Jerusalén: el drama sin fin

Domingo 17 de diciembre de 2017
La decisión del pesidente estadounidense Donald Trump de reconocer a Jerusalén como capital de Israel intensificó el conflicto entre palestinos e israelíes, en la última semana.
El enfrentamiento se remonta a principios del siglo XX a causa de la construcción de los asentamientos israelíes en territorios palestinos como Cisjordania y Jerusalén Oriental. Se trata de una de las principales problemáticas entre ambos bandos del conflicto en Medio Oriente.
En la actualidad, Israel reclama soberanía sobre la ciudad de Jerusalén (sagrada para judíos, musulmanes y cristianos) y asegura que es su capital tras tomar Jerusalén Oriental en 1967. Esto no es reconocido internacionalmente. Los palestinos quieren que Jerusalén Oriental sea su capital.
En el marco de esta disputa, el presidente estadounidense dio la orden de trasladar a Jerusalén la embajada estadounidenses en Tel Aviv.
Con esta medida rompió con décadas de política de Estado norteamericana y de garantías internacionales a los palestinos de que el status de la ciudad sagrada debe determinarse en negociaciones de paz con Israel.
La iniciativa generó la reacción de los diferentes líderes del mundo que, en algunos casos, apoyaron la medida y en otros no.
Los gobernantes islámicos urgieron al mundo a reconocer a Jerusalén este como capital de Palestina, en un cumbre en la que el presidente palestino, Mahmud Abbas, dijo que Estados Unidos ya no tiene ningún rol en el proceso de paz de Medio Oriente luego de haber reconocido a Jerusalén como capital de Israel.
Convocados por el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, líderes de los 57 países de la Organización para la Cooperación Islámica se reunieron en Estambul para coordinar una respuesta a la decisión del presidente estadounidense, Donald Trump, de reconocer a Jerusalén como capital israelí.
Con el propio mundo islámico atravesado por hondas divisiones, la cumbre no llegó a acordar ninguna acción o sanción concreta contra Israel o Estados Unidos.
No obstante, en el comunicado final del encuentro declararon a “Jerusalén este como capital del Estado de Palestina” e instaron “a todos los países a reconocer el Estado de Palestina y a Jerusalén este como su capital ocupada por Israel”.
Los jefes de Estado o de gobierno o los ministros presentes dijeron que la decisión de Donald Trump es “nula y legalmente inválida”, “socava deliberadamente todos los esfuerzos de paz y servirá de estímulo al extremismo y el terrorismo islámico”.

El pedido de los palestinos
Los palestinos quieren que la parte oriental de Jerusalén, o Jerusalén este, capturada por Israel en una guerra en 1967 y luego anexionada, sea capital de su futuro Estado.
Aunque Israel dice que toda Jerusalén es su capital “única e indivisible”, la comunidad internacional no reconoce a Jerusalén este como parte de Israel, y todos los países del mundo, incluyendo a Argentina, tienen su embajada ante Israel en Tel Aviv.
Erdogan -quien se presenta a sí mismo como una campeón de la causa palestina- dijo que Israel era un estado que se define por la “ocupación” y el “terror”, en otra de sus diatribas contra el liderazgo israelí.
“Con esta decisión, Israel fue recompensado por todas sus actividades terroristas. Es Trump el que concedió este premio”, dijo Erdogan.
Agregó que todos los países que “valoran la ley internacional y la justicia deberían reconocer a Jerusalén este como capital de Palestina” y que las naciones musulmanas “nunca renunciarán a esta exigencia”, informó la cadena BBC.
Más tarde, en un apasionado discurso, Abbas sostuvo que la decisión de Trump es un “crimen” que amenaza la paz mundial y que el pueblo palestino ya no puede aceptar a Estados Unidos como mediador, aunque aseguró que su gobierno sigue comprometido con las resoluciones internacionales que formaron la base del proceso.
“No aceptamos ningún rol de Estados Unidos en el proceso político desde ahora en adelante. Porque está completamente sesgado hacia Israel”, declaró.

