Y una vez Misiones tuvo un conjunto de cámara

“Hoy nos vendría muy bien un instrumentista más, un violinista, no estamos a la búsqueda, pero el repertorio que abarcaríamos sería mucho más amplio” comienza contando Cristina Cubillas, directora del Conjunto de Cámara de la Unam. Las palabras emergen analizando el desenvolvimiento del grupo, cuando se han cumplido ya 20 años desde que dieran el puntapié inicial. Dos décadas, que se cumplieron en mayo, que las están celebrando todo el año, que llegarán a su punto culminante con la edición de un disco compacto (pronto, dentro de dos meses, tiempo más, tiempo menos). Todo sirve para tomar conciencia sobre lo que significa mantener las expectativas con un grupo de música de cámara.
Los tres actuales instrumentistas, aparte de Cubillas (clavecinista), Néstor Rodríguez (cellista) y Abel Pérez (flauta traversa) rememoran, bucean en sus imaginarios y a algunos se le tornan los ojos vidriosos. Relata la directora que fue una decisión del entonces rector de la Universidad Nacional de Misiones, Ricardo Biazzi, quien en 1990 vio la necesidad de dotar a la casa de altos estudios de la provincia de un área de música, y decide alumbrar el Conjunto de Cámara. Ya estaba abierto el Coro Universitario Misiones. “Fue justamente para realizar otros tipos de repertorios, sinfónicos/corales, y para esto hacía falta crear un conjunto instrumental” detalló Cubillas.
La primera formación incluyó al violinista rionegrino, de Cipolleti, Víctor Blanco, Cristina Cubillas, piano y Miguel Brizuela, violoncelista; luego se sumó Marcos Hernández a este instrumento, que luego tomaría Néstor Rodríguez (actual en la formación). Más tarde se incorporó Irina Morillo en viola, se suma luego Mario de Simón (ya fallecido) en igual instrumento. Cuando se fue Blanco, al violín lo toma Néstor Rodríguez y se agregó Alfredo Sanz, en el segundo violín. Hasta llegar a la incorporación de Abel Pérez, en flauta. Hoy el Conjunto de Cámara de la Unam es un trío integrado por Cubillas, Pérez y Rodríguez, hace siete años que funcionan así.

Cuando se les pregunta qué les ha brindado el Conjunto de Cámara, los pareceres coinciden, “a mi la lo posibilidad de estar tocando todo el tiempo, poder hacer repertorio, conocerlos e investigarlos, intercambiar con maestros que nos enriquecieron” empieza Cubillas. Y agrega: “haber comenzado con público casi inexistente y hoy estar actuando a sala llena cada vez que lo hacemos, creo que los factores son que mejoramos, el avance musical y mejorar las condiciones de la audiencia; fuimos realizando un trabajo desde el origen que es muy grande. En la faz personal: el haberme capacitado, entender y colaborar con el trabajo en equipo, de conjunto, que es muy distinto al trabajo de solista y de orquesta”.
Abel Pérez, aparte de coincidir con su colega y compañera, hace hincapié en el intercambio con músicos de otros lugares, “la confrontación del tiempo de uno con el de otros destacados músicos del país hace que uno crezca, fue mucho todo lo que nos brindó a nuestro nivel el Encuentro Nacional de Música de Cámara”.
Néstor Rodríguez, se suma y hace foco en los encuentros, “es impresionante lo que se logró, y justo cuando estaba en un nivel increíble se cortaron los fondos, se estaban anotando grupos de altísimo nivel, antes, muchos grupos, veían si venían, en los últimos años peleaban por un lugar en ese encuentro”.

 

Se viene el disco
Un objetivo a corto plazo será editar un trabajo discográfico que sintetiza el repertorio de los últimos tiempos, en el que se abocan a entregar obras latinoamericanas, argentinas y regional, en este último caso, gracias a los maravillosos arreglos que ejercitan José Luís Larzábal y Ricardo Ojeda, “hay mucha música regional, ya sea para guitarra sola, para canto, pero para esta formación no y contar con estos arregladores es un lujo, nos damos cuenta que cada vez que ejecutamos ese manojo de obras a la gente le gusta mucho. Y es fabuloso, la gente lo adopta enseguida al repertorio regional ya que lo escuchó en sus versiones originales, chamamé, galopas, en versiones más estilizadas, hay obras de Abitbol, Ramón Ayala, Ojeda” finalizó Cubillas.
Y la banda siguió tocando.

 

 

Clavecinista directora

María Cristina Cubilla es la directora del elenco camarístico. Profesora superior de Música, actualmente directora de la Escuela Superior de Música.
Ha desempeñado a lo largo de su vida artística-docente actividades como directora del Coro de Niños Cantores de Misiones, Conjunto de Flautas Dulces y Conjunto de Música para Niños.
Incursionó en el estudio de la música barroca a través del clave, instrumento en el que se perfecciona todos los años en Curitiba, con maestros de trayectoria internacional como Rosana Lanzellote y Edmundo Hora, entre otros. Y ha realizado conciertos para clave y orquesta de cámara con el Conjunto de Cámara de la Unam, así como ha compartido programas de conciertos de piano como intérprete solista.
En el 1999 fue seleccionada para una beca y realizar un intercambio cultural con el estado de West Virginia, en los Estados Unidos.