El chip para el sector ganadero sólo sería para un control fiscal

Martes 22 de julio de 2014 | 07:11hs.
Pernicioso. | Según los productores ganaderos, el chip implicará un desembolso monetario muy oneroso.

La Resolución General número 3.649 de la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip)implementa un sistema de trazabilidad animal mediante la colocación de un dispositivo electrónico en cada cabeza de ganado bovino del país. Ello a partir del 1° de enero del año próximo.

 

Este dispositivo será comercializado por una empresa autorizada por la propia Afip, previa homologación de ese organismo. El productor deberá comprar a esta empresa el dispositivo y proceder a su colocación en cada una de las cabezas de ganado de su propiedad.

 

La información que brindaría el chip es la misma que hoy día tiene el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) con el Sistema Integrado de Gestión de Sanidad Animal (Sigsa) que tiene registrado a través de las llamadas caravanas todos los movimientos del ganado desde su nacimiento hasta su faena, industrialización y posterior comercialización de la carne. Es decir que la Afip puede contar con esta información al instante.

 

El costo del chip, que tiene que afrontar el propio productor, en principio sería de diez dólares cada uno. Con un rodeo de 51 millones de cabezas de ganado en el país, sumaría más de 510 millones de dolares, que podrá comercializar solamente la empresa proveedora del sistema, ungida por la Afip.

 

“Además se estima que cada año nacen doce millones de terneros, con lo cual es simple sacar cuentas y saber la magnitud del negocio, teniendo en cuenta que sólo una empresa en el país se ocupa de la fabricación de nanotecnología”, aseguró Adrián Luna Vázquez, presidente de la Sociedad Rural de Misiones. “Es evidente que se busca beneficiar a alguien con un negocio cautivo de 500 millones de dólares”, denunció.

 

Similar observación

 

En sintonía, Gerardo Díaz Beltrán -presidente de la Confederación Económica de Misiones (CEM)- y veterinario especialista opinó sobre la nueva trazabilidad. “Creo que a lo que responde es a la voracidad fiscal del Estado, al productor no le redunda en ningún beneficio. Si ese chip tuviera información y datos sobre las enfermedades del animal. Pero no aporta nada”, sostuvo. “Hagamos cosas que sirvan”, propuso.

 

Además, José Heuer, titular de la Asociación de Ganaderos del Alto Paraná (Agap) aseguró que “es innecesario incorporar otro gasto al productor para la trazabilidad porque la caravana ya es un sistema de control”. En cuanto a la empresa que se dedicará a la comercialización del aparato esgrimió que “consistirá en un monopolio, al igual que lo que sucede con la vacunación contra la aftosa”.
“Ya es ley, empieza a regir el 1º de enero, pero todavía no sabemos cómo se implementa, quién lo va a colocar, porque seguramente debamos sumar un costo de colocación”, sumó el ganadero.

 

A su vez definió que ante la situación actual del país, la inversión que comprendería esta nueva resolución de la Afip no es menor.
“El productor está en una situación delicada, con recesión. No consultaron a nadie sobre esta nueva normativa, simplemente se impuso. El único beneficio es el del Estado y su control impositivo”, declaró Heuer.

 

Díaz Beltrán coincidió con esta postura y también escenificó la situación del productor ganadero. “Hay un costo importante que el productor no está en condiciones de afrontar. No puede asumir ningún gasto más, porque está abrumado por la situación recesiva, por el precio del kilogramo de ganado vivo, que es muy distinto al precio de la carne hoy”, aseguró. En este marco, el viernes el precio del novillo, por ejemplo, cotizó a 16,69 pesos por kilogramo vivo en el mercado de Liniers. Mientras en la góndola se lo consiguen los precios de distintos cortes al doble o a veces inclusive el triple.

 

Los representantes del sector ganadero expusieron que la implementación de esta nueva normativa no se puede realizar en el esquema productivo de la región del Litoral, ya que tanto Misiones como Corrientes y Entre Ríos no tienen la capacidad productora como los ganaderos pampeanos.

 

Además es un esquema disperso, no considerado en la resolución.“La norma a imponer está adaptada a una visión muy corta. Para el tambo o el feed lot”, adujo el citado titular del CEM.

 

Por otro lado, plantearon que hay muchísimos inconvenientes con el sistema actual del Senasa.

 

Es decir que se sumarían los datos del chip a un software con deficiencias, que no responde a las necesidades. “Es inaplicable con este sistema ineficaz, al que constantemente cuesta acceder. Primero deberían solucionar el problema administrativo, porque si no no entendemos cómo pueden ampliarlo y hacer el control pertinente”, argumentó el veterinario.

