“Mis hijos están llenos de piques y sucios y son muy maltratados”

Viernes 23 de marzo de 2018 | 07:50hs.
Sociedad | Las fotografías fueron adjuntadas a la denuncia policial.
Cansado de trajinar dependencias oficiales, Ricardo Giménez (28) decidió hacer público el pedido de auxilio para sus dos pequeños hijos que están a cargo de la madre y padecerían todo tipo de maltratos y necesidades, al extremo que exhibió fotografías donde se observa que los pequeños están cubiertos de piques.

Con las constancias del caso, confirmó que radicó varias denuncias por presunto maltrato y abandono de personas ante la Comisaría de la Mujer y el destacamento de Cien Hectáreas de Oberá, con jurisdicción en el barrio San José II, donde los menores residen con su progenitora y su concubino.

“La Policía y la Justicia están al tanto de todo, lo mismo la Municipalidad, pero mis hijos siguen con la madre y cada vez están más enfermos. Mis hijos están llenos de piques, sucios y son muy maltratados. No sé qué esperan las autoridades para atender a las criaturas. Es desesperante saber que están pasando tan mal”, lamentó Giménez.

En diálogo con El Territorio, mencionó que el 27 de febrero pasado vio por última vez a los menores, un nene de 3 años y 10 meses, y una niña de 2 años y 4 meses.

El hombre está casado con la madre de los pequeños, identificada como Liliana R. (19), aunque explicó que hace un año se separaron de hecho, tras lo cual la mujer formó pareja con otro sujeto.

Al respecto, subrayó su preocupación por supuestos maltratos que padecerían sus hijos a manos del concubino de la mamá.
“Los vecinos me contaron que el tipo les maltrata y les pega a mis chicos, sobre todo al varón. Dicen que los obligan a comer afuera con el perro, por eso debe ser que tienen tantos piques por varias partes del cuerpo. Da pena ver y no poder hacer nada”, reflexionó.

Crudas imágenes

En las fotografías que acompañan a la última denuncia se observa que los menores presentan innumerables lesiones y piques en diferentes sectores del cuerpo, incluso las partes íntimas. A simple vista se nota que varias heridas están infectadas.
Giménez se gana sustento con la venta de chipa en el centro de Oberá y reside con su padre y un hermano, en el barrio San Miguel, a pocas cuadras de la casa donde viven sus hijos.

Consultado al respecto, explicó que meses atrás la mujer también lo denunció por presuntos maltratos, tras lo cual la Justicia ordenó la prohibición de acercamiento.

“Ella se quedó con mi casa, pero eso no importa si mis hijos están bien. Después me denunció porque yo le reprochaba que tiene mal a las criaturas, pero ella misma incumplió la prohibición de acercamiento al venir a la casa de mi papá varias veces. Después le volví a decir que los chicos están enfermos, con piques, y por eso no les trajo más”.

También agregó un dato que lo angustia sobremanera: “Los vecinos dicen que ella y el concubino tienen relaciones sexuales delante de las criaturas. Ya no duermo de noche pensando en lo que están pasando esos inocentes”.

Ante la consulta de este matutino, desde el área social de la Municipalidad aseguraron que el lunes concurrieron a la vivienda de la progenitora, pero los asistentes sociales no hallaron a nadie en el lugar.

Por Daniel Villamea
fojacero@elterritorio.com.ar