Un campeón doblemente Argentino

Lunes 29 de octubre de 2007
Argentino “Tino” Demetrio (14) es un pibe con un físico privilegiado. A pesar de su corta edad, ya mide más de 1,80 metros de altura y pesa 97 kilos, atributos que le otorgan una condición inmejorable para el lanzamiento de la bala.
Pero además, el fornido lanzador posee otra virtud esencial para consolidar a todo buen atleta: es aplicado en el entrenamiento y obsesivo por mejorar la técnica, un aspecto clave a su edad.
Tales atributos lo llevaron a consagrarse campeón sub 14 en el reciente Nacional Interescolar, que se realizó en Mar del Plata, siendo el único misionero que clasificó directamente al Sudamericano de la especialidad, que se realizará en La Serena, Chile, en diciembre próximo.
Para Tino dicho logro es la suma de sus condiciones naturales y de la dedicación diaria, pero también del apoyo de su entrenador y su familia, que aunque sea algo atípica, no deja de brindarle todo el respaldo y el amor que necesita.
Por esos raros designios de la vida, desde que era un bebé de nueve meses Tino reside en la Aldea Infantil SOS de Oberá, un hogar sustituto que le brinda contención a él y a varios de sus hermanos.
De todas formas, el pibe nunca perdió contacto con su mamá biológica y la visita con frecuencia. Precisamente, el fin de semana viajó entusiasmado a General Alvear para mostrarle orgulloso la medalla dorada a su madre.
“También le voy a mostrar las fotos y ella se va a poner muy contenta”, comentó Tino con cierta timidez.

Gran potencial
A pesar de que recién hace poco más de un año que se inició en el atletismo, Argentino Demetrio ya se consagró bicampeón local, zonal y provincial en lanzamiento de bala.
Incluso, sin demasiada experiencia, el año pasado logró un meritorio noveno puesto en el Nacional Interescolar de Río Tercero, Córdoba.
El primero que observó sus condiciones fue Leonardo Jost, quien era su profesor de Educación Física en el Instituto Herman Gmeinner, donde asistía entonces.
Más tarde se sumó a la Escuela de Atletismo Municipal y el profesor Marcelo Caso, especializado en atletismo, diagramó un trabajo más específico que pronto dio buenos frutos.
“Comenzamos a entrenar en marzo con una frecuencia de dos a tres veces por semana, hasta que empezó a ir casi todos los días y tuvo una gran evolución, tanto en las marcas como en la técnica”, precisó Caso.
El profe destacó que “Tino tiene muchas condiciones por dos aspectos: primero por su talla y masa muscular, y segundo por su explosividad”.  
Según el profesional, tales virtudes son claves para lograr un buen rendimiento en el lanzamiento de la bala.
De todas formas, dejó en claro que hoy por hoy la preparación de Tino está enfocada en mejorar la técnica, no tanto en el resultado.
Por su parte, la joven promesa aseguró: “Voy a seguir entrenando muy fuerte para el Sudamericano y me tengo fe”. Además, subrayó el apoyo del profe, de la directora de la Escuela 237 y de su gran familia, los que cada día lo alientan a luchar por sus sueños.

La evolución del “pequeño”
Argentino Demetrio se inició en el lanzamiento de la bala el año pasado y desde entonces su evolución fue constante.
En el 2006 ganó las instancias local, zonal y provincial de los Intercolegiales, con marcas de 9,84 metros, 11,37 y 11,50 metros, respectivamente.
Además, finalizó noveno en el Nacional de Río Tercero, Córdoba, con un lanzamiento de 11,65 metros.
Ya este año, volvió a imponerse en todas las instancias del ámbito provincial, con marcas de 12,78; 13,75 y 13,03.
Mientras que en el Nacional de Mar del Plata se impuso con una marca 13,92 metros, aunque vale subrayar que en la serie clasificatoria alcanzó los 14,02.