Un especialista advierte sobre ataques y robos de los datos

Domingo 4 de agosto de 2013
Especialista. | Labaca Castro.

Con la mayor valoración y uso de datos personales a través de medios electrónicos, la seguridad y protección se están volviendo servicios indispensables tanto para usuarios hogareños como para empresas.
Desde la firma Eset (creadora de un famoso antivirus y especializada en seguridad electrónica) se explicó a El Territorio que a través de los medios electrónicos se busca información directamente relacionada con el poder adquisitivo de los usuarios.
Y, también se analizó en que en el mundo son cada vez más frecuentes los ataques para robar datos y bases de datos.

“En primer lugar lo que vemos es que están habiendo muchos ataques a las empresas donde se guarda información personal de usuarios. Antes se atacaba a usuarios a través de sus computadoras y era responsabilidad de ellos (esto sigue pasando), pero ahora además son frecuentes los ataques a servidores de las empresas donde se guarda la información de los usuarios, están habiendo muchos casos de páginas atacadas donde se apunta a robar muchas contraseñas”, explicó Raphael Labaca Castro, coordinador de Awareness & Research de Eset Latinoamérica.

Uso de datos
Sobre el uso que pueden darse a los datos, Labaca Castro distinguió “una de las cosas que pueden hacer es vender los datos con fines publicitarios, esto sería lo menos peligroso y lo más peligroso es que lo vendan en el mercado negro a delincuentes. Al acceder a nombres de usuarios, contraseñas, con eso pueden llegar a obtener información para acceder a cuentas bancarias, el daño que puede hacerse es muchísimo mayor”.
Desde Eset, se creo en el país el sitio Argentina Cibersegura, donde se recomienda a usuarios prácticas para mejorar la protección de su intimidad. Sobre ello, el representante de Eset apuntó más consejos para los usuarios misioneros. 
“Lo primero es darle la debida importancia de la información que se brinda a través de internet. Cuando nos dan de alta en alguna página tratar de llenar los formularios con la información mínima, no dar información de más".
El especialista lo que recomienda es tratar de diversificar las claves. Explica que "hay mucha gente que por no acostumbrarse a tener varias claves, lo que hace es usar la misma para todas las páginas. Y resulta que si te roban esa clave, es la misma del correo electrónico. A partir de allí, pueden acceder a datos muy personales".

La contraseña es vital
Entonces, insiste el especialista, " la importancia que se le debe dar a las contraseñas debe ser variado y acordes a la seguridad de los datos accesibles".
Advierte que por otra parte, además del robo de información, existen también muchos códigos maliciosos que roban muchos datos de los usuarios. "Y ante ellos hay soluciones (Eset mad security) que sirven para proteger datos de los usuarios hogareños. La verdad que es un requerimiento mínimo no negociable que cada persona debería tener en su computadora".


En la era de internet, los jueces no cazan una

POSADAS.
  Las causas en las que internet tiene algo que ver, se multiplican a un ritmo constante. Sin embargo los operadores del Poder Judicial encargados de brindar el servicio de Justicia, todavía tienen mucho que aprender sobre el tema. Es lo que sostiene Analía Zygier, directora de Diario Judicial.com, al  cuestionar que “Internet se inventó a fines de la década del sesenta hace más de cuarenta años, y tiene el formato actual basado en la web y es de acceso para el público en general desde 1990, hace más de veinte. Por eso nuestros jueces no tienen el menor derecho a seguir tocando de oído en el tema, con la excusa de que se trata de temas novedosos”.
Detalla en su análisis que dentro de la Justicia hay distintos perfiles. El que sabe que no sabe, pero no le interesa saber. Son temas demasiado modernos y además “no está legislado”.
El que no sabe, pero hace como que sabe.  Recurre a algunos colaboradores del juzgado, que por ser más jóvenes presumiblemente la tienen más clara.
El que no sabe, pero cree que sabe. Otro que no entiende demasiado, pero está orgulloso de saber navegar por internet. El Derecho no es otra cosa que sentido común, proclama y aplica una analogía tras otra (Internet no existía en la época de Velez Sarsfield).
El que sabe algo, pero se capacita para saber mejor. Entiende que no es tan sencillo como parecía y que tampoco es algo tan difícil de entender como la física cuántica. Ante la duda, siempre están los expertos a los que puede consultarse.
Plantea que en la actualidad, en la práctica sabemos que el Derecho siempre corre a la realidad de atrás. Obviamente no puede hacer otra cosa, sin embargo es deseable que en esa carrera desigual la ciencia jurídica práctica, es decir, el trabajo concreto de los tribunales, trate de pisarle los talones a la realidad lo mejor que le sea posible.
“En muchos juzgados y salas es de práctica cortar y pegar formulismos de pura dogmática civil, trazando analogías basadas en el poco conocimiento de la materia”.
 Muchos pensarán que el problema radica en la edad de los jueces. Que se trate de cargos vitalicios puede hacer pensar que se trata de gente mayor que obviamente no nació ni se crió con las nuevas tecnologías. Pero recuerda que, sin embargo, el nutrido fuero civil ha tenido una gran renovación en los últimos años. Hubo numerosos concursos y resultó elegida gente nueva, evaluada modernamente con el último grito de la moda en tema de elección de magistrados.
A fuerza de concursos, compulsa de antecedentes y pruebas de oposición, se supone que tenemos a los mejores jueces posibles.
Cuestiona, entre otros aspectos, que la capacitación en temas tecnológicos brilla por su ausencia.