Nuevos incidentes aéreos acrecentaron ayer la tensión entre Turquía y Rusia, que prosiguió sus bombardeos en Siria. Una fuente militar siria afirmó que se habían registrado bombardeos rusos en Palmira, pero Moscú lo desmintió. Según Rusia, sus aviones bombardearon a doce objetivos del grupo yihadista Estado Islámico (Isis) en la ciudad de Deir Ezzor y en las provincias de Damasco, Idleb y Latakia.