Investigan el supuesto aborto de joven de 21 años
Viernes 20 de marzo de 2009
La Policía y la justicia local investigan un supuesto caso de aborto.
El hecho se conoció ayer alrededor de las 9.30, cuando Mariela (21) fue hasta el hospital de área y manifestó al médico de guardia que minutos antes cuando se fue al baño tipo letrina en su domicilio, ubicado en el barrio Prosol, perdió su embarazo que llevaba aproximadamente cinco meses de gestación.
La joven dijo al galeno que el bebé cayó en el pozo de la letrina. Ante esta situación la muchacha quedó internada en observación, mientras que personal del nosocomio dio aviso a la Policía para que tome intervención en el caso.
Tras las primeras averiguaciones y con una orden judicial, los uniformados fueron hasta la vivienda de la joven y realizaron un allanamiento donde procedieron al secuestro de varios fármacos y rescataron el cuerpito del bebé, que según la madre había caído a la letrina.
Al rescatar a la criatura los oficiales se percataron que el cordón umbilical había sido cortado.
De inmediato llevaron el cadáver al hospital, donde el médico que lo examinó determinó que se trataba de un feto masculino de entre cuatro y cinco meses de gestación, que presentaba dos heridas cortantes en la cara posterior del cuello. Por ello solicitó una autopsia.
El hecho se conoció ayer alrededor de las 9.30, cuando Mariela (21) fue hasta el hospital de área y manifestó al médico de guardia que minutos antes cuando se fue al baño tipo letrina en su domicilio, ubicado en el barrio Prosol, perdió su embarazo que llevaba aproximadamente cinco meses de gestación.
La joven dijo al galeno que el bebé cayó en el pozo de la letrina. Ante esta situación la muchacha quedó internada en observación, mientras que personal del nosocomio dio aviso a la Policía para que tome intervención en el caso.
Tras las primeras averiguaciones y con una orden judicial, los uniformados fueron hasta la vivienda de la joven y realizaron un allanamiento donde procedieron al secuestro de varios fármacos y rescataron el cuerpito del bebé, que según la madre había caído a la letrina.
Al rescatar a la criatura los oficiales se percataron que el cordón umbilical había sido cortado.
De inmediato llevaron el cadáver al hospital, donde el médico que lo examinó determinó que se trataba de un feto masculino de entre cuatro y cinco meses de gestación, que presentaba dos heridas cortantes en la cara posterior del cuello. Por ello solicitó una autopsia.
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