El hijo de Eduardo Aliverti fue quien atropelló y mató a un ciclista

Un ciclista murió atropellado por el hijo del periodista Eduardo Aliverti, quien llevó su cadáver en el capó del automóvil durante 18 kilómetros hasta que fue detenido en el peaje de Tortuguitas, provincia de Buenos Aires, tras lo cual la familia de la víctima reclamó respuestas a la Justicia porque el conductor fue liberado.
Los familiares de Reinaldo Rodas, un vigilador del country Mapuche de 53 años que solía ir a trabajar en bicicleta, lamentaron ayer que pese a la muerte del hombre el último domingo el joven que lo atropelló, Pablo García, de 28, haya recuperado el lunes su libertad.
“Ese es un asesino y tiene que estar acostumbrado a eso”, estimó Ana Rodas, hermana de la víctima, y apuntó: “No sé cómo tenés que ser para llevar a una persona así (incrustada en el parabrisas), hacerse el chistoso (en el peaje) y decir ‘ay, tengo que pagar para dos’”.
En ese marco, la familia de Rodas pidió ayer ante la prensa asistencia psicológica para el hijo de la víctima, un niño de 13 años cuya madre tiene una discapacidad, y reprochó que “nadie se acercó” a contenerlo “ni del peaje, ni del country y mucho menos el que lo atropelló”.
Ante la trascendencia del caso, ayer por la tarde el periodista Eduardo Aliverti reveló: “Pablo García es mi hijo” (Ver despiece).
Rodas murió atropellado el domingo a las 6.30 en el kilómetro 52 de la autopista Panamericana, cuando circulaba con su bicicleta por la banquina y fue embestido por un Peugeot 504, que conducía un joven de 28 años.
El ciclista, empleado de la empresa de seguridad Watchman, se incrustó en el parabrisas del lado del acompañante y su cadáver quedó tendido boca arriba con las piernas sobre el capó.
“Toda la sangre de él estaba en el asiento del acompañante del auto”, manifestó la esposa.
García estuvo demorado en la comisaría Séptima y como quedó imputado por “lesiones culposas”, un delito excarcelable, recuperó su libertad el lunes por la noche. Por esas horas, la familia Rodas iniciaba el velatorio del hombre.
“Ahora comprendo que la Justicia argentina no sirve”, lamentó Catalina, la esposa. Y remarcó que Rodas “era un excelente hombre y papá, muy trabajador y responsable”.
La mujer recordó que cuando llegó al lugar del accidente le llamó “la atención que no había nada de sangre” y sostuvo que según “las cámaras del peaje, 18 kilómetros lo tuvo dentro del auto”.
La hermana de Rodas, por su parte, dijo ante la prensa que según testimonios de empleados de la autopista Panamericana “cuando la chica del peaje, de 22 años, le dice ‘pero hay alguien en el auto’”, el conductor le contestó: “¿Qué? Tengo que pagar por dos?”.
Los Rodas manifestaron que son una familia oriunda “de Jujuy, de pocos hermanos” instalados en Buenos Aires y recordaron que el hombre fallecido “vigilaba a esta gente rica en el country, pero todo en su vida era el nene, su único hijo”.
“El tendría que estar ya con un psicólogo, pero no hay manera de que pueda entender esto”, añadió una de las hermanas.
“Nadie puede creer lo que pasó; Cacho (como lo conocían a Rodas) era una persona excelente y nadie nos explica qué fue lo que pasó ni por qué dejaron libre al asesino”, dijo Fabián, cuñado de la víctima. Y agregó: “Acá quedó una mujer sin marido y un pibe sin papá; queremos que se haga justicia”.
Según confirmaron fuentes judiciales a la agencia Télam, el test de alcoholemia realizado al momento de la detención determinó que el imputado Pablo Daniel García tenía 1,45 gramos de alcohol en sangre, casi el triple del dosaje máximo permitido para manejar, que es 0,5.
De acuerdo a otra versión, luego del accidente, García habría subido el cuerpo del vigilador al asiento del acompañante y en esas circunstancias manejó hasta el peaje de Tortuguitas donde habría confesado lo sucedido.
García se desempeña como jefe del informativo de la AM 750, donde participa del programa ‘Uno nunca sabe’, acompañado por los periodistas Alejandro Fabbri y Victoria Torres.


El periodista se manifestó por Facebook
El periodista Eduardo Aliverti reveló ayer que el joven acusado de atropellar y matar a un ciclista es su hijo y que ante ese incidente atraviesa hoy “uno de los momentos más dolorosos” de su vida.
“Pablo García es mi hijo. Sólo puedo decir que mis sentimientos y el de mi familia acompañan principalmente a los familiares de la víctima, que se está a disposición de la Justicia en todo cuanto sea necesario para el esclarecimiento de esta desgracia desgarradora”, escribió Aliverti en las redes sociales.
Además, ratificó que desde su familia el “objetivo es la estricta igualdad ante la justicia”.
“Sólo quiero pedir, frente a las versiones circulantes, que todo lo relacionado con los detalles y marcha de la causa sea vehiculizado a través de los canales correspondientes, evitando especulaciones de otro tipo. Sólo eso”, añadió en el texto enviado a varias redacciones y que circula en Internet.