De milagro no fue tragedia. Quienes presenciaron el violento despiste y posterior vuelco de un taxi sobre la avenida Alicia Moreau de Justo y que dejó a su conductor de 35 años con lesiones de consideración, aún no logran entender cómo el chofer del vehículo no tuvo un final mucho peor.
El accidente se produjo ayer alrededor de las 15 en el barrio Lloviznazo, más precisamente frente a una ferretería ubicada a metros de la calle 180, e involucró a un Chevrolet Corsa, conducido en ese momento por Luis G.
De acuerdo a los dichos de un grupo de serenos que presenció el accidente, el taxi circulaba a gran velocidad por la avenida Alicia Moreau de Justo, en sentido sur-norte. Pero en un determinado momento del recorrido, el conductor del Corsa realizó una brusca maniobra hacia la banquina, en donde una de las ruedas del rodado se trabó.
Como consecuencia del grave accidente, el único ocupante del taxi terminó con importantes lesiones, aprisionado dentro del vehículo.
Minutos después, personal de Bomberos junto con personal policial arribaron al lugar y lograron sacar al hombre del rodado.
Luego, éste fue derivado en estado semiinconsciente al Hospital Ramón Madariaga en donde se constató que presentaba politraumatismos varios y aliento etílico.
En tanto que por fortuna, ningún peatón resultó con lesiones a pesar de la espectacularidad del accidente.
Intervino en el lugar personal de la Seccional Octava y de la Décimoquinta, junto con peritos de la división Criminalística de la Unidad Regional I.