Joven confesó un crimen y llevó a la Policía al sitio donde estaba la víctima

Lunes 30 de mayo de 2016

Micaela Ortega, la niña de 12 años que era buscada desde hace un mes en Bahía Blanca, fue hallada muerta y maniatada, con signos de haber sido asesinada, tras lo cual un joven de 26 que la había contactado con un perfil falso de Facebook confesó el crimen y ayer quedó detenido. Según la autopsia, la causa de muerte fue estrangulamiento.
El crimen de la niña generó conmoción en Bahía Blanca, donde grupos de vecinos salieron a las calles para pedir justicia, mientras un grupo de manifestantes quemó la casa donde vivía el detenido con lo que el incendio además destruyó el sitio que podía guardar pruebas para la investigación.
El intendente de Bahía Blanca, Héctor Gay, se comprometió ante Mónica Cid -madre de la niña- a "trabajar juntos para que se haga justicia por Micaela y para que no haya más femicidios en nuestra sociedad".

El cadáver de Micaela Ortega fue hallado cerca de las 23.30 del sábado en un monte cercano a la localidad de Ingeniero White, donde los investigadores estiman que la niña murió poco después de dejar su vivienda en Bahía Blanca el sábado 23 de abril.
El secretario de Seguridad de Bahía Blanca, Emiliano Álvarez Porte, reveló en la madrugada de ayer que "el propio autor del crimen nos llevó hasta donde estaba el cuerpo de Micaela".
La niña era buscada por la Policía con rastrillajes diarios e incluso el Gobierno bonaerense había ofrecido una recompensa por datos certeros sobre su paradero dado que la única pista que dejó fue una carta, dirigida a su madre, en la que decía que había "tomado la decisión" de irse con una "amiga de White" pero nadie en su círculo íntimo conocía a la supuesta compañera.
La familia sospechó desde el primer minuto que la niña estaba en poder de algún mayor que pudo haberla engañado a través de alguna de las cuatro cuentas que manejaba en la red Facebook.
Fuentes de la investigación señalaron que a través de rastreos de comunicación pudieron detectar contactos entre la niña y el joven Jonathan Luna, quien vivía en una casucha de chapa y madera en una zona semirural de Juana Azurduy y Canning.
Los investigadores determinaron que Luna, de 26 años y con un pedido de captura por fuga de una cárcel rionegrina donde cumplía arresto por robo, se hacía pasar por una niña de 12 años con distintos alias a través de cuentas donde se contactaba solo con mujeres jóvenes y menores de edad.
Las pistas permitieron cercar al joven que durante la noche del sábado, tras un nuevo allanamiento a su casa, admitió su responsabilidad y reveló el sitio donde estaba el cadáver de Micaela Ortega.
El secretario Álvarez Porte dijo que a la niña la hallaron cerca de las 23.30 del sábado "con las manos atadas, las piernas cruzadas, con la misma ropa con la que se había ido de su casa".
Tras el hallazgo del cadáver, familiares y vecinos de los Ortega marcharon por las calles de Bahía Blanca para reclamar justicia durante la madrugada.
La Intendencia informó que "todas las áreas y funcionarios del municipio y provinciales se han puesto a disposición de la familia para brindarle la ayuda necesaria en esta terrible situación".
La abogada Fernanda Petersen, quien representa a los Ortega, insistió ayer con que la niña "fue engañada para retirarse de su casa" en Bahía Blanca.

Incendio.
Un grupo aproximado de 50 personas incendiaron ayer por la mañana la casa Jonathan Luna. Los vecinos se acercaron y quemaron la vivienda, custodiada por dos policías y ubicada en Juana Azurduy y Canning en White, donde vive Luna.
Según informó el diario La Nueva, en el lugar trabajó personal de los bomberos voluntarios de White y un patrullero que no pudo evitar la ira de los vecinos por el macabro episodio.
Luna está detenido desde la noche del sábado, cuando tras un allanamiento confesó el crimen y condujo a los efectivos al lugar donde se encontraba el cuerpo de la menor.

Luna se había fugado de un penal en 2014

El joven detenido por el crimen de la niña bahiense Micaela Ortega, se había fugado en 2014 del penal 2 de General Roca.
Jonathan de 26 años escapó en diciembre de 2014 al no regresar de una salida autorizada, por lo que tenía pedido de captura en la provincia, informó ayer el diario de Río Negro.
Esa semana, en la que Luna no volvió al penal, se habían producido otras cuatro fugas en el establecimiento penitenciario.
Luna se encontraba alojado en el anexo penitenciario del Establecimiento de Ejecución Penal 2 de General Roca, conocido como el ex Maruchito, ubicado en la calle Alfredo Palacios.
Se trata de una unidad penal que "cuenta con un régimen de vigilancia más flexible y la seguridad del edificio es menor porque aloja detenidos que gozan del beneficio de salidas transitorias o semilibertad", indicó el matutino.