El ex presidente y actual senador Carlos Menem, el ex ministro de Defensa Oscar Camilión, el ex asesor presidencial Emir Yoma, el supuesto traficante de armas Diego Palleros y otros catorce acusados fueron absueltos ayer por el envío de 6.500 toneladas de armamento a Croacia y Ecuador entre 1991 y 1995.
El veredicto fue dictado en votación dividida por el Tribunal Oral en lo Penal Económico 3, integrado por los jueces Luis Imas, Horacio Artabe y Gustavo Losada, que al exculpar a todos los acusados consideró así que no hubo contrabando, delito por el que se realizó el juicio. El fiscal Mariano Borinsky y el abogado de la Aduana Carlos Lobos Oroño -que actuó como querellante-, quienes habían pedido diversas penas de cárcel, se mostraron disconformes y sorprendidos por la resolución. “Estoy conmocionado, acusé a 18 personas que terminaron absueltas”, dijo Borinsky, quien anunció que apelará ante la Cámara Nacional de Casación.
Por su parte, Lobos Oroño dijo que “esto es inaceptable y lamentable porque el contrabando existió. Me voy schokeado”.
Más de diez años
La causa se inició hace una década y media por el presunto contrabando de 6.500 toneladas de armas a través de dos decretos presidenciales de 1991 y 1995 que establecía que los pertrechos tenían como destino Panamá y Venezuela, pero fueron desviados a Croacia y Ecuador, según la denuncia. Con esos dos países estaba prohibida la comercialización de armamento por una resolución de la ONU porque se encontraban en guerra: Ecuador con Perú y Croacia en el conflicto de los Balcanes.
Los fiscales Borinsky y Marcelo Agüero Vera pidieron que Menem fuera condenado a ocho años de prisión por contrabando agravado al considerar que “convalidó la venta a los verdaderos países de destino” y que “firmó los decretos a sabiendas del verdadero destino del material”. Menem estuvo preso por esta causa en 2001 durante seis meses por orden del entonces juez federal Jorge Urso, pero luego fue liberado por la Corte Suprema, la llamada “mayoría automática” que en varias ocasiones falló en consonancia con las aspiraciones del menemismo.
Los fiscales también habían pedido por el mismo delito ocho años de prisión para Palleros, siete para Yoma y Camilión y entre seis y cuatro para el resto de los acusados, excepto Cueto, para quien requirieron la absolución.
“Estoy conmocionado, acusé a 18 personas que terminaron absueltas. Vamos a esperar los fundamentos y por supuesto que la Fiscalía va a apelar”, dijo Borinsky, quien el lunes fue nombrado juez de la Cámara de Casación. Por su parte, también se mostró indignado el abogado Lobos Oroño, que pidió cinco años de prisión para Menem. “Esto es inaceptable y lamentable porque el contrabando existió. Los hechos existieron porque hubo venta de material bélico que comprometió al país”.
El denunciante que dio origen a la causa, el abogado Ricardo Monner Sans, estuvo presente en la audiencia de ayer. Insistió ante la prensa en que hubo delito y se pronunció en favor de la apelación por parte de la Fiscalía y la Aduana para revertir el fallo. El letrado dijo que si no, “habremos sepultado desde el absurdo una causa que atenta contra la democracia argentina”.
No fue una causa más, fue un sorprendente récord
El caso de la venta de armas a Croacia y Ecuador no fue una causa más para Carlos Menem, ya que fue el expediente que lo llevó a estar seis meses preso en 2001 y lo convirtió en el primer presidente constitucional argentino en afrontar un juicio oral y público.
Entre junio y noviembre de 2001 Menem estuvo en prisión domiciliaria en una quinta de su amigo y ex titular de la Casa de la Moneda Armando Gostanian, por orden del entonces juez federal Jorge Urso y del fiscal Carlos Stornelli. El expresidente fue liberado por un fallo de la Corte Suprema, integrada en ese entonces por mayoría de jueces que había nombrado Menem, que además consideró que en el caso no había asociación ilícita, por lo que le quitó la causa al fuero federal y se la pasó a la Justicia en lo Penal Económico. El 16 de octubre de 2008 Menem se convirtió en el primer presidente constitucional sentado en el banquillo de los acusados: comenzó a ser juzgado por haber firmado los decretos que derivaron en el envío de armas a Croacia y Ecuador, países en guerra y con prohibición de comercializar pertrechos de guerra, hecho por el que la Fiscalía pidió para él una condena de ocho años y la Aduana reclamó cinco.
El actual senador bregó por su “absoluta y total inocencia” cuando dio el 26 de agosto pasado sus últimas palabras frente a los jueces y señaló que “no podía ir a la Aduana para verificar si las armas iban al destino determinado”.
Finalmente, el largo camino judicial de Menem, ahora aliado político del Gobierno de Cristina Kirchner, concluyó ayer cuando la Justicia lo absolvió de culpa y cargo. Pero el récord de Menem de ser el único expresidente constitucional sometido a juicio oral y público se acabará cuando en el banquillo deba sentarse Fernando de la Rúa por el caso de los sobornos en el Senado para la aprobación de la reforma laboral, caso destapado por el jefe de la CGT, Hugo Moyano. Y el propio Menem también deberá retornar a ese sitial de los tribunales por la causa del pago de sobresueldos durante su Gobierno.