Falleció Hamilton Naki, colaborador en el primer trasplante de corazón

Domingo 12 de junio de 2005
Hamilton Naki, un ex jardinero que colaboró en el primer trasplante de corazón efectuado en el mundo pero tuvo que ocultarlo durante años, falleció a los 78 años en su humilde residencia en un suburbio de Ciudad del Cabo.
Sus exequias fúnebres serán el martes en el suburbio Langa de esta ciudad, informó la Universidad de Ciudad del Cabo en un tributo a su memoria publicado en su página de la internet. Naki falleció el 29 de mayo a los 78 años, al parecer por problemas cardíacos y asma.
“Tiene la habilidad que yo no tengo”, destacó el doctor Christiaan Barnard en una entrevista con The Associated Press en 1993. “Si Hamilton hubiese tenido la oportunidad de operar, probablemente hubiera sido un brillante cirujano”.
De raza negra y de una familia pobre, Naki abandonó la escuela sin oficio y halló su primer trabajo a los catorce años, cortando césped y prestando servicio en las canchas de tenis de la Universidad de Ciudad del Cabo.
En 1954 fue ascendido para ayudar en el cuidado de los animales de laboratorio. Muy pronto progresó, de limpiar jaulas a un trabajo más avanzado dentro del mismo, después que un profesor le pidió que ayudara a anestesiar a los animales usados en el entrenamiento de estudiantes en cirugía.
Barnard le pidió a Naki que integrara su equipo de apoyo en la primera exitosa operación de trasplante de corazón en el mundo, en diciembre de 1967. Su participación violaba las leyes de segregación racial del país, que señalaba que los negros no deberían recibir entrenamiento médico, ni deberían trabajar en ambientes sólo para blancos, ni tener contacto con pacientes blancos.
Naki era conocido especialmente por enseñar a los estudiantes de medicina a realizar complicados trasplantes de hígado en cerdos, un procedimiento que se dice es más complicado que los trasplantes de corazón en los humanos.
Los médicos que observaron el trabajo de Naki solían describir cómo lograba suturar diminutos vasos sanguíneos con sorprendente delicadeza y precisión, y completar en silencio operaciones que los estudiantes de medicina comenzaban. Naki solía recordar con cariño cómo los estudiantes de medicina le pedían consejo. “Es por eso que me llamaban el padre cirujano”, dijo en una ocasión. 
Años después, cuando desapareció el sistema de segregación racial en 1994, se revelaron las contribuciones de Naki. En el 2002, el presidente Thabo Mbeki lo condecoró con la principal orden del país por sus años de servicio público. Al año siguiente, le fue otorgado un título de medicina honorífico en reconocimiento por sus años de entrenamiento a jóvenes médicos que llegaron a ser cirujanos famosos.


Entrenador de cirujanos
Cuando se jubiló en 1991, sólo había llegado a ser asistente de laboratorio. Pero tuvo que contentarse con su pequeña pensión de jardinero, en vista de que su trabajo especializado nunca había sido revelado. Asimismo, dijo en una entrevista que “en esos días uno tenía que aceptar lo que ellos decían porque no había otra vía, porque era la ley que reinaba”'.