En Puerto Iguazú una mujer tenía un carpincho como mascota

Martes 26 de mayo de 2015 | 08:05hs.
El carpincho presentaba una lesión en la cabeza al momento de ser rescatado.

Un habitante del barrio Villa Alta de la localidad de Puerto Iguazú denunció que una vecina suya tenía en su casa un ejemplar de carpincho como mascota, y efectivos de la Seccional Segunda de Policía alertaron a los guardaparques del Ministerio de Ecología.

 

Según la dueña de la vivienda, le regalaron al animal hace apenas unos días. El gran roedor estaba atado con una soga al cuello y presentaba una lesión en su cabeza.

 

La comisión de guardaparques dependientes del Ministerio de Ecología labró las actas pertinentes, procedió al decomiso del carpincho y lo trasladó como todos los animales rescatados al refugio Güira Oga, que es el único refugio de fauna autóctona en Misiones.

 

El personal veterinario del centro -fundado en 1997 por Jorge Anfuso y Silvia Elsegood- atendió al animal y señalo que había sido herido en el maxilar derecho por una herida de bala.

 

En el centro de rescate, rehabilitación y refugio de animales se ubica a los animales en recintos pequeños y aislados en observación durante las primeras ocho horas, siempre dentro de cuarentena.

 

Luego el veterinario y personal técnico proceden a anestesiarlo para su revisión, extracción de sangre y otras muestras para ser sujetas a estudio.

 

Retorno
Se espera que el ejemplar pueda ser reintegrado a la selva, su hábitat natural.

 

El personal de Güira Oga explicó que se busca que los animales retornen a su dieta natural y de a poco recuperen sus costumbres, adulteradas por el contacto permanente con sus amos, aunque hay animales a los que les es imposibles subsistir en la vida salvaje luego de haber vivido como mascotas.

 

El proceso de adaptación no supera el año, aseguraron, y luego de ese período los animales son liberados en la isla Palacios, donde se acostumbra a soltarlos, o en la misma entidad.

 

Jorge Anfuso, director de Güira Oga, sostuvo que hace varios años que se trabaja con la misma modalidad e indicó que no es la primera vez que tienen animales selváticos en casas de familias.

 

Aseguró que es el desconocimiento de las leyes vigentes lo que lleva a retener como mascotas a ejemplares de gato onza, loros y otras especies de aves, monos y coatíes, entre otros.