En esta ciudad hay desazón y mucha preocupación, de padres y de autoridades. Ayer, se conoció el caso de otro chico que murió a raíz de las lesiones que sufrió en un accidente de tránsito. En menos de un mes, ya suman tres los adolescentes fallecidos en estas circunstancias.
Fernando Ezequiel Giménez tenía 12 años. El jueves por la noche, dejó de existir de manera instantánea cuando el automóvil en el que viajaba volcó a un costado de la ruta provincial 17, en jurisdicción del municipio de Nueve de Julio.
Lo preocupante del episodio es que quien iba con el nene en el coche era su hermano, de apenas 15, quien resultó herido en el incidente, pero que por fortuna sobrevivió para contarlo.
El accidente sucedió alrededor de las 21.30 en el kilómetro 21, frente a un conocido aserradero.
A esa hora, transitaba en sentido Este-Oeste (de Nueve de Julio a Eldorado), un auto BMW “Milone” bordó, chapa patente BJP 791, con dos ocupantes a bordo.
En una recta, el conductor perdió el control, por motivos que se investigan. Las fuentes indicaron que el coche salió hacia la banquina Sur (la contraria a la que circulaba) y volcó. La máquina dio un tumbo y quedó en posición normal. Sin embargo, en el giro, uno de los que viajaban en él, salió despedido. Cuando los policías y paramédicos arribaron al lugar, se toparon con el cadáver de Giménez en la banquina. Las lesiones que había sufrido en el cráneo fueron las que lo llevaron a la muerte.
Dentro del rodado se encontraba el otro automovilista, era el hermano mayor del chico fallecido. Los uniformados lo rescataron y trasladaron al hospital Samic de la ciudad de Eldorado, donde el adolescente quedó internado en observación. Según se informó, se encuentra fuera de peligro.
Después del accidente, circularon distintas versiones. Desde que los hermanos habían tomado el coche sin permiso, hasta que el propio padre les había dado la venia para conducirse en el BMW.
Más allá de los rumores, se desató la polémica. Por un lado, hay sectores que cargan contra la Policía y demás funcionarios a fin de que sean más agresivos en los controles; por otro, las críticas llueven hacia los padres para que sus chicos no estén al volante a una edad muy corta.
A todo esto, Fernando Ezequiel Giménez se transformó en la víctima fatal número 11 del tránsito misionero en 2007. El chico era hijo de un comerciante local al que conocen por el apodo Neneí.
Fuentes del caso indicaron que quien manejaba el coche era el joven de 15, quien habría aprendido a conducir a los 12.
Tres decesos en menos de un mes