven fue apuñalado, la comisión de corsos decidió suspender el desfile y el baile coronación de reina.

 

La investigación
El domingo cerca de las 00.15 unas personas que observaban el desfile, vieron a Daniel Gustavo Zárate (24) tendido sobre la vereda, con lesiones sangrantes.
Ante el hallazgo, dieron aviso a los policías que se encontraban prestando servicio en el lugar, quienes de inmediato solicitaron una ambulancia. Sin embargo, y debido a la gravedad de las lesiones, lo subieron al móvil policial y lo trasladaron al Hospital, donde llegó agonizando. Luego de varios intentos por salvar la vida de Daniel, su cuerpo dijo basta.
Sin perder ni un segundo, los efectivos iniciaron las averiguaciones del hecho y durante horas, varios testigos aportaron información sobre el caso.
Poco después la Policía obtuvo un dato que los llevó hasta una vivienda del barrio Vista Alegre. Los investigadores buscaban a Carlos Alfonso S. de 20 años, sospechado de ser autor del asesinato de Daniel Gustavo Zárate.
Pero el joven no se encontraba, su madre indicó que salió  con rumbo a la Comisaría, por lo que fue interceptado a pasos de la dependencia policial.

 

Lo habrían confundido
Una vez apresado, Carlos Alfonso, el joven manifestó que horas antes se encontraba observando los corsos, cuando cuatro hombres lo acorralaron contra la vidriera de un comercio, donde intercambiaron golpes. Además, el detenido indicó que no conocía a los agresores, quienes también lo golpearon con cintos. Según el examen médico tiene excoriaciones en la región del cuello y un corte en uno de los brazos. Pero, nadie explica de donde salió el arma blanca.
Pero, otra de las versiones que manejan los investigadores es que los agresores de Daniel Zárate lo habrían confundido con otra persona.
En diálogo con El Territorio, la tía de la víctima, quien se encontraba en el lugar del hecho, contó que el detenido había amenazado en otra oportunidad a su hijo e inclusive, y debido al tenor de las amenazas, le sugirió que realice la denuncia, pero no lo hizo. Por lo que supone que confundió a Zárate con su hijo.
La mujer, relató que Zárate había llegado el sábado por la mañana de Buenos Aires para visitar a su familia en el barrio Guatambú.

 

La nena que vio el arma
Mientras se resguardaba el lugar del hecho, la Policía buscó en la zona y lugares aledaños el arma homicida. Hasta que una niña de unos 12 años se acercó a un uniformado y le habría manifestado que el joven que apuñaló a Zárate habría arrojado el puñal, de unos 15 centímetros sobre la vereda. Luego, otro muchacho habría cruzado corriendo, tomó el arma, e ingresó a un comercio aledaño.
En un primer momento, el efectivo que escuchó a la niña no tuvo en cuenta su versión, por lo que se siguió buscando el arma homicida en el perímetro del lugar del hecho.
Horas más tarde, y con el dato que la pequeña aportó, buscaron al dueño del comercio, quien no se encontraba en el domicilio.
El domingo por la mañana, el joven propietario fue hasta la dependencia policial tras saber que era buscado. Allí entregó un puñal.
Según fuentes oficiales, el hombre manifestó que vio al imputado tirar algo dentro de su negocio, pero no dio importancia. Pero, por la mañana, cuando se disponía a limpiar el local, encontró entre los cajones de cerveza, el puñal.
Finalmente, el arma será sometida a las pericias.
 Las fuentes indicaron, que no tenía rastros de sangre, pero si de tierra. Por lo que los detectives analizan si los sospechosos habrían intentado esconderla bajo tierra.
Por otra parte, los investigadores intentan dar con la pequeña que indicó dónde hallar el arma, ya que su testimonio sería clave en la investigación.

 

 

Carnaval violento hechos similares

El viernes 19 de febrero del 201, Jorge Andrés Torres (18), fue asesinado a golpes por un grupo de jóvenes al finalizar las celebraciones del carnaval en el barrio Villa Blosset.
El adolescente salió con dos amigos a presenciar las celebraciones de los corsos. Al finalizar la fiesta, cerca de las 2.50, fue hasta la avenida Roque Sáenz Peña y calle Sarmiento, donde intentó subir a un colectivo ocupado por integrantes de la comparsa de Santa Helena, quienes al notar la presencia del joven, lo bajaron a golpes. En esas circunstancias cayó de espaldas a la cinta asfáltica donde se golpeó fuertemente la cabeza.

 

El jueves 19 de enero en Puerto Iguazú, Luis Marcelo Otroski (18)  perdió la vida al recibir dos impactos de arma de fuego en la zona costal en el momento en el que se encontraba ensayando en la comparsa Arco Iris del Barrio Primavera de esa ciudad. El episodio ocurrió durante una pelea entre varios adolescentes quienes se preparaban para participar del Carnaval de Puerto Iguazú.
El joven que realizó los disparos huyo en compañía del otro individuo a bordo de la motocicleta que los había traído hasta ese lugar.