El final es en donde partí

Viernes 20 de marzo de 2009
La dama y el vagabundo. | Interpretado por Fito Rizzutti y Lucía Amarilla

Las ciudades enriquecidas por numerosos habitantes tienen la paradoja de mujeres y hombres solitarios adonde quiera que uno vaya.
Justamente, Corina y Papá Noel son dos personajes ficticios pero que están inspirados en dos personas reales de Posadas, según contó Carolina Gularte, creadora de la obra teatral Baldío lleno o el 17.
En el argumento, ella es una extraña viuda y tiene un carácter ingenuo a causa de su vida ermitaña.
Él es un linyera que un día invade el baldío donde la mujer suele alimentar a los gatos callejeros.
Ambos interrumpen sus vidas solitarias para disputarse por esa parcela de tierra abandonada por los demás.
Caracterizados por los actores Lucía Amarilla y Rodolfo Rizzutti, la obra escrita y dirigida por Gularte tiene una carga poética a veces emotiva, otras hilarante. La excelente puesta y las actuaciones magistrales de ambos actores maravillaron a los espectadores y convencieron al jurado del Instituto Nacional de Teatro para que sea la obra que representara a Misiones en el encuentro más importante de teatro en el país.
Baldío lleno… es la obra misioneras que competirá en la Fiesta Nacional del Teatro que tendrá sede central en El Chaco, desde el jueves.
Hoy podrá verse en Espacio Reciclado a las 22, ubicado en el barrio de Villa Urquiza, por calle Misiones 3040, a una cuadra de Trincheras y López Torres.
La obra fue estrenada en mayo pasado, luego de una preparación de siete meses para el grupo En Busca, dirigido por Gularte.
Gularte creó esta historia en 2004 con la tutoría del prestigioso dramaturgo Mauricio Kartún.
La primera experiencia como directora surgió en 1994, con el grupo Siete mujeres en busca de un nombre con quienes presentó Vamos muertas amigas,  obra que fue presentada en la Fiesta de Teatro Nacional que se realizó ese año en Tucumán.
 Entre otras creaciones breves, vendrían después otras obras más extensas escritas y dirigidas por Gularte, como Cerca de la Orilla, la reciente obra de títeres ecológicos El bastón de los abrazos y Más costanera, que ganó un premio de dramaturgos de Argentores y que fue el puntapié para ser discípula de Kartún.
“Él trabaja mucho la cuestión del dramaturgo desde la escritura, casi desde la literatura. Me hizo correrme bastante de la dirección. En principio me costó bastante, después fui sin negar ese rol de dirección, aprendiendo la función de los personajes, más allá de quien los interpretara a posteriori. En el caso de Kartún es muy buen docente, un maestro. Respetaba el estilo de cada uno. Fue la última beca que aceptó en forma individual. Entonces todo era muy intensivo”.

¿Cómo surgió la historia de “Baldío lleno…”?
Me llamaba la atención que Posadas estaba creciendo bastante. Por donde yo vivía, cerca de la escuela Normal, había una señora que le daba todos los días de comer a todos los gatos. Después, siempre pasaba cerca de una esquina un señor barbudo, un vagabundo. Yo siempre les retaba a los chicos que le tiraban piedras. Los dos personajes existen en la ciudad de Posadas y pesando el tema de soledad, los veía a esas personas tan solas, tan anónimas, tan características de una ciudad grande que se me ocurrió esto: ¿Qué pasaría si ambos se encontraran?. Después, la historia empezó como andar sola. Los personajes me ganaban, decían lo que querían decir. Yo miro mucho. Me gusta mucho mirar a la gente. Después, cuando la gente vio la obra venía y decía. ‘Hay una señora con gatos en villa cabello’. Entonces empecé a notar que hay gente así en todos lados.

¿Cuál es la esencia de la historia?
La cuestión de la soledad. En cómo con un poco de creatividad pueden esas personas encontrarse uno con otro. Utilizan a los gatos como medio. Antes, (el personaje Papá Noel) se hace pasar por un gato. Ella termina creyendo eso. Les sirve para encontrarse sin negar la realidad, sin tampoco dejar un mensaje didáctico sino que la imaginación y el absurdo a veces nos ayudan a encontrarnos con el otro.

¿El amor es la solución de todo conflicto?
Sí, sin dudas. No sé si llegan acá a una instancia de amor. El fin es el comienzo. Que ambos se empezaron a encontrar. Ese puede ser el comienzo.

¿En qué otro proyecto estás trabajando?
Estamos empezando. Elegimos una obra que se llama Prudencia, que un poco es bastante humor negro. Es con Eduardo Giménez, Marcelo Magri y Fito Rizzutti. Habla sobre la paranoia de la inseguridad, que también en Posadas existe, que antes era sólo en otros lugares. Eduardo hizo la asistencia de Baldío... Hace rato, él quería hacer algo de humor. Como directora es válido no siempre tener que elegir una obra. La propuesta viene de él, que está en contacto con la realidad constantemente. Es docente, en varias escuelas. También estamos abocados a la quinta edición de De la idea a la puesta, que se va hacer en julio. Ya tenemos 16 obras de distintas gentes, edades, estéticas y también del interior. Vamos a empezar a repartir a los directores todas estas obras breves.