En la primera quincena de julio, cada turista gastó en promedio 1800 pesos

El receso invernal trajo alivio al sector económico en Misiones y así lo reflejan los números. Si bien todavía falta procesar el movimiento turístico de esta semana, teniendo en cuenta que aún en siete provincias hay vacaciones, hasta el momento las cifras son alentadoras.
En las primeras dos semanas de julio hubo 64 mil arribos a la provincia y se estima un gasto total de 111 millones de pesos. A juzgar por esos números, es posible estimar que cada turista gastó en Misiones 1800 pesos aproximadamente, en una estadía de uno a tres días.
El dato se desprende de la evaluación realizada por el Ministerio de Turismo local sobre la primera quincena de este mes y fue dado a conocer ayer. Ya el domingo El Territorio había accedido a un informe preliminar que daba cuenta de que las expectativas del sector hotelero y gastronómico habían sido superadas. “Recibí un mensaje el último sabado de que no había lugar para alojarse en Posadas, estaba todo lleno”, dijo el ministro José María Arrúa, claramente satisfecho por el panorama actual.
El funcionario admitió que fueron seis meses complicados para el turismo en la tierra colorada y lo que se vivió en esta temporada fue un repunte en la actividad. "Esto demuestra una recuperación en el sector luego de meses complejos", insistió y remarcó que el desarrollo del Turismo Nacional (categoría del automovilismo nacional) inclinó la balanza favorablemente para Posadas. "Calculamos que vamos a superar los números del año pasado" sostuvo Arrúa.
Las primeras dos semanas hubo 63 por ciento de ocupación hotelera en Misiones, siendo Iguazú la plaza más elegida trepando el porcentaje a 96,6.
El tiempo de estadía varió según las localidades. En Iguazú, se estima, el turista estuvo entre uno y tres días; en Posadas de uno a cinco días; y en la zona de El Soberbio dos días.
En la Terminal de Ómnibus de Posadas, la semana última también registró un importante movimiento. Hubo refuerzos desde Buenos Aires, Salta, Mar del Plata y Córdoba. Unos 600 colectivos por día, entre media distancia y larga distancia, cuando fuera de temporada el flujo de coches diarios alcanza a 500. "Expectativas ampliamente superadas”, señalaron desde la casilla de informes de la Terminal de Ómnibus.

Conflicto en temporada
En plena temporada turística de invierno, el sindicato del sector gastronómico y hotelero Uthgra se manifestó ayer en tres hoteles de Puerto Iguazú para apoyar a empleados con conflictos laborales teniendo en cuenta deudas, sueldos mal liquidados, despidos y malas condiciones laborales.
En esta oportunidad, incendiaron neumáticos frente a un hotel ubicado sobre la ruta nacional 12, a escasos metros de la zona primaria aduanera, donde un empleado denunció una deuda de dos meses de trabajo a un valor cercano a 15 mil pesos. Por su parte, el propietario del emprendimiento descartó conflictos y dijo que el resto de los empleados estaba trabajando normalmente.






Lanzan programa ecoturístico Posadas. Con la presencia de los ministros de Ecología, Verónica Derna; de Turismo José María Arrúa; y de Educación, Ivonne Aquino, se realizó ayer la presentación del programa denominado Un Turista para Misiones, Un Árbol para el Planeta. Esta propuesta tiene por finalidad que la provincia plante un árbol por cada turista que llegue. Se lanzó entonces un sistema de padrinazgos del que también participarán los estudiantes de las escuelas. En una primera etapa que comenzará en septiembre se plantarán 5 mil árboles en diferentes puntos de Misiones
El programa busca destacar la decisión de cada turista que opta por venir a la tierra colorada. Cuando alguien decide venir a Misiones, estará devolviendo un árbol al planeta. Por otra parte, como se trata de un proyecto grande que involucra a cerca de dos millones de turistas por año, con una cifra similar de árboles, incluye al Ministerio de Ecología con la provisión de plantines de especies nativas y las acciones en campo de guardaparques, guardabosques y guardafaunas; y el Ministerio de Educación con el compromiso de los estudiantes de plantar los árboles.


