Unidades mixtas del Ejército y Gendarmería vigilarán la frontera
Martes 1 de octubre de 2013
Efectivos del Ejército Nacional asistirán a la Gendarmería Nacional para patrullar las fronteras del Norte aunque serán los gendarmes quienes realicen los arrestos y decomisos de drogas en caso de toparse con contrabandistas.
Sucede que al Ejército, por ley, se le prohíbe el uso de tropas militares contra el delito.
“En principio, se desplegarán hasta fin de año 1.500 de los 4.500 militares prometidos para controlar las fronteras. Los primeros movimientos en los últimos diez días implicaron a unos 300 hombres en Salta y en Misiones, no muy lejos de la zona conocida como la Triple Frontera”, consignó ayer el diario La Nación.
Precisamente esa es la cantidad de gendarmes que fueron llevados a cumplir funciones de seguridad al conurbano bonaerense, tanto de Corrientes como Misiones, había adelantado El Territorio.
A su vez, el mismo matutino porteño, indicó que el Ministerio de Defensa consignó que serán movilizados 1.500 militares, integrantes de la Brigada V de Salta y la Brigada XII de Misiones.
Por su lado, el titular del Ministerio de Seguridad de la Nación, Arturo Puricelli, aseveró el pasado viernes en Posadas que “no se están dejando liberadas las fronteras del país con el movimiento de gendarmes para las operaciones especiales efectuadas en el conurbano bonaerense, ya que existen los recursos humanos y técnicos necesarios para efectivizar la seguridad de la población”, pero era evidente la disminución en cada una de las dependencias de los escuadrones de Gendarmería con asiento en Misiones (ver: El despoblamiento).
Ayer el gobernador bonaerense, Daniel Scioli, aseguró que la Gendarmería seguirá siendo parte de la política de seguridad en la provincia luego de las elecciones del 27 de octubre, incluso “todo el tiempo que sea necesario”, consignó la agencia de noticias DyN.
Scioli, al desmentir que la presencia de gendarmes en las calles dure sólo hasta los comicios legislativos, dijo que “esa es otra de las cosas que se han querido tergiversar para generar incertidumbre en la gente”.
Fue allí donde sostuvo que esa fuerza “va a seguir después de las elecciones y todo el tiempo que sea necesario”.
“Es una decisión que tomó la Presidenta (Cristina Fernández) a través de su secretario (Sergio) Berni”, advirtió el gobernador, en diálogo con el portal Infobae TV.
Además se anunció un refuerzo para la localidad bonaerense de Tigre.
Todo ello en el marco del Operativo Centinela que se puso en marcha a través del Programa Federal de Seguridad, anunciado por el Gobierno nacional hace un mes atrás.
Mediante esta última resolución, gendarmes de distintos puntos del país fueron trasladados para combatir el delito en la zona Norte del gran Buenos Aires.
En Tigre, se sumarán 100 nuevos gendarmes que implementarán un plan de trabajo sobre las zonas más críticas del mapa del delito.
Estos efectivos fueron llevados desde distintas unidades de Gendarmería, como Misiones.
Tras las Paso
Tras la derrota que sufrió en las elecciones primarias, el Gobierno nacional anunció dos planes para reforzar la seguridad en el país.
Por un lado, se enviaron alrededor de 5.000 gendarmes al conurbano bonaerense y por otro, 4.500 efectivos del Ejército fueron trasladados para vigilar la frontera del norte del país como parte del Operativo Escudo Norte.
Ahora se consignó que en un intento de evitar las prohibiciones impuestas por las leyes, el Gobierno armó grupos de doce militares y tres efectivos de seguridad para realizar procedimientos antidrogas en la frontera.
Según consignó ayer La Nación, el Gobierno decidió desplegar unidades mixtas conformadas por efectivos del Ejército y de la Gendarmería para patrullar las fronteras del Norte, en un intento de esquivar las prohibiciones dispuestas por las leyes para el uso de tropas militares contra el delito.
Tras una reunión en el Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas se optó por conformar unidades de soldados y gendarmes para unificar las tareas de los operativos Escudo Norte, a cargo de fuerzas de seguridad, y Fortín, bajo responsabilidad militar.
“Las leyes de seguridad interior y de defensa nacional -y su reglamentación- impiden la acción operativa de fuerzas militares como secciones con armamento para patrullajes, incluso de fronteras, y limitan la asistencia castrense a tareas logísticas de apoyo con materiales".
Sin embargo, la Casa Rosada ordenó el movimiento de 4.500 soldados para vigilar las zonas descubiertas en el Norte por el despliegue de gendarmes en el conurbano. Para cumplir esa decisión se decidió la creación de esas unidades mixtas”, se explicó.
Por lo pronto, las unidades trabajarán en zonas alejadas de las poblaciones, lugares donde el tráfico de drogas se realiza en forma casi individual, con cargamentos en mochilas o vehículos pequeños.
El despoblamiento de gendarmes
El ministro de Seguridad de la Nación, Arturo Puricelli, dijo la semana pasada en Posadas que “desde el 2003 hemos aumentado el presupuesto en Seguridad en más del 700 por ciento”.
A la vez que señaló: “En el caso de la Gendarmería Nacional contamos hoy con un 90 por ciento más de efectivos. Ya que en el 2003 había cerca de 18.000, y hoy suman más de 34.000 en todo el territorio argentino. Mientras que para la jurisdicción de Misiones tenemos dispuestos casi 1.990 uniformados”. Sin embargo, esa cantidad de efectivos no se observan en los escuadrones. Al contrario, según relevamiento efectuado en la provincia, se detectó una notable disminución de uniformados en las distintas dependencias que a su vez motivó pedido de informe en la Legislatura.
