La Asociación civil Creación de ayuda al niño con cáncer de Misiones incorpora voluntarios para la atención y reparación de “la casita” que es donde reciben a los chicos y las familias y para el reciclaje y limpieza de juguetes y ropas.
La Ong brinda servicio de asistencia, contención y recreación a los niños oncológicos y sus familias y trabaja articulada con el Servicio de Hemato Oncología del Hospital de Pediatría. Tiene su sede en calle Félix Bogado1461 casi López Torres en el barrio El Palomar a 300 metros del hospital.
La presidente de la asociación, Nadia Chávez contó que necesitan voluntarios para acondicionar el lugar y también para atender a los pacientes y sus familiares que llegan para la atención médica y toman el desayuno mientras esperan los resultados de los laboratorios en la casita, ahí también tienen la sala de juegos, el baño y el ropero.
En colaboración
Con la ayuda de voluntarios en la casita sirviendo la leche y jugando con los chicos, Creación podrá estar más presente en el sector internación de Pediatría que es donde articulan acciones con los médicos y establecen vínculos de confianza con los padres de los niños hospitalizados.
En Misiones hay 250 pacientes con cáncer y 36 asisten regularmente al menos una vez por semana a Pediatría para seguir el tratamiento. “Es una cifra importante porque quiere decir que están en la etapa reciente del tratamiento y reciben quimioterapia estos chicos necesitan contención y seguimiento especial”, detalló.
Creación solicita también la donación de elementos de limpieza, ropas para chicos, ojotas y talles grandes para señoras, calzados desde el 36, blanquería, juguetes, leche, azúcar y galletitas para el desayuno.
El teléfono es 03752-436199, hasta el 28 de febrero funciona una guardia los lunes y martes de 8 a 11.30.
El proyecto de la sede propia
La asociación ya cuenta con un plano de lo que será la futura casita en un lugar propio, el proyecto prevé también un albergue para que los pacientes y las familias del interior puedan quedarse a pasar la noche durante el tratamiento.
“Tenemos familias de contextos rurales con papás analfabetos y muy pobres, no tienen las condiciones sanitarias en sus hogares para tener al chico, queremos una casita propia para los niños aunque todavía es sólo un sueño”, dijo Nadia.