Tuzkoy: el pueblo cáncer

Jueves 9 de junio de 2011
Recurso. | La mayoría en Tuzkoy sobrevive con los animales y algunos cultivos. El turismo es para sus vecinos.
Las cuevas, las casas de piedra y las formaciones rocosas de Capadocia, Turquía, atraen a turistas de todo el mundo, pero además de sus maravillas, en la región hay un pueblo con un número inusual de enfermos de cáncer.
La mitad de las muertes en este pueblo empobrecido fueron provocadas por un tipo raro de cáncer conocido como mesotelioma, que puede ser provocado por un mineral que abunda en la zona. Las autoridades están tan alarmadas que se prevé mudar la población.
“El plan es demoler el pueblo viejo, enterrarlo bajo un metro y medio de tierra y plantar sobre él”, dijo el alcalde Umit Balak. Pero el gobierno turco duda  si lo tapará o sólo alejará la gente.
Apodado el “pueblo cáncer”, Tuzkoy fue declarada zona peligrosa en 2004 y unas 250 familias se mudaron a nuevas viviendas a 1,6 kilómetros de distancia. El resto de la población, 2.350 habitantes esperan sus nuevas casas. La medida es subsidiada por el gobierno.
El mesotelioma, un cáncer en el recubrimiento del pecho o el abdomen, también aumentó en las poblaciones cercanas de Sarihidir y Karain. “El número de casos de mesotelioma en Tuzkoy es 800 veces mayor al promedio mundial”, dijo Murat Tuncer, que dirige el departamento del Ministerio de Salud para la lucha contra el cáncer.
Turquía no entrega cifras sobre el número total de muertes por mesotelioma, pero cientos de pobladores han muerto de ese cáncer desde los ‘80, cuando se comenzó a notar el problema.
Se cree que los habitantes de Tuzkoy inhalaron fibras del mineral erionita contenido en las piedras y pinturas que usan para construir sus casas así como caminos y sembradíos. Alejarlos un poco sería suficiente para eliminar el riesgo dijo Tuncer.
La erionita, que se encuentra en la roca volcánica, está clasificada como un agente cancerígeno del Grupo 1 según la Agencia para la Investigación del Cáncer de la OMS.
Esto significa que es una sustancia que definitivamente causa cáncer, entre otros cancerígenos en ese grupo se ubica el asbesto, el arsénico y el tabaco. Izzettin Baris, un profesor jubilado que ha investigado el mesotelioma en la zona, dijo que la erionita se puede encontrar en varias partes del mundo, como el estado de Nevada en Estados Unidos. “En la mayoría de esos países el material cancerígeno está generalmente bastante abajo en la tierra. En Turquía está muy cerca de la superficie”, dijo Baris.
“Y la gente usa las rocas que tienen erionita para construir sus casas con ellas”. Algunos expertos señalaron otros posibles factores para los altos índices de cáncer, incluyendo la predisposición genética de los pobladores.
Para otros residentes el estilo de vida que llevan también puede ser un factor. “La gente pasa todo el día en las salas de café llenas de humo”, dijo el agricultor Muharrem Sevim, de 44 años.
En Tuzkoy sólo hay un doctor, una enfermera y una partera. Hay dos cementerios en el pueblo y ambos están llenos. Ahora abrirán un tercer cementerio.
“Estamos perdidos entre los rumores y la ignorancia”, dijo Ismet Bilgen, madre de seis hijos y abuela de cinco. “No sé a quién creerle ¡Que Dios nos ampare!”
El gobierno considera derrumbar el pueblo desde 1999. Las dificultades financieras, los procesos burocráticos y una serie de gobiernos inestables retrasan la medida. Tuncer dijo que el gobierno seguía considerando la mejor opción para rehabilitar Tuzkoy y minimizar el riesgo de cáncer. Por ahora el parlamento estableció una comisión para revisar la mejor forma de arreglar el problema.
Las autoridades esperan que el “Nuevo Tuzkoy” esté listo para finales del 2011. Los pobladores subsisten con la agricultura, ganadería y por una mina de sal cercana.
Tuzkoy se encuentra a 35 kilómetros de los lugares donde los viajeros se maravillan con las formaciones de piedra y a 50 kilómetros de Urgup, Goreme y otras ciudades pequeñas donde se concentra el turismo local.
No existen amenazas de salud en esos lugares, que se formaron con depósitos volcánicos hace millones de años y después fueron esculpidos para crear ciudades subterráneas. Tuzkoy cuenta con mil viviendas y en algunas partes parece un pueblo fantasma.
“Es verdad, la gente se muere de cáncer aquí, no hay nada vergonzoso en admitirlo”, dijo Ahmet Balta (51), quien admitió que muchos de sus propios parientes murieron de cáncer cuando eran jóvenes. “Los especialistas, el gobierno y los medios de comunicación deben tomarse en serio el problema”.