El Gobierno coparticipará las retenciones a la soja

Viernes 20 de marzo de 2009
La presidenta Cristina Fernández anunció ayer que el gobierno nacional coparticipará el 30 por ciento de las retenciones a la soja, en una movida dirigida asegurar la relación con los gobernadores en momentos en que crece la protesta agropecuaria.
“He tomado la decisión de que, uno de los derechos de exportación, a la soja, sirva para crear un fondo federal solidario para ser coparticipado con provincias y municipios”, informó la presidente en la Residencia de Olivos, junto a gobernadores, ministros, diputados e intendentes.
El anuncio se llevó a cabo en una jornada en donde proliferaron cortes de rutas en el interior, luego de que los diputados oficialistas se negaran a tratar un proyecto de ley de la oposición para rebajar las retenciones.
Fernández precisó que la coparticipación de las retenciones a la soja se hará en una relación de “70 por ciento para la Nación y 30 para las provincias” y que el mismo esquema se deberá seguir en cada estado con las comunas.
“Estos fondos que van a ser remitidos en forma automática, sin ningún cargo a través del Banco Nación, que será destinado a infraestructura social, viviendas, escuelas, agua potable, cloacas”, señaló la mandataria quien dijo que la medida se tomará a través de un Decreto de Necesidad y Urgencia.
La presidente estimó que el costo será 1.776 millones de dólares, equivalentes a 6.520 millones de pesos, que representan el 11 por ciento de la masa coparticipable y que impactará negativamente en el superávit fiscal de la Nación.
Por otro lado, la jefa de Estado admitió que debido a la crisis económica disminuye la recaudación fiscal y que por ello las provincias reciben menos dinero.
“Lo cierto es que la recaudación ha crecido menos que en estos años y esto tendrá impacto en las economías municipales y provinciales”, tuvo que admitir la primera mandataria.
En rigor, la movida busca ahora enfrentar a los productores rurales con los gobernadores e intendentes peronistas que pueden resultar aliados en el reclamo de una política sectorial.
De hecho, pone a los ruralistas en la disyuntiva de liquidar la soja que tienen en silos por unos 3.000 millones de dólares o comenzar a recibir las críticas de la dirigencia local, por no dejar que fluyan los fondos destinados obras.


La Presidente viajó anoche a Brasil
La presidente Cristina Fernández de Kirchner partió anoche, a las 19.36 rumbo a San Pablo, Brasil, para participar desde hoy en un encuentro entre empresarios de ambos países.
El avión que traslada a Fernández de Kirchner partió desde el aeroparque metropolitano, rumbo al país vecino.
La mandataria se reunirá hoy con el titular de la Federación de Industrias del Estado de San Pablo (FIESP), Paulo Skaf, en una movida destinada a calmar el ánimo de los empresarios de Brasil sobre las crecientes dificultades que tienen para exportar a Argentina.Posteriormente se reunirá con su colega brasileño Luiz Inácio Lula Da Silva.


Alejar el riesgo de una alianza
Con el lanzamiento del Fondo Federal Solidario, el Gobierno alejó el riesgo de una alianza entre la dirigencia agropecuaria y las autoridades políticas de provincias y municipios, que a partir de ahora tienen la pelota en su campo.
Las provincias cerraron 2008 con un déficit que todos los analistas aseguran que se acrecentará cuando finalice el año en curso. En ese estado de estrechez financiera, ya enfrentan el descontento de los gremios docentes por los bajos salarios que perciben, lo que prenuncia futuros conflictos con otros empleados públicos.
Las entidades del agro, pese a no haberse logrado el quórum en la sesión  en Diputados, alcanzaron una adhesión de más de cien legisladores y esperaban confiadas la nueva composición de las cámaras a partir del 10 de diciembre.
Las dos partes estaban objetivamente unidas por un elemento en común: las retenciones. Los recursos girados por el Fondo Federal Solidario quizás no sean suficientes para neutralizar el déficit de las provincias. Pero sobran para evitar un riesgo político que -a la luz de la urgencia kirchnerista por adelantar las elecciones- parece mucho más peligroso: mayores deserciones que pongan en juego las mayorías en el Senado y en Diputados.
Después de todo, la chequera sigue en manos de la Nación. Y lo que se gira por el nuevo Fondo Federal se puede recortar de otras partidas.

Por Marcelo Bátiz