El uso abusivo de pantallas táctiles ya causa dificultades motrices en los niños

Lunes 20 de febrero de 2017 | 02:00hs.
Problema de motricidad fina en los niños por el uso de tabletas y celulares. | Foto: Clarín

La ciencia todavía no logra ponerse de acuerdo sobre los efectos de largo plazo que tienen la exposición prolongada y el uso excesivo de pantallas táctiles en la primera edad. Sin embargo, tanto en el Hospital Garrahan como en INECO, Instituto de Neurología Cognitiva, reciben asiduamente a chicos con claras sintomatologías de retraso o ausencia del desarrollo de la motricidad fina, entre otros síntomas.

Los niños tienen un alto desarrollo de la plasticidad neuronal. Aprenden todo muy rápido según los estímulos. Los adultos al escribir lo hacemos de manera automática porque en nuestra memoria está guardada una información llamada gesto gráfico que recuerda el recorrido de las letras. Sin la habilidad que aprende el cerebro para hacer este recorrido, el chico no puede escribir. Un ejemplo puede ser cuando un adulto agarra los palitos de sushi por primera vez y no puede dominarlos porque no se trata de un movimiento aprendido.

“Los chicos hoy están sobreexpuestos al uso de pantallas de forma indiscriminada y esto puede estar influyendo en el desarrollo de la motricidad fina”, dice la psicopedagoga del Hospital Garrahan Laura Olivera. “Vemos continuamente dificultades en su desarrollo gráfico. El chico no se ubica en el renglón, tienen dificultad del tipo viso constructiva, caligrafía ilegible o tamaño de letra desproporcionado”.

“Hoy, se utilizan las tablets y los celulares como ‘chupetes electrónicos’ para que el chico se calme, se entretenga o deje de llorar”, subraya Olivera. “El momento de juego con los padres es fundamental porque construye la subjetividad del niño, y es un puente emocional y de contención irreemplazable por una tableta”.

La terapista ocupacional de INECO, Constanza Gasibe, señala que el uso ilimitado de pantallas también puede impactar en la postura de los niños, ya que reciben chicos con debilidad en los músculos extensores del tronco, lo que les impide mantenerse erguidos. “En las manos vemos problemas para la coordinación de los dedos, dificultad para que ambas manos trabajen juntas y falta de destreza y fuerza”, consignó Clarín.

Pero el tema tiene otra cara. Los especialistas indican que el uso de pantallas también permite el desarrollo del cerebro en otras áreas, como el análisis visual que permite la evolución de otras de inteligencias no tan prácticas. “Hoy con las pantallas los chicos resuelven rápidamente experiencias visuales complejas que con un objeto real les llevarían mucho más tiempo”.

Jorgelina Vignolo, terapueta de familia infanto juvenil de INECO, advierte: “Las familias que juegan juntas aprenden juntas. Hay que estar alerta a cualquier situación que pueda ser síntoma de adicción y regular el tiempo de uso de dispositivos para estimular otros juegos motrices o de interacción”.