 

Trazabilidad con Caravanas

 

Desde 2007, todos los animales de las categorías terneros deben estar identificados como requisito previo a cualquier traslado. Para ello se creó el Sistema Nacional de Identificación del Ganado Bovino, que establece la identificación individual obligatoria de los terneros al momento del destete o previo a su primer movimiento. El sistema consiste en identificar a los terneros, machos y hembras, con una especie de arete denominado “caravana”. Es decir con una tarjeta-botón en la oreja izquierda del animal y una botón-botón en la derecha, cualquiera sea el destino del animal, consumo o mercado de exportación. De esta manera se agrupó a los animales en tres categorías y se los identificó con tarjetas de distintos colores. Las amarillas para el ganado de establecimientos que deben ser vacunados contra la fiebre aftosa, por ejemplo los de esta región; las verdes para distritos que no se vacuna contra este flagelo, como ser en la Patagonia; y celestes en caso que se tenga que reidentificar al animal por caídas, roturas o borrado de números.

 

A su vez, se creó, la Clave Única de Identificación Ganadera (Cuig) que es la que identifica individualmente a cada productor pecuario del país en cada establecimiento de la Argentina.

 

Como consecuencia de esta implementación, el uso de las caravanas trajo muchos problemas en el ganado, según veterinarios. “Se enferman porque se les lastima las orejas, que se les infectan y contraen miasis (enfermedad parasitaria ocasionada por larvas de mosca que afecta los tejidos)”, explicó Díaz Beltrán.

 

Nueva normativa

 

La resolución de la Afip publicada el lunes 14 en el Boletín Oficial determina que el Sistema Fiscal de Trazabilidad Animal (Sifta) controlará de manera informática los movimientos de los bovinos. Estiman que con la herramienta se auditarán nacimientos, muertes, traslados, faena, transformación industrial y comercialización.

 

Sin embargo, quienes integran el sector ganadero insisten en que esta imposición del organismo fiscal no agregará más datos de los que ya maneja el sistema vigente instaurado por el Senasa. “El Sifta funciona y permite perfectamente a la Afip ejercer su función de fiscalización tributaria, por lo que no vemos razón de implementar un sistema caro que no aportaría mayores datos que el actual”, apuntó Vázquez.

 

Por otro lado, Gerardo Díaz Beltrán, inquirió en cómo se debería actuar ante un caso de cuarterismo (Ver : Continúan los robos). “Nos gustaría saber qué pasa con un animal que es robado y tiene el chip”, preguntó.

 

En este marco, el descontento de los productores es notable. “En lugar de implementar sistemas que desconocen la realidad del campo, y que parten del supuesto que la ganadería en todo el país es igual que en la pampa húmeda, pueden perfectamente valerse de la información con que cuenta el Senasa y en todo caso, perfeccionar este sistema que hoy funciona en todos los rincones de la Argentina”, sostuvo el titular de la Sociedad Rural de la provincia.

 

Ganadería en crisis

 

De acuerdo a datos de Senasa, en el mes de mayo del presente año, las exportaciones de carnes vacunas sumaron el equivalente a 17 mil toneladas peso res. En consecuencia la caída respecto del volumen exportado en relación a los primeros cinco meses de 2013, ronda el 17 por ciento.

 

“Las exportaciones están virtualmente cerradas en la actualidad, y como consecuencia 135 frigoríficos cerrados, 10.000 trabajadores despedidos y miles de productores ganaderos que han desaparecido. Pero además hemos descendido de ser en el 2005 el tercer exportador mundial de carne con 771.000 toneladas al año, a ser hoy el décimo primer exportador de carne del mundo con 168.000 toneladas el año pasado y con una perspectiva de disminuir aún más para este 2014”, expuso Vázquez.

 

El dato

10
Dólares es el costo de cada uno de los chips que se deberá colocar a todo el ganado que esté dentro de la República Argentina.
El referido gasto deberá ser afrontado por parte de los propios ganaderos.

 

Continúan los robos

 

El cuatrerismo continúa siendo una problemática en la provincia de Misiones, especialmente en la zona del Alto Paraná de la tierra colorada. .

 

“Todo sigue igual”, expresó José Heuer, titular de la Asociación de Ganaderos del Alto Paraná (Agap). “Piensan que está más controlado porque ya ni se hacen las denuncias. Pero todas las semanas tenemos noticias de distintos casos en diferentes campos”, agregó.

 

El modus operandi de los cuatreros también sigue siendo el mismo, actuar de noche, los fines de semana y en campos que están aislados. “Descuartizan al animal y se llevan los cuartos, las paletas, en algunos casos dejan algunos restos y el productor se da cuenta cuando ve a los buitres”, contó Heuer.

 

A su vez planteó que estos delincuentes “se mueven libremente, con total inmunidad, porque hay carniceros que les compran y porque el sistema judicial que tenemos es demasiado blando. Las veces que han caído cuatreros en cárcel, al otro día son liberados”, denunció.

 

A veces se dedican a vender la carne casa por casa, sin ningún impedimento.
“Es una forma de vida fácil, por lo fácil de evadir el sistema judicial”, sentenció el presidente de Agap.

 

 

Nota perteneciente a la edición impresa.