Cansado de que le robe, atacó a tiros a su vecino en San Isidro

Sábado 24 de enero de 2015 | 07:05hs.
Intervención. | Personal policial debió permanecer en el lugar para que las familias de los involucrados no se crucen. | Foto: Marcelo Rodríguez

El barrio San Isidro sufrió minutos de tensión ayer cuando un hombre de 38 años, cansado de las andanzas delictivas de un joven de 20 conocido en la zona como Marquitos, tomó una escopeta de fabricación casera y le disparó luego de una fuerte discusión que mantuvo, por el robo de la batería de la camioneta con la que trabaja.

 

A raíz de ello, el herido debió ser trasladado al hospital Madariaga con una grave herida de perdigones en una pierna y parte de la espalda, mientras que el agresor fue detenido por la Policía y ahora permanece alojado en una celda de la Seccional Novena a disposición judicial.

 

Según señalaron vecinos de la zona, Marquitos atemorizaba al barrio con sus constantes robos en los hogares, sin importarle siquiera si son conocidos o hasta amigos suyos, como tampoco si las víctimas de sus atracos callejeros son menores de edad.

 

Las delitos los cometía alcoholizado o drogado, remarcaron vecinos, por lo que se convirtió “en un verdadero peligro” para todo aquel que se lo cruzara.

 

En el caso de ayer, la reacción violenta se produjo alrededor de las 9.30, en la vivienda de José A., quien posee un pequeño taller donde repara cubiertas de motos y bicicletas, entre otras labores.

 

Según el relato de testigos, todo habría comenzado durante la madrugada cuando la esposa de José advirtió que le habían robado la batería de la camioneta Ford estacionada frente a su casa.

 

Inmediatamente las sospechas recayeron en Marcos B., quien vive en diagonal a la vivienda de José y quien, minutos antes, se hallaba bebiendo junto a un grupo de amigos a pocos metros.

 

Esto motivó que los damnificados se dirigieran hasta el domicilio de Marquitos, donde luego de una acalorada discusión lograron que uno de los hermanos del implicado les entregara la batería robada.

 

Horas más tarde Marquitos volvió a cruzarse con José, quien enfurecido comenzó a insultarlo y a proferirle amenazas de muerte y hasta de quemarle la casa.

 

En medio de la discusión, José entró a su vivienda y buscó el arma de fuego tipo tumbera que tenía guardada y salió en busca de Marcos para efectuarle dos disparos.

 

A los pocos minutos, una patrulla de la Seccional Decimoquinta intervino en el lugar y evitó un enfrentamiento mayor entre integrantes de ambas familias.

 

Al mismo tiempo, una ambulancia arribó al barrio y trasladó al herido al Madariaga, nosocomio donde permanece en delicado estado. En el lugar de los hechos, los uniformados secuestraron el arma utilizada para hacer pericias.

 

Durante la tarde ayer, referentes barriales coincidieron en señalar que los constantes robos que se registraban en San Isidro fueron cometidos por el joven atacado y sus compañeros de fechorías, siempre motivados por el exceso en el consumo de drogas, lo que generó que muchos de los residentes en el complejo habitacional se encierren en sus viviendas, por miedo a cualquier incidente con estos sujetos.

 

“Estamos cansados y sabemos que la Policía no puede hacer mucho más que detenerlos un rato, pero salen y vuelven a robarnos”, se quejó uno de los vecinos.