Un luchador de los libros

Domingo 1 de julio de 2012
Seguir adelante. | Ricardo junto a su hija y sus amados libros en La Palma, un espacio para la cultura. | Foto: Marcelo Rodríguez
Ricardo Raymondo, tiene 57 años y desde los cinco que vive de librería en librería. Es uruguayo de nacimiento y misionero por adopción. Es el cerebro de la Fundación Humanística La Palma, que busca incentivar la lectura y la cultura en Posadas. Es un luchador de los libros.
En cada centímetro  del centro cultural hay un poco de historia, pero no se queda quieto y permanentemente está buscando ganar al lector.
“Transformé la librería en fundación porque sino no me dejan entrar a los penales y a los hospitales a llevar libro a los presos y los enfermos”, contó con un sonrisa Ricardo a El Territorio.
“Estamos en una buena etapa, en los dos últimos años abrieron muchas librerías y todas funcionan. Eso quiere decir que creció el público lector. Eso es lo que yo veo acá. En ese sentido yo estoy recontento porque hace algunos años éramos cinco y nos costaba y ahora hay más de diez que se dedican a la venta de libro y todos andan muy bien”, contó sobre la actividad.
Raymondo anticipó que en los próximos días habilitará una cafetería y presentará los primeros audiolibros que llevará a los geriátricos.
“El audiolibro es una excelente opción para los casos en que los viejitos ya están cansados (o no pueden leer), y en los próximos días vamos a tener varios en ese formato”, explicó.
Actualmente la Fundación tiene 20 mil libros y 100 socios que pagan la cuota de 30 pesos mensuales. “Tenemos 200 socios, pero  no todos pagan la cuota. Yo igual los incentivo con el Facebook, les subo frases o les cuento las novedades, trato de no quedarme quieto nunca”, contó sobre las estrategias que utiliza para atraer al lector.
Sobre el público posadeño dijo “hay de todo, están los que no tienen más remedio que leer, están los que están obligados a leer por estudio o mejorar en alguna disciplina. El problema parte desde la infancia. En el primario y después en el secundario te obligan a leer y los chicos lo leen obligados y muchas veces con bronca y eso no ayuda a sumar lectores”.
Sobre como se gana un lector, Raymondo contó: “Hay que investigar el gusto del lector para ver qué libro lo va atrapar y cuando logras eso nunca más lo perdés porque los libros son maravillosos, nunca más te dejan”.

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