Nueva versión estima que tenían a Cristian en la periferia de Posadas

Lunes 3 de mayo de 2004
Otros investigadores que habrían tenido el relato de un arrepentido creen que el secuestro del estudiante Cristian Eduardo Schaerer, quien fue privado de la libertad el 21 de septiembre de 2003 y aún no apareció, habría sido ordenado por una poderosa gavilla de narcotraficantes que opera desde la ciudad paraguaya de Pedro Juan Caballero, y que el muchacho, antes de ser enviado fuera de la Argentina, estuvo cautivo en una casa de la ciudad de Posadas.
Según informaron fuentes confidenciales de la investigación a periodistas de Buenos Aires que se contactaron con El Territorio, se estima que el audaz rapto del estudiante habría sido ideado por un grupo de temibles narcos que actúa desde el área de Pedro Juan Caballero y que se conectó con los miembros de la denominada Banda de las Tres Fronteras, quienes llevaron adelante el secuestro de la víctima, por el cual se pagó un importante rescate en Ciudad del Este, a comienzos de noviembre de 2003, pasando previamente su madre con el dinero por la ciudad de Encarnación, vecina a Posadas, desde donde por medio de teléfonos celulares la condujeron hasta esa ciudad de la triple frontera para realizar la entrega del dinero.
En el marco de la nueva investigación que sería puesta en conocimiento del fiscal de la causa en breve se sospecha que el joven, antes de ser llevado por los marginales fuera de la Argentina, pudo haber estado prisionero en una vivienda de las afueras de Posadas luego de ser trasladado desde Corrientes en un camión marca Mercedes-Benz 1114.
Los pesquisas consideran que los peligrosos malvivientes condujeron a Cristian a Paraguay o Brasil mediante el uso de una de las lanchas que la gavilla emplea para traficar estupefacientes e incurrir en actos de contrabando supuestamente con base nada menos que en la localidad de Santa Ana, donde aseguran que hay dos embarcaciones guardadas en el taller de un cómplice del grupo cuyo apodo y apellido se conoce pero se reservaron por cuestiones de seguridad y para preservar el avance de la investigación.

Organización internacional
Según fue señalado por el confidente arrepentido, la tenebrosa organización de Pedro Juan Caballero tendría diferentes contactos en el parque industrial de Santa Ana, y parte de la droga que ingresa en suelo argentino sería comercializada también en la provincia de Buenos Aires, principalmente en jurisdicción del partido de La Matanza, así como en otras naciones, como por ejemplo en Chile.
Esta situación sería admitida en diferentes reportes de las fuerzas de seguridad nacionales que actúan en Misiones y están encargadas de la represión del narcotráfico y del contrabando y que ya habían enviado un informe señalando que hay células en algunas fuerzas de la zona que estarían confabuladas con los narcos.
Las ganancias obtenidas mediante la venta de la droga es utilizada, en parte, para la financiación de otras actividades ilícitas, como la concreción de raptos con fines extorsivos.
Siguiendo esta línea, el arrepentido involucró en la operación también a un comisario correntino, otro posadeño y a un abogado también posadeño, con quienes aseguran que se organizó parte del operativo.
Como se conocen todos los nombres de las personas supuestamente involucradas, inclusive de la propietaria de la vivienda donde habrían tenido oculto a Cristian, de los comisarios y de los abogados, los mismos serán puestos a disposición de la justicia para que sean investigados.
Cristian fue secuestrado en la jornada del 21 de septiembre pasado por cuatro individuos armados, quienes lo interceptaron a escasos metros de su domicilio, en la capital correntina.
A partir de ese momento, sus familiares y allegados cumplieron varias marchas en reclamo de justicia y de un pronto esclarecimiento del caso.
En una de esas marchas estuvo presente Juan Carlos Blumberg, padre del asesinado Axel Blumberg, quien concurrió a Corrientes para brindar su apoyo y dialogar con los amigos de Cristian.
Sin embargo, a pesar de que sus parientes abonaron el rescate que pedían los malvivientes, el paradero del rehén constituye un misterio para los funcionarios judiciales de esta provincia, quienes detuvieron a varias personas en el marco de la investigación, incluyendo a algunas de Misiones que fueron atrapadas en la localidad de San Javier.


Seis detenidos hasta la fecha
La investigación de la causa tiene en prisión y procesadas por secuestro extorsivo a seis personas: Ángel Barbieri, Yudith Alvarenga, Oscar y Sergio Salgán, Néstor Barzuck y Pamela Ramos, estos dos últimos detenidos por la policía de Misiones en esta provincia como parte de la banda que secuestró al joven.
El abogado querellante Ernesto González afirma que la figura penal de “secuestro extorsivo” se agravaba por la cantidad de personas intervinientes en el caso.
"Después de esto no les corresponden menos de veinte años a cada uno de los detenidos", dijo González. "Pero yo voy a pedir la máxima pena establecida que es de 25 años", adelantó.
"Ahora tienen la oportunidad de hablar y colaborar con las investigaciones porque las penas se agravarían si Cristian no aparece", indicó unas semanas atrás cuando la cámara confirmó los procesamientos de todos.
Una hipótesis surgida del defensor de uno de los detenidos sugiere que Cristian fue desaparecido por su propio padre, un ex funcionario provincial prófugo de la justicia por casos de corrupción, que actualmente reside en el Paraguay, pero esa teoría caería con las confirmaciones de los procesamientos y más ahora con los nuevos datos que podrían echar un poco de luz a la causa.
El fiscal de la causa, Oscar Resoagli, sigue trabajando en el caso y, según trascendió en un diario de Buenos Aires en la mañana de ayer, los nuevos datos podrían aportar pistas muy firmes para determinar el verdadero paradero del joven, si continúa vivo o fue ultimado. Hasta se podría llegar a descubrir a toda la banda involucrada en el secuestro.