La solidaridad como bandera

Miércoles 20 de septiembre de 2017
Las mujeres de la Cooperativa junto a algunos de los equipos recientemente comprados.
La solidaridad y el voluntariado suelen ser actividades que requieren de bastante esfuerzo. Los palos en el camino son una constante, pero la satisfacción de haber aportado y ayudado reconfortan el alma y animan a seguir adelante.
Así lo entiende el grupo de mujeres que conformó hace 44 años la Cooperadora del Hospital de Niños (Copani) que trata, mediante diferentes actividades, aportar una solución a las necesidades del Hospital de Pediatría Doctor Fernando Barreyro, ya sea en aparatología, insumos, artículos de higiene personal, entre otras cuestiones.
Esta labor de voluntariado comenzó en febrero de 1973con un grupo de amigas, entre las que se encuentran dos de las actuales integrantes, María Virginia Panebianco de Rathhof y Yolanda Leoni, presidenta y vicepresidenta, respectivamente.
Estas mujeres -entre las que también se cuenta a María Mercedes del Rosario Estévez de Kuri, María del Carmen Peláez de Givone, Victoria Curi de Maccia y Marité Monferrán- se reúnen todos los martes en el hospital, hacen sus balances, recorren las distintas salas y están en relación constante con la dirección del nosocomio para atender a las necesidades que surjan.
“Todas tenemos el mismo interés, nos pusimos la camiseta del hospital y tiramos del mismo carro. Esto tiene más satisfacciones que palos en el camino. Somos muy felices dando”, sostuvo María Virginia, más conocida como Nena.
Es así, que estas mujeres que año a año, gracias a su constancia y dedicación, dotan al hospital de distintos insumos y aparatología, en lo que va de este año compraron, entre otras cosas, un otomicroscopio y dos frentolus led para el servicio de otorrinolaringología, mientras que aportaron al área de kinesiología un magnetoterapia y un ultrasonido, para la rehabilitación de pacientes traumatológicos. Es así que en este 2017, gracias al aporte de Copani, el hospital recibió la cifra de 303. 937 pesos en equipamiento e insumos.

Dar es mejor que recibir
Las mujeres coinciden en que se trata de un trabajo de hormiga. Si bien actualmente consiguen aportes de diferentes empresas, anteriormente contaban con un buen  grupo de socios que también colaboraba con una cuota y ayudaba de distintas maneras.
Sin embargo, en la actualidad, ese número se redujo notablemente, por lo que instan a la sociedad a que se acerque y aporte su granito de arena. Quienes estén interesados pueden encontrarlas todos los martes desde las 9 en el hospital o bien escribirles al Facebook, donde se las encuentra como Copani.
“Al principio nos juntábamos en la casa de alguna y hacíamos los pijamas para los chicos. Yo no sabía coser, pero me tocaba recortar los moldes en el diario, la otra unía, otra cosía. Era un trabajo bien repartido”, recordó Beba sobre los inicios.
Asimismo, en todos estos años organizaron venta de comida, desfiles, shows musicales como los de María Martha Serra Lima y Sandra Mihanovich o el partido a beneficio en e1992 en la cancha de Guaraní Antonio Franco que contó con la participación de Diego Armando Maradona.
“La gente es muy solidaria. Y el que menos tiene es el que más trata de dar. Para nosotros es una satisfacción muy grande salir del hospital y sentir que hicimos algo”, destacó Yolanda.