Obras sociales denuncian el traspaso de afiliados sin consentimiento previo

Miércoles 18 de noviembre de 2009
Reconocidas obras sociales sindicales denuncian gran cantidad de casos de beneficiarios  que son cambiados de prestadora de servicios de salud sin consentimiento de estos mismos.  Según manifestaron a El Territorio los directivos y miembros de algunas de las obras sociales sindicales más reconocidas, que funcionan en Misiones, la práctica es frecuente e incluye desde el engaño hasta la falsificación de firmas entre las maniobras.
Los beneficiarios, y las obras sociales, al denunciar ante la superintendencia de Servicios de Salud las situaciones de traspasos no consentidos, descubren que la documentación fue presentada, muchas veces, con firmas apócrifas.
A los afiliados que sufren están maniobras, por lo general, no se les registra la familia y la misma queda sin prestaciones. El hecho preocupa tanto a los afiliados como a las obra sociales que sufren “el robo de afiliados”, según denominan a la maniobra desde los sindicatos.
 Luego de las denuncias vertidas por este medio el lunes último (ver despiece) los delegados locales de algunas obras sociales sindicales dijeron recibir de forma constante, y desde hace tiempo, denuncias de este tipo.
“Constantemente hay beneficiarios que hacen la denuncia sobre que empresas prepagas, u obras sociales sindicales que traen algunas prestadoras a la Provincia, compulsivamente y a veces sin previo consentimiento, los cambian de una Obra Social”, afirmó Héctor Gómez, delegado local de la Obra Social de Empleados de Comercio y Actividades Civiles (Osecac).
Antonio Acosta, delegado en Posadas de la Unión de Trabajadores Gastronómicos y Hoteleros de la República Argentina (UTGHRA), también reconoció que sufren de esta práctica de manera frecuente y que sucede desde hace algunos años. Además puntualizó las zonas donde se dan con más frecuencia estas situaciones.
“Nos viene pasando esto desde hace varios años. Hay prepagas fantasmas que aparecen y que no tienen representación acá en la Provincia, ni un sindicato que las avale, que falsifican las firmas de los afiliados y hacen el traspaso. Cada cierto tiempo aparecen estos casos, sobre todo en la zona de la ruta 14, allá por El Soberbio, San Vicente y Aristóbulo del Valle”, afirmó el delegado gremial.
Tanto desde la Obra Social de Personal Rural y Estibadores de la República Argentina (Osprera) y desde la obra social del Sindicato de Camioneros, reconocieron la existencias de casos similares que suceden a sus afiliados. Las obras sociales denuncian los hechos ante la superintendencia de Salud y a las casas centrales de sus prestadoras, pero, según Gómez, “nadie toma cartas en el asunto”.
En cuanto a uno de los casos denunciados en este medio, el mismo delegado gremial indicó que “conocemos el caso de Luis Acosta, que fue dado de baja el 30 de junio en nuestra Obra Social. El hizo la denuncia acá, y en la superintendencia, pero ahí le dicen que esta la firma del beneficiario y que esta todo normal, pero el beneficiario dice que no se paso”.

Los mecanismos
Según registran las prestadoras de servicios de salud sindicales hay dos mecanismos de tras paso sin consentimiento.
Uno es la falsificación de firma, hecho sucedido en los casos mencionados por el informe de El Territorio del lunes último (Ver despiece); y otro es  el engaño a los afiliados a la hora de ofrecerles un servicio de seguro, cuando en realidad se les está realizando el cambio de obra social.
“En la zona centro hay una Obra Social, que es la que más afiliados traspaso involuntariamente y está relacionada al caso que se denunció por este medio. Lo de la falsificación de firmas es cierto, pero también sucede en muchos de los casos que el trabajador denuncia que le ofrecen servicios de seguro y después descubren que era una obra social lo que eligieron”, indicó Gómez.
En cuanto a como llegan estas obras sociales a la Provincia, todos coinciden en que llegan bajo el ala de alguna empresa prestadora de servicios de salud privada y se instalan, sin la existencia, siquiera, de la representación sindical.
“Hay algunas Obras Sociales que son sindicales encubiertas, que muchas veces las traen los círculos especializados en la salud”, indicó Gómez.
Mientras que Carlos Ferreira Márquez, titular de la Obra Social del Sindicato de Camioneros en Misiones, sostuvo que “generalmente son Obras Sociales que en la provincia no tienen ni siquiera un local o sede, que llegan de afuera y son intermediarios de prestadoras de servicios de salud. Son Obras Sociales que están detrás de algunas gerenciadoras”.
Desde estas obras sociales también se denuncia que existieron casos de empresas que afilian a beneficiarios misioneros, sin tener boca de expendio o representación en Misiones. Por lo que cuando el afiliado quiere hacer uso del servicio se encuentra con que no tiene prestaciones locales.

