El lenguaje de señas como herramienta de inclusión

Sábado 5 de julio de 2014 | 17:30hs.
Mayra. | Inspiró el proyecto debatido. | Foto: Gentileza Cèsar Lasso

Mayra Horchuk está en cuarto año del colegio secundario en el Instituto Santiago Canclini de Leandro N. Alem, es hipoacúsica y tuvo un papel protagónico en la sesión del Parlamento Estudiantil. Sus amigas Sofía Sosa Milzuk y Daniela Ibarra Haase presentaron el proyecto “inclusión de sordos/ hipoacúsicos”.

 

La iniciativa propone que se incluya en la currícula obligatoria de materias, el lenguaje de señas, para que “docentes y alumnos crezcan con esta herramienta de integración y puedan unirse dos partes de la sociedad”.

 

En esta misma línea la Escuela Especial N° 12 de Montecarlo representada por Aldana presentó un proyecto de “difusión de enseñanza de idioma de señas”. Aldana, también hipoacúsica, solicitó un intérprete de señas en todos los establecimientos públicos como por ejemplo, hospitales, ya que explicó que todos los sordos desean sentirse comprendidos destacando la gravedad de que un médico no entienda a su paciente.

 

“Nuestra experiencia con Mayra, es extraordinaria”, explicó Sofía en su turno de defensa del proyecto en la sesión, donde fue ovacionada.“En un principio nos costó integrarla porque ni los maestros ni nosotros la entendíamos”, declaró.

 

Cabe destacar que Mayra es hija única y sus padres tuvieron la capacidad económica de solventar las sesiones de fonoaudiología que necesitó para poder hablar y hacerse entender como lo hace en la actualidad. Pero no todas las familias pueden acceder a este tipo de tratamientos o a un par de audífonos tan fácilmente.

 

“No solo las dos partes tuvimos que hacer un gran esfuerzo para comunicarnos e integrarnos, sino que también aprendimos sobre los derechos humanos, expresó Milzuk” y agregó “todos tenemos derecho a ser incluídos, a tener una buena educación, a poder expresarnos. El sordo trata de incluirse, somos nosotros los que no estamos capacitados para entenderlo”, alegó.

 

Por este motivo argumentaron como necesario que en las escuelas comunes se enseñe el lenguaje de señas.

 

“En este congreso, reunión de la que estamos participando, vi que todos trataron de comunicarse, tanto con Mayra, como con Aldana. Es un orgullo tenerlas acá y tener esta oportunidad pero pensemos en todas las personas que nunca vemos, que no están acá”, dijo Sofía.

 

Fue en ese momento en el que el recinto repleto de jóvenes, adultos asesores, diputados, estalló en aplausos reivindicando el mensaje de la estudiante que continuó, “tenemos que mostrar que somos diferentes, que podemos romper esa barrera de la exclusión. Vale la pena, aprender ahora”.

 

Tanto el proyecto de la escuela especial de Montecarlo como el del Instituto Canclini, tuvieron la mayor adhesión de votos afirmativos, superando el 90 por ciento.

 

 

Nota perteneciente a la edición impresa.