Empleados de la Anses denuncian discriminación

Martes 2 de septiembre de 2014
En el marco de un paro por tiempo indeterminado y estado de asamblea permanente, una veintena de trabajadores de la delegación local de la Administración Nacional de Seguridad Social (Anses) denunciaron “violencia laboral y acoso psicológico” por parte de la jefatura regional del organismo.
La asamblea de la víspera se realizó con representación de los gremios Apops, ATE y Secasfpi, con la presencia de la secretaria nacional de interior de Apops, Miriam Cáceres Quijano.
Se trataron temas conflictivos que se vienen presentando “de manera reiterada por decisiones de la jefatura regional a cargo de Roberto Porcaro y replicadas sin objeciones por el jefe de la Udai, Héctor Balbuena”, mencionaron en el acta suscripta. Cuestionaron el manejo arbitrario de las autoridades citadas en la asignación de beneficios y capacitaciones, como también ineficacia en la solución de problemas edilicios que saltan a la vista.
“Desde hace tiempo, a excepción de cuatro personas, la mayoría de los compañeros venimos sufriendo la discriminación y persecución por parte del jefe regional, a pesar de lo cual hacemos nuestro mayor esfuerzo para seguir atendiendo a más de 500 personas por día. Sin embargo, los beneficiarios de todo nuestro esfuerzo son siempre las mismas personas que conforman el entorno del jefe regional”, indicó Cáceres Quijano.
Entre los cuestionamientos al jefe regional, comentaron que catorce trabajadores se inscribieron en la capacitación para realizar la nueva moratoria de la Anses, lo que los habilita a participar en operativos del organismo.
“Pero nos encontramos con la sorpresa que el viernes desde la regional informaron el nombre de una sola persona que no estaba inscripta y que además se encontraba en comisión”, explicaron.
Denunciaron además la sistemática violación del convenio colectivo de trabajo, situación que deriva en sobre carga de tareas y problemas de salud. Al respecto, comentaron el caso de una funcionaria con 26 años de servicio que sufrió un ACV a consecuencia de un pico de hipertensión.
Los manifestantes lamentaron los inconvenientes que se generan a quienes a diario realizan trámites, al tiempo que adelantaron que la medida de  fuerza se extenderá hasta obtener respuestas concretas a los reclamos.
También alertaron sobre el deterioro del edificio, con caída de mampostería, filtraciones, humedad y baños con problemas; cableados y computadoras obsoletas y pasillos obstruidos con material en desuso.