Habría asesinado a su mamá de un balazo por la disputa de un terreno

Martes 26 de julio de 2016
Peritos de Criminalística establecieron que el disparo fue efectuado desde adentro de la vivienda. | Foto: Norma Traid
Desde una posible venganza de un hombre denunciado por abuso sexual por la propia víctima, hasta uno de los tantos hechos de inseguridad que se viven en la provincia, se barajaron como posibles hipótesis en torno a la muerte de María Ester Yess, una comerciante de 63 años, quien el domingo por la noche fue encontrada dentro de su kiosco con un balazo en la cabeza.
Más allá de que todas estas versiones tenían sustento suficiente, durante la siesta de ayer fueron desestimadas por completo por los pesquisas, luego de que los resultados de una prueba de parafina hecha a la propia hija de la víctima, de 31 años, dieran positivos. De esta manera la causa dio un giro totalmente inesperado, por lo menos para los vecinos de la calle Río Grande, quienes quedaron atónitos ante la noticia.
Por esta razón, tanto la mujer de 31 años; identificada como Andrea M., como una ex pareja de esta última, y que habría colaborado en la comisión del hecho, fueron detenidos en distintos procedimientos hechos por miembros de la Unidad Regional IV.
De acuerdo a los elementos recolectados hasta el momento, la situación procesal de la presunta agresora es más que complicada, ya que se estableció que una vieja disputa por terrenos habría sido el desencadenante del desenlace fatal.

Supuesto robo
Minutos después de las 21 del domingo, un llamado telefónico de la propia hija de la víctima, comunicaba a efectivos de la Seccional Primera de un trágico hecho de robo. Para cuando los uniformados llegaron a la vivienda de la calle Río Negro, ubicada a unos 100 metros del hospital local y a otros 200 de la Municipalidad -en el centro de la localidad-, se toparon con el cuerpo de Yess tendido dentro del kiosco que tenía en la parte posterior de su propiedad.
En relación a las causas del feroz ataque, la hija de la comerciante dio a entender que su mamá habría recibido el proyectil en el momento en que se acercó a la ventana por la cual tenía acostumbrada atender a sus clientes.
A su vez manifestó que un posible hecho de robo, con final trágico pudo haber sido la causa de muerte.

Entrega voluntaria
Po otro lado, y desde que se conoció el deceso de la mujer, quien quedó como principal sospechoso en el caso fue Sebastián R., quien en su momento había efectuado amenazas en contra de Yess luego de que la comerciante lo denunciara por abuso sexual contra una de sus nietas menores de edad.
Durante la mañana de ayer y mientras la Policía lo buscaba intensamente, el hombre se presentó espontáneamente junto a su abogado en el Juzgado de Instrucción IV, con la intención de demostrar que él no tuvo ningún tipo de participación en el hecho.
A partir de esto y por decisión del magistrado Rubén Lunge, el sospechoso quedó detenido.
Luego de las distintas pruebas hechas a esta persona, se comprobó que no estuvo en el lugar del crimen a la hora de la muerte de Yess, y ayudado por el repentino giro que dio la causa, a las pocas horas recuperó la libertad. Se supo además que el hombre había recuperado la libertad semanas atrás, luego de permanecer varios meses en la Unidad Penal VI.

Giro en la causa
A oídos de los investigadores llegó el dato que tiempo atrás, tanto la víctima como su hija y una ex pareja de esta última habían protagonizado una feroz disputa por un terreno ubicado a un costado de la propiedad de la comerciante.
Incluso trascendió que la dueña de casa habría echado a la pareja a causa de las constantes discusiones que se generaban por el inmueble. La situación procesal de la hija de Yess se agravó cuando los peritos de la División Criminalística de la Unidad Regional IV establecieron que la trayectoria del disparo que recibió la mujer era de adentro hacia fuera de la casa, lo cual echaba por tierra la coartada de Andrea, quien había señalado que su mamá había sido atacada desde la calle por un desconocido.
Esto hizo que los pesquisas practicaran ayer por la siesta la prueba de parafina a la mujer de 31 años y los resultados dieron positivo en la mano derecha. Por ello, quedó detenida y ya en horas de la tarde se procedió al arresto también de Paulino O. (34), quien al parecer habría colaborado con su ex pareja en el crimen.
Hasta ayer por la noche la Policía continuaba con la búsqueda del arma utilizada; un revólver calibre 22.