Con pico y pala creó novedosa forma de cultivos y atrae a turistas El Soberbio (enviados especiales). Cuando hace 20 años Leonardo Rangel (43), oriundo de Montevideo, Uruguay, comenzó a plantar sus primeros cultivos en medio de la selva -en la zona Alto Uruguay- jamás imaginó que esa iniciativa atraería a decenas de turistas a la localidad. Con pala y pico trabajó el monte y creó lo que hoy se conoce como la reserva Yasí-Yateré, ubicada sobre la ruta costera Nº 2 a unos 30 kilómetros de los Saltos del Moconá.
El lugar se caracteriza por tener una forma de cultivo sustentable y ecológico conocido como permacultura, que permite la producción de diferentes especies sin dañar la tierra a través de la utilización de químicos.
“Es cultivar dentro de la selva y cuidar de ella y el entorno que la rodea”, contó Leonardo Rangel, quien lleva adelante el proyecto en compañía de su esposa Adriana Fiorentine y dos amigos.
La particularidad del lugar que cuenta con senderos impulsa la visita de turistas de otras partes del país y también extranjeros provenientes de Suiza, Canadá, Brasil, Bolivia y Estados Unidos.
La reserva está rodeada de plantas frutales, medicinales, aromáticas y condimentos. Hay plantaciones de helechos, orquídeas, bromelias, ananá y banana. Los cultivos son reconocidos por los turistas que, mientras abren paso entre las ramas y árboles, aprenden sobre permacultura.
“Hay muchas especies misioneras que a veces tenés que caminar kilómetros y acá están todas juntas dentro del mismo sendero”, explicó Leonardo.
En la reserva, la familia también elabora licores y mermeladas, que luego del recorrido los turistas pueden degustar y, en caso que quieran, comprarlos por precios que rondan entre los 35 y 75 pesos.

Como en un jardín botánico
La base de la permacultura consiste en tener la mayor producción en el menor esfuerzo, imitando la naturaleza. El predio está rodeado de árboles y cascadas de la zona y tiene un sendero armado.
“El recorrido dura una hora y media de caminata, donde se va explicando toda la dinámica de la selva y su naturaleza. El sendero corto dura 40 minutos y tiene que ver con permacultura y plantas medicinales y frutas tropicales”, indicó el fundador.
Además los visitantes llegan de varios puntos del país para participar de los cursos que se dictan dentro de la reserva. La última capacitación se llevó adelante el miércoles y estuvo a cargo de los miembros del Instituto Ná Luum, que se encargó de formar alrededor de 30 ecologistas.
En sus inicios, con el poco dinero que pudo juntar en su ciudad, Leonardo alquiló un local en la localidad de San Ignacio para la venta de golosinas y comidas. De esta manera, pudo conseguir el dinero y alcanzó a comprar las tierras en El Soberbio, donde construyó la reserva.
“Yo quería vivir en el monte y estar en contacto con la naturaleza”, contó Leonardo que también trabaja en los Saltos del Moconá como guardaparques. Poder vivir en el monte significó que tenga que dejar su ciudad natal y muchas veces tener que esperar días para poder ver a sus padres.
“Había veces que pasaban tres años y no podía volver a ver a mis padres, me iba a dedo hasta Uruguay”, recordó.

Proyectan encuentro mundial
Por otro lado, los referentes del permacultura del Instituto Permanente Ná Luum aseguraron que en el año 2020 la provincia será sede para el encuentro mundial de permacultura.
“Elegimos esta región por la naturaleza que tiene y por ser triple frontera, ya comenzamos a construir el espacio donde se hará el encuentro”, contó Facundo Martínez, coordinador de Ná Luum.
Para esta actividad ya comenzaron las preparaciones en la zona.