Alemanes y japoneses toman bebidas a base de yerba mate

El descubrimiento de nuevas propiedades nutritivas y terapéuticas abrió para la yerba mate soluble o extracto de yerba decenas de aplicaciones que están siendo desarrolladas por empresas multinacionales alimenticias y farmacéuticas. Entre ellas, el creciente uso que se le está dando a la yerba como componente de gaseosas y energizantes.

Por ejemplo en Alemania, se la utiliza para saborizar una gaseosa llamada “tereré-mate”. Y en Corea y Japón, la usan para bebidas saborizadas, como una llamada “Sol”, junto a otra que también tiene aceptación en esa región, llamada “Lotte, mate secreto amazonia”, que llega incluso a China.

En el caso de Alemania, compran yerba de la localidad misionera de San Ignacio. Los teutones, utilizan yerba orgánica mezclada con jugo de limón y agua gasificada para una bebida que se envasa en botellas de 333 mililitros.

“Comenzamos en 2011 con el envío de 7.000 kilogramos -señalaron empresarios de esa localidad misionera- y ahora estamos enviando 40.000 kilos, con expectativas de que siga creciendo. La gaseosa se empezó a imponer entre los jóvenes alemanes por su poder energizante, para rendir más en el trabajo y en el estudio”.

También empresas de Rusia están comprando yerba mate para extraer cafeína para la elaboración de energizantes.

Por ahora, las exportaciones de yerba mate representan alrededor del 10 % de la producción total de nuestro país, según datos del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM), aunque con amplias perspectivas de crecimiento.

“Aunque las ventas para este tipo de consumos aún no son significativas dentro de la producción nacional -señaló Jerónimo Lagier, director del INYM- estimamos que en poco tiempo se van a incrementar porque van a mercados muy importantes y en constante crecimiento”.

Según el presidente del INYM, Luis Prietto, en Argentina el consumo de yerba mate es de 6,2 Kg por persona por año “y no creemos que crezca mucho más, por eso incentivamos el desarrollo de productos que se adaptan mejor al mercado externo, como la yerba soluble, que requiere una molienda más fina”.

Fuente: Diario El Día