Grecia anunció que no pagará al Fondo Monetario Internacional

Grecia no hará hoy frente al pago de los 1.600 millones de euros (U$S 1.770 millones). La negativa a pactar con los acreedores en las actuales condiciones fue confirmada por el ministro de Economía de ese país, George Stathakis, al diario británico “The Financial Times”.

Pese al incumplimiento, Grecia no puede ser declarada aún técnicamente en cesación de pagos (default), pero pone en riesgo su continuidad en la Eurozona.

Los griegos se encontraron ayer con los bancos cerrados, con largas filas en los supermercados y una gran incertidumbre, luego del fracaso de las negociaciones con sus acreedores. Grecia pasó su primer día con inactividad bancaria, tras la decisión del gobierno de Alexis Tsipras de imponer un control de capitales, una suerte de corralito bancario que durará hasta el próximo lunes, con un máximo de 60 euros en efectivo para retirar de los cajeros automáticos.

El pago de las jubilaciones está excluido de las restricciones. Tsipras pidió en vano a funcionarios europeos que amplíen un programa de ayuda hasta el referendo del próximo domingo, a horas de que se acabe el actual programa de rescate y tenga además que realizar un pago al FMI.

Los intensos esfuerzos para mantener a Grecia dentro de la zona euro siguen a un fin de semana dramático. Tsipras anunció el sábado pasado la realización del referendo para decidir si se aceptan o no las demandas de los acreedores internacionales, a cambio de dinero que evitaría una cesación de pagos de Grecia. El anuncio tomó por sorpresa a los prestamistas e hizo que los griegos corrieran a los cajeros automáticos.

La agencia Standard & Poor’s bajó ayer la calificación soberana de Grecia a CCC- desde CCC, argumentando que la probabilidad de que el país salga de la zona del euro es ahora de un 50%.

Los griegos se vieron conmocionados por el giro de los eventos. Se formaron largas filas en los cajeros automáticos y en supermercados, mientras crecía el miedo a una interrupción del suministro de medicamentos y comida. Las farmacéuticas dijeron que seguirían enviando medicinas al país en las próximas semanas pese a las cuentas impagas, pero que los suministros se verían en riesgo si no se toman medidas de emergencia.