El mortal gas nervioso que escondería el tren nazi fantasma

Martes 13 de octubre de 2015 | 13:27hs.
Un viejo vagón en el memorial del campo de concentración nazi de Auschwitz-Birkenau en Oswiecim, Polonia.

El tren nazi no termina de aparecer o emerger de donde sea que esté enterrado. Pero cada vez más gente ensaya teorías sobre lo que hay en su interior. La primera versión es que el ya célebre convoy alemán tiene adentro toneladas de oro, entre varios tesoros. Otros arriesgaron a decir que no hay más que cadáveres de los prisioneros de los campos de concentración. Y ahora Stanislaw Popiel, de la Academia Técnica Militar de Varsovia, le dijo al diario Gazeta Wroclawska, que en los vagones del misterioso tren de carga hay una letal arma química.

 

Se trataría del gas nervioso Tabún, uno de los agentes químicos más tóxicos para el hombre. La exposición a este gas en cantidades mínimas lleva a una muerte agonizante mientras las defensas del cuerpo colapsan.

 

El Tabún, un arma química de guerra, fue desarrollado originalmente como pesticida en 1936 en Alemania. También se conoce lo como “GA”. Es un líquido claro, incoloro e insípido (sin sabor) que tiene un ligero olor a frutas. El Tabún puede convertirse en vapor si se calienta.

 

El experto polaco sostiene que el gas podría estar dentro del cargamento de armas que lleva el tren, enterrado en los viejos túneles excavados por los nazis en Polonia, para refugiarse de los aliados y para esconder justamente armas. Hacia el final de la guerra, los alemanes bloquearon los accesos a los túneles, ocultándolos. Solo algunos están abiertos al público. Pero la mayor parte de la enorme red, creada durante la II Guerra, permanece oculta bajo tierra.

 

La industria armamentista del TercerReich tenía un programa de armas químicas avanzado, pero que no llegaron a usarse.

 

El gas Tabún fue creado en la planta de IG Farben en Brzeg Dolny, no muy lejos de donde estaría el tren, ocultó en algún túnel en los bosques de Walbrzych.

 

IG Farben era el conglomerado industrial más grande de la Alemania nazi, y producía, entre otros productos, el gas Zyklon B, utilizado para matar a los judíos en los campos de exterminio como Auschwitz.

 

“La Alemania nazi tenía una industria química y un programa de armas químicas muy avanzadas”, recuerda Popiel.

 

“Cualquier intento de sacar el tren de donde está deberá contemplar una evacuación masiva de civiles en caso de que estos químicos estén a bordo”, alertó.

 

Un polaco y un alemán aseguraron haber encontrado el tren un par de meses atrás desatando una auténtica fiebre del oro en la región, ahora custodiada por el ejército polaco que ya desmalezó el lugar para sacar el tren a la superficie.