Duerme en el nicho porque no puede pagar un hotel

“Uno muere pero a lo mejor lo demás queda, mi idea es que no puedo pagar tanto dinero para quedarme en un hotel mucho tiempo y aparte cuando vengo lo vengo a ver a él, es el único familiar que tenía, ahora estoy conociendo otro familiar de él”, afirmó Adriana Villareal, la mujer que desde Buenos Aires viene al cementerio de Dos de Mayo tres veces al año y se instala unas noches en el panteón donde descansan los restos de "Checho", el amor de su vida.

Sergio Yede, "Checho" para los amigos, vivió de chico en Dos de Mayo, para luego irse en busca de mejores horizontes en Buenos Aires, pero siempre con la intención de volver, es por eso que una vez fallecido trajeron sus restos para que reciban sepultura en el cementerio de la localidad que lo vio crecer. Allí, Villarreal acondicionó el mausoleo con dinero guardado por el esposo para hacer su casa "y yo no quise gastar en otra cosa, por eso cumplí su deseo". Cuando visita el panteón "pongo música despacito porque a él le gustaba la música de acá, tengo mi computadora con internet, no tengo televisión”.

La mujer explicó, según cuenta el sitio Sanvicenteinforma, que "en México se festeja mucho el día de los muertos, es la fiesta más grande que hay, mi idea era no molestar a nadie en 2 de Mayo por eso estoy ahí adentro, por eso no me han dicho nada". "Cuando las cosas pasan es porque Dios quiere, la familia de él tampoco quiso investigar, ya hace dos años de eso", agregó, afirmó.

La mujer asegura que no tiene miedo de dormir al lado del cajón que tiene tapa vidriada, asegura que “los muertos no hacen nada, lo que hacen son los vivos. Cuando se ama mucho al hombre uno puede hacer ese tipo de cosas. Mi marido se merece eso y mucho más era una persona muy buena, todo lo que puedo hacer por él es poco”.