El conflicto policial por salarios que comenzó en Córdoba se extendió ayer a otras cuatro provincias, entre ellas Catamarca, donde policías se enfrentaron a tiros con Gendarmería cuanto intentó desalojar una protesta frente a la Casa de Gobierno y se registraron al menos cuatro heridos.
Policías de Neuquén declararon un “paro por tiempo indeterminado” en demanda de un salario básico de 12 mil pesos, mientras que en Río Negro se manifestaron en Cipolletti a la espera de negociaciones y en La Rioja lograron un incremento y levantaron la protesta, tras una noche con robos y detenidos.
El conflicto en Catamarca comenzó con una protesta de efectivos policiales que ingresaron por la fuerza a la Casa de Gobierno en demanda de mejoras salariales y luego se retiraron a la Plaza 25 de Mayo, frente a la sede gubernamental, de donde intentó desalojarlos la fuerza federal.
El Gobierno implementó acciones preventivas
BUENOS AIRES. El Gobierno nacional dijo ayer que implementa acciones “preventivas y planificadas” para evitar un “efecto contagio” por los saqueos registrados en diferentes puntos del país y destacó el éxito de esas medidas al asegurar que no se produjeron nuevos ataques.
El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, sostuvo que “algunos gobernadores manifiestan que efectivamente parte de estas bandas delictivas” están relacionadas con el narcotráfico, como en el caso del mandatario de Santa Fe, Antonio Bonfatti, y manifestó que en los saqueos registrados el martes en Córdoba “puede haber ocurrido exactamente eso”. El funcionario expresó que se va a someter a los 96 detenidos por los robos en esa provincia “a un proceso de carácter judicial y la Justicia tiene que investigar” para determinar si hay vínculos entre los saqueadores y el narcotráfico.
Capitanich dijo en diálogo con la prensa en Casa de Gobierno que quienes llevan adelante los saqueos son “grupos determinados” con una “estrategia planificada que hay que desbaratar” y aseguró que desde el Poder Ejecutivo están tomando “acciones preventivas y planificadas para evitar un efecto contagio de estos grupos”.
Enfrentamiento con heridos
Policías de Catamarca se enfrentaron ayer a tiros con Gendarmería frente a la Casa de Gobierno, donde permanece la mandataria Lucía Corpacci, cuando la fuerza federal intentó desalojar una protesta salarial de los efectivos con gases lacrimógenos, y se produjeron al menos cuatro heridos. Fuentes del servicio sanitario de la capital (Same) reportaron que asistieron a cuatro personas con heridas de bala de goma. En el marco de los enfrentamientos, en los que la fuerza provincial usó armas reglamentarias, los policías que permanecían en la Plaza 25 de Mayo, frente a la sede gubernamental, se declararon en autoacuartelamiento y convocaron a sus pares del interior a sumarse a la protesta. El choque entre la fuerza provincial y federal se produjo mientras en el interior de la Casa de Gobierno se realizaba una reunión entre policías retirados y en actividad con funcionarios de Corpacci para destrabar los reclamos salariales de los policías.
Del encuentro participa el vicario de la Catedral, Oscar Sala. El gobierno provincial había convocado a los gendarmes para custodiar los comercios ante eventuales saqueos que pudieran producirse a raíz de la protesta que hasta media tarde sólo era protagonizada por un grupo de policías, entre ellos muchos retirados.
En el marco de esa protesta, un grupo de policías había ingresado a la mañana por la fuerza a la Casa de Gobierno, pero luego se retiró a la Plaza 25 de Mayo, donde coincidieron con peregrinos que llegan de diferentes puntos de la provincia para participar de la procesión de la Virgen del Valle, mañana.
Esos efectivos se retiraron a la plaza, donde permanecían cuando Gendarmería intentó el desalojo y se produjo el enfrentamiento.“No vamos a dejar que nos saquen estos mariquitas”, dijeron por handy algunos policías ante el intento de desalojo de la Gendarmería.