Guardaparques reclaman planes de manejo y seguridad

Planes de manejos actualizados y la necesidad de un sistema de áreas protegidas reforzado, paralelos al avance de diversas obras, parques, rutas y accesos, se encuentran entre los reclamos de los guardaparques de Misiones. Los pedidos se iniciaron el año pasado desde el cuerpo de guardaparques al Ministerio de Ecología.
Consignan que si bien algunos de los puntos que los trabajadores plantearon como reclamos hallaron solución a lo largo del 2012, todavía esperan respuestas a cuestiones básicas que mejorarían la calidad de su trabajo.
El presidente de la Asociación de Guardaparques de Misiones (Agumis), Diego Ciarmiello, en entrevista con El Territorio, planteó que vienen sobrellevando los conflictos que los 110 guardaparques provinciales afrontan por estos días y desde hace más de un año. En el 2012 la lista de reclamos incluía mejoras salariales y la exigencia de planes de manejo para cada parque provincial. También la entrega de vehículos y ropas adecuadas para la selva, las cuales fueron entregadas después de dos años de demanda.
“La gestión política deja mucho que desear. El Ministerio de Ecología aporta mucho a la acción y deja de lado la planificación a largo plazo. No se está planificando”, manifestó Roni Rosa a este diario, desde su postura de delegado del gremio de Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) que nuclea a los guardaparques.
Por su parte, Ciarmiello remarcó que hay una enorme falencia en el sistema de áreas protegidas de la provincia relacionada a cuestiones técnicas y de gestión de los recursos disponibles para las áreas.

Deterioros
El presidente de Agumis recordó que desde el 2008 comenzó a deteriorarse tanto la institución del Ministerio de Ecología como el cuerpo de guardaparques y, por lo tanto, los parques. “Hubo un empobrecimiento salarial, la cantidad de recursos que tuvimos hasta antes del 2008 comenzó a escasear, ya sea los vehículos, la instalación de infraestructuras en los parques, todo se empezó a deteriorar”, manifestó.
“Nosotros vemos que avanzan, las rutas, el acceso al Moconá, las obras en el Salto Encantado. Sin embargo los parques siguen sin planes de manejo”, expresó Ciarmiello.
En este punto, remarcó la importancia que tienen esos planes  para cada uno de los 21 parques provinciales en Misiones.
“Los planes de manejo son una herramienta de gestión fundamental porque aborda todas las cuestiones de control y vigilancia, la administración financiera de un parque, establece las zonas de alta protección ecológica, las zonas de uso público, las actividades de educación ambiental. Y hoy seguimos con un sistema de áreas protegidas sin planes de manejo, porque duran sólo diez años y los que están ya tienen más de doce”, puntualizó el presidente de Agumis.

Áreas protegidas
Desde la Asociación de Guardaparques plantean la necesidad de fortalecer la gestión del sistema de áreas protegidas. De acuerdo a la Ley de Ordenamiento Territorial de Misiones, los parques provinciales son considerados zonas de máxima protección, razón suficiente para reforzar los mecanismos de cuidados.
Por esto, desde Agumis sostienen que “necesitamos un área de gestión del sistema de áreas protegidas, que pueda hacer uso de recursos de manera rápida y eficaz”.
“El sistema de áreas protegidas depende del Ministerio de Ecología, el cual es un organismo de recaudación, por lo tanto estamos en condiciones de que los parques tengan recursos de manera sostenida y que no tengan que depender de un financiamiento externo, de fondos nacionales o internacionales”, manifestó Ciarmiello.

Trabajo riesgoso
En Misiones hay una serie de zonas que son consideradas las más riesgosas por los guardaparques. La mayoría de ellas son zonas de frontera.
Dos de ellas son la reserva Yaboty, que abarca más de 200 mil hectáreas. También la región que abarca la Colonia Pepirí hasta Paso Rosales, que incluye 40 kilómetros de selva virgen y que constituye una frontera con Brasil por la que se puede pasar caminando.
Los mayores problemas que enfrentan estos parques fronterizos son los relacionados a la caza, ya sea por deporte, para vender pieles de animales autóctonos o comercializar sus carnes, y la búsqueda de especies también con valor comercial. Además hay un fuerte abuso de extracción de recursos naturales.
“El cuerpo de guardaparques no tiene seguridad”, fue la contundente afirmación de Diego Ciarmiello.
Las guardias de los guardaparques incluyen las estadías en zonas apartadas de las ciudades o pueblos. En algunos parques, sostienen que no disponen de radios a las cuales recurrir en caso de emergencia.
Indican que a esto hay que agregarle el frecuente enfrentamiento con los cazadores furtivos que ingresan a través de la frontera con Brasil o Paraguay. “Los cazadores están dispuestos a disparar porque saben que están en un territorio en el que no deberían”, manifestó Ciarmiello.

Portar armas
Tanto desde Agumis como desde ATE, pidieron que el Ministerio de Ecología avale la tenencia de armas para protección y defensa.
“Patrullamos el monte sin tener una reglamentación que nos permita la portación de armas. Pero tenemos que entrar con ellas a la selva y el Ministerio no nos da ese amparo legal que necesitamos”, expuso el presidente de Agumis, y agregó que “es hora de que nos den las herramientas necesarias para que podamos desarrollar nuestro trabajo correctamente”.
Asimismo, Roni Rosa expresó que “esperamos que este año o el año próximo se sancione la Ley que nos permita portar armas. El año pasado no se pudo. Todavía no es una cuestión gremial sino administrativa”.