“Queremos un Mercosur que le sirva a la gente”

Domingo 10 de febrero de 2008
“El Mercosur debe ser un proceso de integración y desarrollo que sirva para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos de los países que lo integran, porque de esa manera le sirve a la gente con hechos concretos como un puente, puestos de trabajo, mayor flujo de energía o mejores posibilidades de acceso a la salud y a la educación” explicó a El Territorio el Subsecretario de Integración Económica Americana y Mercosur de la Cancillería Argentina, Eduardo Sigal.
El mismo funcionario fue quien anticipó en exclusiva para este medio la semana pasada que el viernes 22 de febrero se realizará una reunión entre la presidente Cristina Fernández y su par de Brasil Lula Da Silva para impulsar la represa de Garabí y un puente sobre el río Uruguay que una Brasil con la provincia de Misiones.
Durante una entrevista con este diario, el embajador Sigal destacó que “lamentablemente por muchos años el  Mercosur estuvo dirigido por el pensamiento neoliberal centrado casi exclusivamente en la cuestión comercial, entonces todo el trabajo se encaminaba a crear mejores condiciones para los negocios. En cambio actualmente estamos tratando de acercar este título de Mercosur a la gente con hechos concretos que mejoren su  vida”.
Según explicó el funcionario nacional “hay un Mercosur partir de 1991 que es cuando se firmó el Tratado de Asunción que estuvo enfocado casi por completo a la actividad comercial y luego en el año 2.003 comenzó un replanteo de ese proceso, justamente con el objetivo de dejar de ver al libre comercio como valor supremo, para ir ampliando la mirada hacia los temas ciudadanos, migratorios, de validez de títulos, en fin hacia toda la actividad cultural que es lo que la gente requiere".
Consultado sobre porqué muchas veces provincias como Misiones que por su situación de enclave geográfico con Brasil y Paraguay ejercita cotidianamente la integración, pero recibe desde Buenos Aires trabas burocráticas que la frenen o limitan, el embajador Sigal dijo que "ese es un reclamo legítimo que se percibe en muchas comunidades de frontera, que son las que naturalmente practican la integración y que necesitan un Mercosur que los ayude a estar mejor y no un obstáculo”.
En ese sentido, el subsecretario estimó necesario “una mayor participación de la sociedad civil a través de sus organizaciones para que el proceso de integración que originalmente fue concebido como un acuerdo intergubernamental, poco a poco se transforme en una cultura adoptada por todos”.
Justamente ese es el espíritu que originó el Mecanismo de Cooperación y Coordinación Bilateral entre Argentina y Brasil, que nació durante la visita que realizó en noviembre del año pasado la entonces Presidenta electa de nuestro país, Cristina Fernández de Kirchner a Brasil y que el próximo 22 de febrero se traducirá en una serie de anuncios de obras de infraestructura entre los que figura la hidroeléctrica de Garabí y un puente sobre el río Uruguay, que posiblemente se ubique en una costa misionera. 

Integración de procesos productivos
El embajador Sigal explicó que “dentro del proceso de replanteo del Mercosur una cuestión clave es la integración de los procesos productivos de los países miembros con avances en la asociatividad empresarial y desarrollo de las cadenas de valor porque en la medida en que entendamos que entre todos podemos generar mejor producción vamos a poder crecer”.
Según estimó Sigal “la cuestión de la integración de los procesos productivos es una de las tareas que queremos profundizar durante esta presidencia pro tempore del Mercosur que durante este primer semestre del año recae en nuestro país y que busca integrar teniendo en cuenta las diferencias internas de cada país miembro para fortalecer las regiones que necesiten apoyos”. 
Finalmente, el embajador argentino explicó que “la integración productiva se da en dos ejes, uno vertical que pasa por el desarrollo de las cadenas de valor de las pequeñas y medianas empresas que tributan componentes en grandes empresas, y otro horizontal que implica la asociación de firmas de distintos países miembros con financiamiento preferencial para permitir esa unión”.