Piden ayuda a Arabia Saudita
El ministro de Inteligencia de Israel, Yisrael Katz, alentó el miércoles al príncipe heredero de Arabia Saudita a visitar el país, en un intento de aumentar la cooperación entre los gobiernos en tiempos en que el mundo musulmán se encuentra agitado por el reconocimiento de Jerusalén como capital de Israel, por parte de Estados Unidos.
En concreto, Katz propuso que Arabia Saudia se involucre como mediador en el proceso de paz entre israelíes y palestinos, indicó el periódico israelí Haaretz.
“Sugiero que Arabia Saudita, como líder del mundo árabe, se involucre en esta iniciativa y ofrezca su patronazgo a los palestinos. Ellos son muy débiles, necesitan que alguien los ayude”, señaló.
El ministro agregó que su país estaría contento de participar en el proceso si Riad forma parte.
“Es importante que no lleguemos a los mismos pensamientos e ideas. Ambas partes deben entender que debe haber concesiones aquí y allá”, agregó, de acuerdo al Jerusalem Post.
Arabia Saudita e Israel no tienen relaciones diplomáticas formales, aunque los gobiernos intentaron mejorarlas en los últimos años y comparten su oposición al régimen de Irán.
La invitación al príncipe Mohammed bin Salman fue hecha durante una entrevista a Katz en el periódico saudita Elaph, pero no hay confirmación aún de que haya aceptado.


Europa rechazó la decisión de Trump La Unión Europea (UE) ratificó que no imitará la polémica decisión de Estados Unidos y no reconocerá a Jerusalén como capital de Israel, luego de que el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, visitara la sede del bloque en Bruselas y pidiera a la UE apoyar una nueva iniciativa de paz estadounidense para Medio Oriente.
En la primera visita oficial de un premier israelí a las instituciones comunitarias en 22 años, Netanyahu dijo que el reconocimiento de Jerusalén como capital israelí por parte del presidente estadounidense, Donald Trump, sólo refleja la realidad sobre el terreno, y agregó que esperaba que muchos países europeos siguieran los mismos pasos.
Pero la jefa de la diplomacia de la UE, Federica Mogherini, quien presidió una reunión entre Netanyahu y ministros de Relaciones Exteriores de países del bloque, respondió que ningún país de la UE planeaba adoptar la posición del presidente estadounidense, que generó extendida condena y desató protestas violentas y choques en Palestina. “Sé que el primer ministro Netanyahu mencionó en un par de ocasiones que espera que otros sigan la decisión del presidente Trump de trasladar la embajada a Jerusalén. Pero puede mantener sus expectativas para otros, porque ese movimiento no llegará por parte de los países miembros de la UE”, dijo Mogherini.


Isis amenazó con ataques tras el anuncio de EE.UU. El Isis amenazó con ataques en suelo estadounidense en represalia por la decisión del gobierno de Donald Trump de reconocer a Jerusalén como la capital de Israel, según difundieron el jueves los órganos de propaganda del grupo terrorista.
En un mensaje publicado en el servicio de mensajería instantánea Telegram titulado Wait for us (Espéranos) e Isis in Manhattan, el grupo yihadista dijo que llevará a cabo ataques en Estados Unidos.
“Llevaremos a cabo más operaciones en su tierra, hasta el último momento, y los quemaremos con las llamas de la guerra que empezaron en Irak, Yemen, Libia y Siria y Afganistán. Solo esperen”, dijo el grupo, que criticó el reconocimiento hecho por Trump de Jerusalén como la capital de Israel. “Las vanguardias de los conquistadores están llegando con lluvias de balas y el fuego de vehículos explosivos”, apuntaron también en el afiche. Washington provocó la molestia y las protestas en el mundo árabe con su decisión sobre Jerusalén.


“La verdad prevalecerá y otros países se unirán al reconocimiento” El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, aseguró el miércoles que no se siente “impresionado” por las declaraciones de los países musulmanes, que pidieron que la comunidad internacional reconozca a Jerusalén-Este como capital de un Estado palestino, en una reunión de la Organización de Cooperación Islámica (OCI) en Estambul. (ver líderes islámicos piden).
“Todas esas declaraciones no nos impresionan”, dijo Netanyahu en un discurso pronunciado tras la petición de la OCI lanzada a la comunidad internacional de declarar Jerusalén-Este capital de un Estado palestino, en respuesta a la decisión estadounidense de considerar la Ciudad Santa como capital de Israel.
El portavoz del Ministerio de Israel de Asuntos Exteriores, Emmanuel Nahshon, calificó por su parte de “declaración provocadora” el comunicado final de la OCI sobre Jerusalén.
“Los palestinos harían mejor en reconocer la realidad y actuar a favor de la paz, y no del extremismo”, añadió el primer ministro.
“Deberían reconocer un hecho más sobre Jerusalén: no solo es la capital de Israel, sino que respetamos en Jerusalén la libertad de culto para todas las religiones y nosotros en Oriente Medio somos los que mejor lo hacemos”, añadió.
“A fin de cuentas, la verdad prevalecerá y muchos otros países reconocerán Jerusalén como la capital de Israel y trasladarán allí su embajada”, predijo.


Por Carolina Ozuna
Periodista