Para evitarlo y contrarrestarlo
Son diferentes las medidas que están llevando adelante las obras sociales para afrontar este problema, que termine perjudicando al afiliado en un momento de complicaciones de salud; ya que por lo general, según informaron desde todas las obras sociales, los afiliados se enteran del repentino cambio al momento de que necesitan utilizar el servicio de salud en el cual creían estar inscriptos.
Algunas de las prestadoras, como es el caso de UTGHRA, optaron por recurrir a la firma de los papeles correspondientes al traspaso, ante un escribano público o con certificación ante la Policía, “esto es para seguridad nuestra y del afiliado”, sostiene Acosta.
Mientras que, por otra parte, según informaron desde Osprera, se prepara una recorrida provincial para visitar las delegaciones del interior, donde recibirán las inquietudes de los afiliados y donde los mismos podrán corroborar si fueron víctimas de estas maniobras.
Por todo esto, los delegados de las prestadoras de servicio recomiendan a sus afiliados acercarse a revisar los padrones para confirmar si continúan afiliados a la Obra Social elegida.
Y en caso de encontrar irregularidades dirigirse a la Superintendencia de Servicios de Salud que tiene una oficina en el edificio del ministerio de Salud Pública de la Provincia.


La primer denuncia
El lunes último, El Territorio denunció que alrededor de 20 empleados de la Cooperativa Frigorífica de esta localidad (Cofra) habrían sido estafados mediante la falsificación de sus firmas para cambiarlos, sin su consentimiento, de obra social. La consecuencia más grave sería la muerte de Luis Acosta, uno de los obreros de 43 años que no habría sido atendido a tiempo por falta de cobertura médica.
La maniobra se habría suscitado a mediados de año, aunque recién fue descubierta pocos días atrás, cuando quisieron utilizar los servicios de la obra social y descubrieron que habían sido dados de baja y cambiados a otra.
La situación fue puesta en conocimiento de la Superintendencia de Servicios de Salud, pero a partir de la muerte de Acosta su familia pidió ver los papeles de afiliación social. “Se nota que le falsificaron la firma a mi papá”, dijo una de las hijas.
Al momento de realizar el traspaso de obra social, sólo se declaró al trabajador y no a su grupo familiar.


Se multiplican los casos en Leandro N. Alem

Leandro N. Alem.  Luego de haber tomado estado público el cambio de obra social en forma inconsulta, a varios trabajadores de la Cooperativa Frigorífica de Alem (Cofra), varios damnificados comenzaron a dar cuenta de sus experiencias en los medios de comunicación local.
El caso mas notorio es el de una persona que dijo ser empleado de una importante empresa local que tuvo que sortear un difícil momento en tiempos en que su esposa, debía ser intervenida quirúrgicamente.El hombre, quien prefirió mantener su identidad en reserva, contó en una radio local que su esposa debía ser operada de apendicitis, en una clínica privada de la ciudad, cuando descubrió la maniobra.
 Además agregó que la gerenciadora, en un primer momento,  no le había querido reconocer sus gastos, lo que lo obligó a firmar una serie de documentos, que ascendían a  un compromiso económico de  tres mil pesos, para que su mujer pueda ser operada con sus médicos de confianza.
Finalmente, luego de concurrir en varias oportunidades y amenazar con llevar el asunto a la justicia, habría logrado que la empresa, titular de la obra social de ceramistas en la Provincia, le reconocieran los gastos de la intervención.
Entre los damnificados por hechos similares habrían obreros de varias industrias tabacaleras y muchos que, por no utilizar sus obras sociales, no se han percatado del cambio.

Sin atención
Pese a que la gerenciadora de salud en cuestión, posee un sistema de policonsultorios recientemente inaugurados en la ciudad, ninguna de las dos clínicas privadas más importantes y que concentran el grueso de la atención sanitaria local trabaja con estas obras sociales, por lo que  muchas personas no pueden atenderse en ellas.
Varios profesionales médicos que prefieren mantener su identidad en reserva, contaban ayer a este medio que “tratamientos iniciados han debido ser cortados por la maniobra que hasta el momento, nadie se hace cargo” decía un galeno que contabilizó no menos de 10 de sus pacientes que fueron víctimas de esta maniobra.

“En un ratito te dan los carnés”
Sergio Sagais, quien es empleado de Cofra y uno de los que salió a denunciar por este medio el pasado lunes la maniobra del cambio de su obra social a Ceramistas, había dicho que en esta maniobra hecha sin su consentimiento, no le habían incluido a su grupo familiar y que pese a reclamar en varias oportunidades, no tuvo ninguna respuesta. “Ayer (por el lunes) fui a Oberá y me atendieron en la empresa de salud,me dieron todos los carnés de mi esposa e hijos” decía Sagais y atribuía el cambio de conducta por parte de la empresa a que “estaban todos con la nota del diario, e inclusive me empezaron a mostrar papeles de coberturas a otros y me dijeron que me quedara tranquilo que lo que tenga que gastar por mi enfermedad me lo van a cubrir” manifestaba.