Sucede que al Ejército, por ley, se le prohíbe el uso de tropas militares contra el delito.
“En principio, se desplegarán hasta fin de año 1.500 de los 4.500 militares prometidos para controlar las fronteras. Los primeros movimientos en los últimos diez días implicaron a unos 300 hombres en Salta y en Misiones, no muy lejos de la zona conocida como la Triple Frontera”, consignó ayer el diario La Nación.
A su vez, el mismo matutino porteño, indicó que el Ministerio de Defensa consignó que serán movilizados 1.500 militares, integrantes de la Brigada V de Salta y la Brigada XII de Misiones.
Por su lado, el titular del Ministerio de Seguridad de la Nación, Arturo Puricelli, aseveró el pasado viernes en Posadas que “no se están dejando liberadas las fronteras del país con el movimiento de gendarmes para las operaciones especiales efectuadas en el conurbano bonaerense, ya que existen los recursos humanos y técnicos necesarios para efectivizar la seguridad de la población”, pero era evidente la disminución en cada una de las dependencias de los escuadrones de Gendarmería con asiento en Misiones (ver: El despoblamiento).
Ayer el gobernador bonaerense, Daniel Scioli, aseguró que la Gendarmería seguirá siendo parte de la política de seguridad en la provincia luego de las elecciones del 27 de octubre, incluso “todo el tiempo que sea necesario”, consignó la agencia de noticias DyN.
Scioli, al desmentir que la presencia de gendarmes en las calles dure sólo hasta los comicios legislativos, dijo que “esa es otra de las cosas que se han querido tergiversar para generar incertidumbre en la gente”.
Fue allí donde sostuvo que esa fuerza “va a seguir después de las elecciones y todo el tiempo que sea necesario”.
“Es una decisión que tomó la Presidenta (Cristina Fernández) a través de su secretario (Sergio) Berni”, advirtió el gobernador, en diálogo con el portal Infobae TV.
Además se anunció un refuerzo para la localidad bonaerense de Tigre.
Todo ello en el marco del Operativo Centinela que se puso en marcha a través del Programa Federal de Seguridad, anunciado por el Gobierno nacional hace un mes atrás.
Mediante esta última resolución, gendarmes de distintos puntos del país fueron trasladados para combatir el delito en la zona Norte del gran Buenos Aires.
En Tigre, se sumarán 100 nuevos gendarmes que implementarán un plan de trabajo sobre las zonas más críticas del mapa del delito.
Estos efectivos fueron llevados desde distintas unidades de Gendarmería, como Misiones.
Tras las Paso
Tras la derrota que sufrió en las elecciones primarias, el Gobierno nacional anunció dos planes para reforzar la seguridad en el país.
Por un lado, se enviaron alrededor de 5.000 gendarmes al conurbano bonaerense y por otro, 4.500 efectivos del Ejército fueron trasladados para vigilar la frontera del norte del país como parte del Operativo Escudo Norte.
Ahora se consignó que en un intento de evitar las prohibiciones impuestas por las leyes, el Gobierno armó grupos de doce militares y tres efectivos de seguridad para realizar procedimientos antidrogas en la frontera.
Según consignó ayer La Nación, el Gobierno decidió desplegar unidades mixtas conformadas por efectivos del Ejército y de la Gendarmería para patrullar las fronteras del Norte, en un intento de esquivar las prohibiciones dispuestas por las leyes para el uso de tropas militares contra el delito.
Tras una reunión en el Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas se optó por conformar unidades de soldados y gendarmes para unificar las tareas de los operativos Escudo Norte, a cargo de fuerzas de seguridad, y Fortín, bajo responsabilidad militar.
“Las leyes de seguridad interior y de defensa nacional -y su reglamentación- impiden la acción operativa de fuerzas militares como secciones con armamento para patrullajes, incluso de fronteras, y limitan la asistencia castrense a tareas logísticas de apoyo con materiales".
Sin embargo, la Casa Rosada ordenó el movimiento de 4.500 soldados para vigilar las zonas descubiertas en el Norte por el despliegue de gendarmes en el conurbano. Para cumplir esa decisión se decidió la creación de esas unidades mixtas”, se explicó.
Por lo pronto, las unidades trabajarán en zonas alejadas de las poblaciones, lugares donde el tráfico de drogas se realiza en forma casi individual, con cargamentos en mochilas o vehículos pequeños.
El despoblamiento de gendarmes
El ministro de Seguridad de la Nación, Arturo Puricelli, dijo la semana pasada en Posadas que “desde el 2003 hemos aumentado el presupuesto en Seguridad en más del 700 por ciento”.
A la vez que señaló: “En el caso de la Gendarmería Nacional contamos hoy con un 90 por ciento más de efectivos. Ya que en el 2003 había cerca de 18.000, y hoy suman más de 34.000 en todo el territorio argentino. Mientras que para la jurisdicción de Misiones tenemos dispuestos casi 1.990 uniformados”. Sin embargo, esa cantidad de efectivos no se observan en los escuadrones. Al contrario, según relevamiento efectuado en la provincia, se detectó una notable disminución de uniformados en las distintas dependencias que a su vez motivó pedido de informe en la Legislatura.
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