Caso Rothe: “Nunca hubo justicia, ni por Nico ni por todos los que han muerto”

Martes 22 de agosto de 2017 | 07:15hs.
Raquel pidió compromiso de las familias para evitar muertes. | Foto: Graciela González.

Este no es un día más para la familia Rothe. Se cumplen siete años de la trágica muerte de Nicolás como consecuencia de un conductor irresponsable que  corriendo una supuesta picada en plena avenida El Libertador de Montecarlo, atropelló al pequeño que caminaba de la mano de sus padres por la vereda, en inmediaciones del casino local.

 

Nico, como todos lo conocieron, en ese entonces tenía 13 años y aún ahora, que estaría con 20, su familia sigue llorando su temprana perdida y lamentando el accionar de los jueces que condenaron al protagonista de su muerte (Martín, 19 años) a solamente dos años de prisión en suspenso y cinco de inhabilitación para conducir vehículos.

 

Es decir que, hoy, cuando los Rothe vayan al cementerio para visitar la tumba de su entrañable hijo, posiblemente se crucen -sin notarlo- con el causante de su muerte, ya que la condena impuesta se dio por cumplida hace cinco años y el culpable pudo volver a manejar hace dos.

 

“Sentimos su falta todos los días, en cada cosa que surge, que uno va haciendo o proyectando, en todo momento recordamos que a Nico le gustaba esto o aquello. Era el único varón” contó Raquel Zuge en una charla íntima con El Territorio. La mamá de Nico dijo que, siete años después, siguen “tratando de concientizarnos de que la vida avanza, de apoyarnos en nuestras dos hijas y en la nieta que nació después, pero igual siempre va a faltar ese pedacito para seguir. Cuesta aceptar, más por la manera en que se nos fue”.

 

Sin muchas vueltas, acongojada, agregó que “nunca más nada te devuelve esa perdida, podes tener más hijos pero que nunca van a ocupar el lugar del que se fue. Hablé con gente que pasó por lo mismo, que perdió a un ser querido por imprudencia de otros y nunca hubo justicia, ni por Nico ni por todos los que han muerto en hechos que se podrían haber evitado. Creo que desde la justicia tendría que haber más apoyo, hablo por mi y por los demás” consideró.

 

Dolor multiplicado
Más allá de la muerte de su hijo, el dolor se multiplica en la familia cada vez que se enteran por las noticias sobre las muertes de otros chicos o adultos atropellados en avenidas y rutas de la provincia por acciones irresponsables, además de evitables, de los conductores.

 

Ejemplos hay de sobra. El más reciente sucedido cerca, en Eldorado, y es el que involucró a Juan Manuel ‘Koki’ Benítez (12), atropellado en la vereda de su casa por un automovilista que se fugó y hasta ahora no fue hallado. En la lista aparece también Claro Dávalos (64), muerto en manos de un policía que lo chocó con su auto cuando cruzaba sobre la senda peatonal, y también las víctimas de la denominada tragedia de Santiago de Liniers, donde cuatro personas perdieron la vida al chocar el auto en el que viajaban contra otro, cuyo conductor manejaba borracho. 

 

“Entiendo que se está haciendo un buen trabajo desde el tránsito, pero creo que hay otras cosas que mejorar y es desde las casas. Tenemos que ayudar como padres, ciudadanos, comunidad, como familia, para que cada uno ponga su granito de arena. Si desde las casas no enseñamos a cuidarnos y cuidar al otro, esto no va a cambiar” reflexionó la mamá.

 

Más allá de eso, lamentó “la falta de justicia, porque en definitiva, si hay un poco de justicia creo que va a cambiar la situación. Se le debe dar más valor a la vida humana, al que se va, porque lo que veo es que para la justicia el que ya se fue, se fue, murió, y eso no puede seguir así o vamos a seguir teniendo mas Nico, más Koki, más Claro y tantos otros”.

 

Ya al final de la charla, conmovida, la mamá de Nico dijo observar “que cada vez que sucede un hecho de transito grave, con muertes, por un tiempo todos andan cuidadosos pero luego vuelven a lo mismo. Por eso digo que podría llegar a haber un cambio si las familias cuidan a los suyos con educación y conciencia, además de leyes más justas”.

 

Velocidad y muerte en Montecarlo
Nicolás Rothe (13) murió el domingo 22 de agosto de 2010. Junto a sus padres, salió de una iglesia por lo que siguieron caminando por la vereda de la avenida El Libertador, rumbo a su casa, hasta que un automóvil cuyo conductor fue acusado de correr picadas, perdió el control y se lo llevó puesto a una velocidad estimada en 120 kilómetros por hora.

 

Como consecuencia de eso, sufrió un traumatismo de cráneo con pérdida de masa encefálica, entre múltiples lesiones que ocasionaron su deceso en el acto. Tiempo después, en Eldorado, condenaron al causante de la muerte, Martín (19), por el delito de homicidio culposo.